Vampires will never hurt you ִֶָ 𝗖𝗵𝗮𝗻𝗹𝗶𝘅

OO2

Felix casi se olvida de la fecha.

Su semana había sido agitada, entre turnos de tarde y clases matutinas, y honestamente Felix estaba demasiado agotado para pensar en vampiros. Había planeado sentarse adentro y ver las reposiciones de los dramas de la noche, tal vez decirle a Jisung que viniera con un poco de helado, pero luego fue a sacar la basura y vio a un vampiro muy familiar parado afuera de la puerta de su complejo de apartamentos. Chan vestía un lindo par de jeans y una camisa blanca; honestamente, Felix pensó que el blanco era muy desafortunado color para usar para alguien que bebe sangre: sus ojos son de un tono más oscuro de rojo que la última vez que se habían visto.

Los ojos de Chan recorrieron la apariencia de Felix mientras salía del edificio, mirando por encima de sus pantalones de pijama y su camisa rota, y finalmente se detuvo en la bolsa de basura que tenía en la mano.

"Me encanta tu bolso", dijo Chan, con sarcasmo en su voz, "¿es la nueva colección de otoño?".

"Vete a la mierda", gimió Felix. "Voy a - volveré enseguida, solo necesito cambiarme. ¿Quieres entrar?"

Un segundo, y Felix se dio cuenta de su error. La sonrisa de comemierda que se extendió por el rostro de Chan fue exasperante, y Felix se preguntó cuántos pecados había cometido en su vida pasada para merecer esto. No había tenido la intención de invitar al vampiro a entrar, pero su madre lo había educado para que fuera un chico educado y él no había pensado bien las cosas. Ser amable era algo natural para Felix, y ahora lo puso en una situación muy complicada.

Mierda.

"Maldita sea."

Chan resopló. "¿Cómo la jodes tanto?"

"Es mi especialidad", dijo Felix sin expresión, gritando por dentro. "Solo quédate aquí, ¿de acuerdo? Sé un buen chupasangre y no entres a mi apartamento solo porque ahora puedes".

"Me invitaste a entrar", le recordó Chan.

"Retiro esa invitación".

"No funciona así, Lee Felix".

Felix lo sabía. Había estado expuesto a suficientes medios de comunicación de vampiros y estaba más que descontento con el resultado de su propia estupidez, porque debería saberlo mejor. Nunca debería bajar la guardia con Bang Chan.

"Quédate aquí."

Chan se encogió de hombros y dijo que esperaría, dijo que no iría a ningún lado, pero también se aseguró de decirle a Felix que era una persona muy impaciente. Felix resistió la tentación de darle la espalda al vampiro mientras tiraba su bolsa de basura a la papelera y luego corría de vuelta a su apartamento. Claro, si Felix hubiera sido una persona inteligente, podría haberse quedado en casa y negarse a salir de nuevo, pero ahora había invitado a Chan, un vampiro, a entrar en su complejo de apartamentos.

Fui demasiado educado y accidentalmente invité a un vampiro a mi casa, una autobiografía by Lee Felix.

No es que Felix realmente pensara que Chan lo lastimaría. El vampiro era raro y extrañamente dedicado a cuidar de sus comidas, pero Felix solía ser un buen juez de carácter y nada en Chan decía que era realmente peligroso. Claro, Felix sabía que debería ser un poco cauteloso, pero sobre todo porque no tenía idea de cuándo Chan realmente planeaba beber su sangre.

No había sido agradable la primera vez, así que Felix asumió que tampoco lo sería la próxima vez, pero poco a poco estaba aceptando el hecho de que el vampiro no se iba a rendir. Cuanto antes Felix aceptara su destino entrante, mejor.

Felix se puso algo decente que estaba en la parte limpia de su armario; un lindo suéter amarillo y un par de pantalones anchos. Lo haría, porque Felix no se estaba arreglando para un vampiro mediocre, especialmente uno que estaba tratando de beber su sangre. Su cabello era decente, olía bien y usaba sus bonitas Converse, incluso.