La Corona De Sangre

capitulo 1

El comienzo.

Que gran comienzo matutino para terminar secuestrada.

Y más si terminas en medio de un desierto con un incompetente, alcholico y charlatán.

Así estoy yo.

No entiendo cómo es que yo, una chica que ni cocinar un huevo frito sin quemarlo, puede reinar un reino.

Uno al cual para colmo tengo que levantar yo misma.

Tengo extrictas palabras de los inútiles de mis secuestradores — hermanos — de buscar a unas personas en especial las cuales se hacen llamar subtitos de la reina sangrienta.

O sea yo.

¿Me ven con cara de ser sangrienta y violenta?

Puedo ser impulsiva pero nunca una asesina serial.

Estoy segura que no están entendiendo como puede ser que mis hermanos me hayan secuestrado y dejarme en medio de un desierto con un hombre desconocido que dice ser 'mi guardian'.

No puede caminar recto y piensa defenderme.

Les explico, yo vengo de un mundo que se maneja en secciónes.

Cuatro reinos, uno de ellos está catalogado como inapropiado para tener algún tipo de hospedaje, a menos que seas un mendigo o tachado cómo un oscuro ante la sociedad.

Yo vivía en el reino azul, un reino bastante repulsivo en mi opinión. Si no sos de alta sociedad tenés que rezar para tener un plato de comida todas las noches.

En ese reino todo es manejado por la arrogancia y codicia, nunca esperes nada de nadie.

Gratis.

Después están los reinos blanco y verde, son casi iguales al de los azules pero con la diferencia que todo se trata de puras apariencias, falsas.

Ellos por fuera son humildes y amorosos, pero por dentro están podridos como todos los que habitan en el.

Mi familia tuvo la oportunidad de tener un rango alto en la sociedad, venimos del reino negro, un reino que terminó en la derrota por culpa de la codicia, odio y envidia de su rey, mi tatara abuelo.

Mis dos hermanos Vicent y Theodore siempre me dijeron que yo por derecho legítimo tendría que reinarlo. Existe una profecía que dice que una mujer con valentía y humildad levantará a los oscuros junto a su reino.

Yo no soy ni valiente ni humilde aunque no quiera admitirlo.

Soy buena persona, pero no sirvo como reina y por eso de mi secuestro.

Mi familia está cegada con que yo tengo que seguir los pasos de la profecía. Yo era feliz dónde estaba, si no era el mejor lugar ni las mejores personas, pero era aceptable.

Mi nombre es Morgana, técnicamente es un apodo pero con el tiempo se volvió el real.

Mi verdadero de nombre es Lydia del Rey.

Un nombre y apellido irónico en mi opinión.

Bueno, ya les expliqué más o menos la trama de mi vida para que entiendan mi posición en esta situación.