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Jeongin se sentó en el sofá con una expresión helada, como si fuera el rey de la casa, y Yongbok se ubicó a su lado en una posición protectora, sin quitarle los ojos de encima a Wheein

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Jeongin se sentó en el sofá con una expresión helada, como si fuera el rey de la casa, y Yongbok se ubicó a su lado en una posición protectora, sin quitarle los ojos de encima a Wheein.

Chan, por otro lado, sonrió ferozmente, acariciándole el cabello a Yongsun.

―¿Realmente creías que yo iba a permitir que lo mataran, mamá? ―preguntó en un gruñido feroz―. Luego de todo lo que pasamos, ¿creías que iba a descuidarme así?

Jeongin se rió en voz baja.

―Me pilló por sorpresa ―le dijo Jeongin con aire indiferente―, pero ya sabemos de sus jueguitos, Wheein. Ahora ―se volteó hacia Chan, como si estuvieran hablando del clima―, ¿está listo el divorcio, cariño?

Chan ladeó la cabeza, mientras su madre y Wheein permanecían en silencio, descolocadas todavía.

―Está en trámite ―dijo Chan―, necesitamos firmar sólo unos papeles y estará todo listo.

―No lo haré ―habló Wheein por primera vez―, no creas que lo haré, Chan, no pretendo...

Firmarás todos esos papeles, Wheein ―gruñó Chan, con la gracia desapareciendo de su voz, y Wheein se tensó, sus hombros crispándose―, vas a darme el divorcio sin reclamar.

―¡Chan! ―gritó su madre―. ¿Quién te crees que eres? ¡No creas que...!

―No me manejarás más, Hyejin ―escupió Chan―, esto se acabó, ¿no lo entiendes, acaso? ¿Qué sigues pretendiendo? ―Chan alzó su barbilla―. Yongbok ya es grande, ¿crees que al Gobierno le importará que esté vivo a estas alturas? A ellos les importará más saber que los Bang les hayan ocultado todo esto, con lo que respetan las tradiciones, supuestamente, y si nos quieren quitar la empresa... Bueno, me importa una mierda. Nunca la he querido.

―Bueno, yo sí la quiero ―reclamó Yongbok.

―Por dios, tú cállate bebé gordo ―espetó Chan.

Jeongin abrazó a Yongbok para que dejara de balbucear cosas, indignado.

Wheein apretó su boca un instante, con sus ojos llenos de lágrimas, pero dejó de mirar a Chan para enfocar su vista en Jeongin, el odio brillando en su rostro.

―¿Estás feliz ahora, bastardo? ―le escupió con ira―. ¡¿Estás feliz por todo lo que has hecho?!

Jeongin se rió.

―Deja el show, Wheein ―habló, sin borrar la sonrisa―, no eres una víctima aquí. Pero respondiendo... Estoy increíblemente feliz ―echó a un lado la cabeza, mostrando su marca―. Catorce años, y no pudiste lograr que Chan te marcara. No pudiste conseguirlo, pero yo... ―soltó una risa más fuerte―, un patético omega que fue usado, lo consiguió antes que tú. ¿No es eso divertido, Wheein?

Wheein se movió con rapidez, gritando por el odio y lanzándose para golpearlo, pero Yongbok también reaccionó con velocidad para impedir alguna pelea, agarrando a su tía por la cintura.

Yuanfen² ☘ ChanInDonde viven las historias. Descúbrelo ahora