Moonlight

La Boda

Narrador.

Barcode miraba su traje de bodas, no se sentía animado ni mucho menos feliz, había conocido a Jeff apenas hace unos días cuando anunciaron su compromiso a ambos y discutieron los preparativos; a pesar de admitir que Jeff era guapo y de sentir una leve atracción por el, sabe que Satur no siente nada más que odio, reveló y, casi puede asegurar, que el disgusto es palpable en su mirada y en el tono de voz que uso para decirle esa noche que el odiaba el compromiso y que no se hiciera ilusiones sobre ellos en un futuro puesto que no habría un ellos jamás.

Soltó un suspiro y mirando a sus doncellas, asintió con la cabeza dando a entender que podían proceder, las doncellas notaron su rostro triste y de cierta forma ellas también sintieron tristeza y pena por el.

-no se preocupe alteza, ya vera que con el tiempo aprenderán a convivir juntos y si todo sale bien, para cuando menos lo espere estarán totalmente enamorados- animo una de sus doncellas, Joy, una noble vampira de 7000 años. Que a pesar de no envejecer era considerada la más (por decirlo de cierta forma) anciana del grupo.

-lo sé Joy, pero.. dudo que sea en esta historia- admitió con tristeza- el me lo ha dejado en claro la noche que nos conocimos- las doncellas suspiraron al unisonó, ellas sabían lo que había pasado y no dudaron en hacerlo sentir mejor luego de eso.

-tranquilo, Code, estoy segura que si te ponemos más guapo y hermoso de lo que estás entonces recapacitara y no dejara de molestarte hasta que le ames perdidamente como el te amara- animó la más joven de sus doncellas

-la cuestión aquí, Lizz, es que yo ya estoy enamorado- susurro lo último bajando el rostro.

Las doncellas se miraron asombradas al escucharlo y con lastima terminaron de arreglar su maquillaje y su cabello, Barcode miro su reflejo en el espejo, asombrado por su nuevo aspecto. Las doncellas alagaron su aspecto angelical, su pálida piel, sus cabellos negros azabache, su piel sin imperfecciones, su delicado rostro, su fina nariz y sus labios carnosos y rosas. El maquillaje le sentaba bien a su apariencia inocente y angelical y su cabello bien peinado y acomodado enamoraría a cualquiera. 

 A pesar de que su boda había sido planeada con poco tiempo, Code daba crédito al sastre real por el bonito atuendo que había preparado para su boda, aunque no era el que creyó tener, ni el esposo con el que soñó casarse, nada de eso era lo que el pensó, quiso o deseo. pero nada podía hacer ya. Sus finas ropas de seda y de hermoso color blanco que mostraban la pureza de aquel ser que era alagado por sus damas de compañía; pantalones blancos bien planchados, Camisa de encaje blanca perfectamente acomodada junto con collares de cadena plateada y perlas.

-majestad, el rey Mile y su esposo, la reina Apo- anunció el guardia

-Barcode- entro Mile llamando al menor

-Majestad- reverenció al igual que las doncellas que estaban presentes en la habitación

-Code- hablo con carillo Apo yendo hacia su hermano que volvía a mirarse en el espejo- te vez hermoso- alago tomándolo por los hombros 

-No tanto como lo había imaginado- argumento melancólico

-Barqui- volteo sus hombros quedando de frente a el- sé que esto no es lo que querías, pero no hay nada más que hacer- pauso- lo lamento, en serio que lo lamento pero...-

-lo sé- interrumpió Barcode- se que ambos lo intentaron, no se culpen por esto, padre así lo quiso y no hay nada que podamos hacer contra eso- bajo su mirada y con el dorso de sus mano intento limpiar con cuidado las lagrimas que amenazaban con salir- será mejor que me de prisa, la ceremonia está por empezar- apuro

-Barcode- llamo Mile

-Mile, no me mires con pena ni lastima, porque al final de está boda, mi pueblo, tu pueblo, serán recompensados con está unión- sonrió a los mayores- al final, todo esto es por el reino- sentencio 

Mile le miro con impotencia, su suegro, el rey y padre de Apo y Barcode, había estipulado y ordenado que el menor de sus hijos se tenía que casar con Jeff Satur, ya que la unión entre ambos reinos traería grandes recompensas en lo económico y militar; Mile al inicio de negó a cumplir con aquella orden, pero el rey lo había obligado y amenazado de tal forma que estaba escrito en un gran papel que aunque se quemara o se rompiera nunca podría faltarse a la palaba del monarca o las consecuencias caerían sobre los tres.

Barcode caminaba por los pasillos para entrar a la capilla donde el monarca los casaría, sabía cual era su destino de ahora en adelante, pero como un cordero camino al matadero, camino hasta estar frente al altar y esperar que su martirio termine pronto. Miraba a su alrededor, estando en el altar, frente al que sería su esposo, su rostro serio y estoico, sus fulminantes ojos llenos de juicio y desagrado.

Antes de entrar en la capilla había escuchado como su padre le regañaba por su apariencia simple y por no vestir el traje que ellos habían preparado, pero para Barcode esos pantalones negros, esa camisa de cuello alto y ese saco hacían brillar a Jeff y los tenis blancos le hacían lucir mejor que el "aburrido traje" que el sastre había hecho para la boda.

El monarca hablaba sobre la unión, pero ninguno de los dos prestaba atención, Barcode miraba la belleza de su esposo y Jeff miraba con tristeza algún otro punto entre la gente que había asistido a la ceremonia; Code miro curioso y discreto hacia donde su futuro esposo veía y fue ahí en ese entonces donde lo entendió todo, entendió por que la negación, su rechazo y el disgusto que mostro esa noche, en una de las primeras filas de sillas estaba un joven vestido de blanco, con el rostro lleno de pena y dolor; sus ojos conectaron y vio la tristeza y la envidia en esos ojos carmín por el dolor.

El llamado del rey lo trajo de vuelta a la ceremonia, tomo con manos temblorosas la copa que el monarca le ofrecía para completar la ceremonia. Sus oídos pitaban y su corazón parecía que volvía a latir con una fuerza descomunal; bebió de la copa y la paso a su esposo que lo veía con seriedad. Una vez que ambos bebieron de la copa, el monarca dio unas palabras y la parte más difícil venía a continuación, aquella que lo uniría a Jeff, aquello que definía su futuro  y aquella que le condenaría a la desgracia.

Jeff se acerco a Barcode con pasos largos y cautelosos, miro por última vez a aquel chico y con un poco de brusquedad, descubrió el cuello y hombro de Code para susurrar un "perdóname" que sabía que esas disculpas no iban para el sino que eran disculpas para su amado y con un agudo dolor, los colmillos de Jeff se clavaron es la unión entre su cuello y el hombro. Barcode odio aquello, pero su dolor y tristeza eran más grandes que ese odio y rezando a la luna que lo libre de ese destino escucho a la gente aplaudir y al monarca felicitarlos y finalmente los labios de ambos se unieron en un beso lleno de sentimientos dolorosos, y la sangre que en un principio era dulce sabía tan amarga para ambos. 

Capitulo 1: LA BODA.

Hapy_holi