Una Vida a tu Lado

"74"

Narra Grecia Evans

Había quedado en verme con Tanner a espaldas de Fabián, me había enterado de que Vinos Campbell estaba puesta en venta, y ya había un posible comprador, y tenía una idea.

—Hola Tanner —besó mi mejilla

Me senté frente a él y Jake a mi lado

—¿Cómo estás? —levantó su mano e hizo una seña en forma de saludo para Jake, el niño le correspondió

—Perdona la tardanza, pase a ver a mi suegra —asintió sin darle mucha importancia

Hace años, mi amistad con Tanner se volvió más fuerte cuando tuvo un problema, se metió con una mujer casada, fue un par de veces pero eso le trajo consecuencias, luego descubrí que esa mujer, era Alana. Esa aventura con Tanner casi le costó su matrimonio.

Pero finalmente se quedó con su marido, y Matthew no supo la verdadera identidad de Tanner.

—No te preocupes. ¿Quieren ordenar algo?

—Quiero un jugo de naranja. —mire a Jake —¿No quieres algo?

Él pareció pensar un poco y luego dijo:

—Pastel de chocolate.

Tanner ordenó lo que pedimos y mientras mi hijo comía atentamente su pastel Tanner comenzó a hablarme de la empresa que le corresponde a mi marido.

—Están en venta el total máximo de las acciones, el que las compré será el dueño total de lo que se conoce como Vinos Campbell.

Cubrí mi boca con mis manos he iba a hablar hasta que alguien más se aproximó

—¿Grecia? —levanté la visita y lo mire

—Colton —me levanté de mi asiento y lo abrace

—¿Cómo estás?

—Bien, Te presento a Tanner...

—Ya nos conocíamos —se dieron la mano

—Oh, entonces te presento a Jake —el niño seguía comiendo

—Tu hijo... —lo miró —¿Saliste sola? No es seguro que andes sola, sabes que...

—Vinimos con cuatro camionetas de escoltas —suspiro. Miró su reloj distraídamente

—Tengo que irme

Miró los papeles sobre la mesa, sin pensar se los pase

—Están vendiendo la compañía

—No te preocupes Grecia, pero tengo que irme —se miró una última vez con Tanner y se despidió

Nos volvimos a sentar y fui clara con cada una de mis palabras. 

—Quiero comprar la empresa

Abrió sus ojos como platos

—¿Estás loca? No te van a vender a ti

—Podemos usar un presta nombre

—Grecia...

—Tanner —tomé sus manos —Por favor ayúdame

—Esto lo haces por él —dijo alzando un poco la voz, ambos miramos a Jake

—No digas nada frente a él, por favor... —exigí

—Digo la verdad Grecia —se relamió los labios —Todo lo haces por él, quieres comprar las acciones para luego dárselas

—¿Y cuál es el problema? —contraataqué —Es mi esposo, y si en mis manos está la capacidad, y el dinero para ayudarlo, lo haré