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"¡Lo encontré!" Exclama un preocupado Usopp, corriendo hasta un montón de escombros que estaban derretidos por veneno, gracias a unos trajes anti-químicos creados por Caesar, el narizón junto con la ayuda de Zoro y Sanji, pudieron sacar al rey pirata sin ser afectados por la masa tóxica, encontrándose al llegar, con un anciano de casi 90 años, que reflejaba todo menos juventud "Si que se ve mal" Comenta el peliverde viendo la apariencia del hombre de goma, a pesar del estado de Luffy, estos sabían que su actual condición no se debía al veneno de Kimura, sino al desgaste de su cuerpo.

"Le dije que no usara más esa técnica, pero nunca escucha" Dice un Chopper en su forma humana, mientras con los demás nakamas llevaban a un Luffy inconsciente hasta el Sunny, habían pasado 20 minutos desde lo ocurrido con Kimura, y los chicos no tardaron en encontrar a su capitán, quien por los efectos secundarios de Watterfall man, era prácticamente irreconocible, piel arrugada, delgado y con mechones de cabello blanco, un anciano en todos los sentidos.

Estaba tan débil, que los mugiwaras sentían que en cualquier momento sus huesos se harían polvo, razón por la cual, cuando llegaron a enfermería, trataron de ser lo más cuidadosos al acostarlo y conectarlo el monitor. Mientras pasaba esto, Lanny que estaba en brazos de Robin, veía la escena con ojos confundidos, por el olor a carne y goma, pudo reconocer que se trataba de su padre, aunque no entendía porque dormía y se veía diferente ¿Estaba usando un disfraz?

Levantando sus bracitos para acercarse a su padre, trató de decirle a los nakamas que la dejaran acompañar al mayor, pero estando Luffy en una situación tan crítica, los mugiwaras sabían que esto no era lo más adecuado, el anciano de goma necesitaba descansar, y un bebé que requería de cuidados no era la mejor compañía, sin embargo, Lanny no entendía esto, desde su perspectiva la tripulación la estaba alejando de él, por lo que con cara triste, llena sus ojos con lágrimas, por suerte, Robin previene esto "Lanny-san, en la biblioteca hay unos libros con dibujos muy divertidos ¿Te gustaría que la tía Robin te llevara para allá?" Pregunta la pelinegra con una sonrisa.

La bebé que ya empezaba a tener los ojos rojos, hace un pequeño estornudo de ardilla y con su sonrisa desdentada abraza a la mayor, "Ninini" Ríe la bebé mientras los nakamas se alegran de que Lanny no empezara a llorar, sí esto hubiese ocurrido, el instinto de Luffy lo habría hecho levantarse de la camilla e ignorar por completo su estado, no por nada el rey de los piratas era conocido por usar haki del emperador al dormir, se preocupaba de otros incluso cuando no era consciente de lo que ocurría a su alrededor.

Así todos se retiran de la enfermería para tratar de dormir un rato, mientras que Robin y Lanny que por la hora también tenían algo de sueño, van hacía la biblioteca que era alumbrada por la luz nocturna.

Caminando hasta uno de los estantes y sacando cinco libros bien gruesos, la arqueóloga se sienta en uno de los sillones verde agua y acomodando a la bebé en su mantita morada, habla "Sabes Lanny-san, cuando estuve en los revolucionarios para ayudar a tu abuelo y tío, Sabo me mencionó lo mucho que siempre quiso escribir un libro en su infancia" Explica Robin haciendo una breve pausa para seguir hablando, "Pero al ocurrir un accidente, no pudo hacerlo hasta dentro de muchos años después" Dice la mujer recordando el relato del rubio.

"Él quería que tu padre leyera un libro aunque fuese una vez en su vida, así que con la ayuda de Koala-san e Inazuma, adaptaron uno de esos libros en un formato que al capitán le llamara la atención leer" Narra la mujer mientras abre uno de los textos y un dibujo tridimensional de un dragón rosa sobre nubes en llamas, iluminan los ojos de la pequeña Monkey D. "Fufufu, creo que me salté como 12 sagas, es sorprendente que todas esas historias entraran en solo 5 pop-up" Ríe una tranquila pelinegra junto a una bebé que hacía una sonrisa de mil soles.

"Mis disculpas, lo mejor será empezar del inicio" Disculpa la arqueóloga cerrando el libro y tomando otro texto que tenía una ilustración de un Luffy más joven acompañado de los primeros nakamas, "Para Sabo-san fue todo un reto adaptar la historia de su hermano como novela, porque cada vez que le preguntaba algo, este no era claro sobre que hablaba, le ponía ápodos prácticamente a todos, contaba como había sido la comida de las islas, daba información aleatoria sobre cualquier cosa que le había llamado la atención, todo un reto, lo entenderás cuando seas mayor" Comenta está viendo como la menor escuchaba con toda la atención del mundo su relato.

"Tardó semanas en recién ordenar cronológicamente lo que había logrado entender, y aún así le faltaba información, por lo que ya rindiéndose, decidió que lo mejor era preguntarnos directamente a nosotros, recibiendo burlas de todos al contar como había perdido casi un mes en tratar de sacar la historia del capitán, para ser el jefe del ejercito revolucionario, tu tío no fue muy listo, fufufu" Dice la pelinegra aún teniendo grabada la expresión del rubio al enterarse de que pudo terminar el libro en menos tiempo "Al menos pudo pasar tiempo con Luffy-san, así que técnicamente tampoco fue tiempo perdiendo" Habla está sonriente revoloteando el cabello de Lanny.

"Pero en fin, estamos aquí para que escuches como tú padre logró convertirse en el rey de los piratas, no como a tu tío le salieron canas verdes por el estrés" Cuenta la mujer bostezando cansada, acto imitado por la menor, los bostezos podían ser muy contagiosos "Todo comenzó con la promesa de un pelirrojo y un sombrero de paja muy especial" La arqueóloga abre el libro y una imagen de un niño de 7 años recibiendo el sombrero con listón rojo ocupan la primera plana "Perdió un brazo a cambio de la nueva generación pirata, sin darse cuenta que ese mismo niño que por accidente comió una akuma no mi, sería quien años más tarde pondría al mundo de cabeza, está es la historia de Monkey D. Luffy"

Hija del rey pirataDonde viven las historias. Descúbrelo ahora