El comienzo de todo...

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*La historia irá acompañada de imágenes para dar referencias a algunas cosas*

Hola Alejandro, un chico de 20 años, blanco y de complexión delgada, mido 1.65, algo callado y reservado, me gusta mucho el anime y ver series o películas.

Ania es mi mejor amiga desde que iba en secundaria, llevamos años siendo mejores amigos, es una chica delgada y hermosa, cabello negro largo, piel muy blanca, con buena figura y bastante femenina.

Y ella siempre me ha gustado, más desde la preparatoria que empezó a madurar su cuerpo, nuestra amistad empezó tras no tener amigos en la secundaria, ella era la única persona que me hablaba y mostraba interés por mi, nos contábamos todo, nuestra vida, nuestras parejas, de todo.

Yo le contaba de las chicas con las que estaba, sin embargo nunca duraba más de 3 meses con ellas, ya que terminábamos por "x" o "y" razón, pero Ania siempre estaba para escuchar mis problemas y yo los suyos; Por otro lado Ania siempre tuvo bastantes novios, con unos duraba mucho tiempo, con otros unos meses y otras veces simplemente eran aventuras.

Yo conocía muy bien a su mamá de Ania, ya que luego me quedaba a dormir en su casa o pasaba por ella antes de ir a la escuela para irnos juntos, todo iba super bien en nuestra amistad.

Todo comenzó cuando entramos a la universidad, ella se quedó en una universidad diferente a la mía, lo cual fue horrible ya que hacíamos todo juntos, siempre me la pasaba con ella en la escuela o saliendo de la escuela.

Como ella quedó en una universidad más lejos su mamá rento una casa chica para ella sola como a una hora de dónde vivía antes, lo cual nos impidió vernos, pero seguíamos hablando por teléfono.

Ella comenzó una relación en su nueva escuela, me contaba todo sobre el, lo cual me hacía sentir "celos" ella nunca supo que me gustaba, por lo que tenía que fingir felicidad por su relación, lo cual me dolía por dentro, y más ahora que ya no hacíamos todo juntos.

Fueron unos meses bastante solitarios, ya que en la universidad no tenía amigos, a pesar de que tenía facciones muy finas, y no era "feo" no se me daba hablar con las chicas, por lo que siempre me dejaban de contestar todos mis intentos de "ligar" con alguien. Fue entonces cuando me di cuenta de cuánto me hacía falta Ania en mi vida y cuánto me gustaba, así que me propuse a declarar mi amor.

En mi mente todo sonaba perfecto, si yo sentía eso por ella, puede que ella sintiera lo mismo por mi, imagine la relación perfecta con ella, ya que hacíamos todo juntos, cómo si fuéramos novios y fuera de lo físico, seríamos la pareja perfecta, así que me propuse a confesarle mi amor, hable con ella para ir a su nueva casa y ahí en persona contarle todo lo que sentía en verdad por ella, quedamos en un día y pensé todo lo que le iba a decir.

Después de una semana llegó el día de por fin verla, así que agarre mis cosas y tome un camión que me llevaba hasta su nueva casa, me quedé de ver con ella en la estación de camiones de su casa y luego de una hora, por fin llegué y la vi, está justo ahí esperándome.

-Ania: ¡Aleeee! ¿Cómo has estado?, Han pasado meses sin verte.

-Alejandro: Bien, muchas gracias te extrañe mucho en verdad.

-Ania: Cuéntame todoooo, como te va en tu la escuela, vamos para mí nueva casa que te la tengo que enseñar, es increíble ahora que vivo sola.

-Alejandro: Claro Ania, jaja que increíble verte, vamos te sigo.

La seguí hasta su nueva casa en la que íbamos platicando de la escuela, me contaba de su novio el cuál se llama Ruben, me conto que estaba teniendo problemas, ya que no era lo mismo para el y que ella no quería dejarlo ya que decía que lo amaba, en ese momento me puse más feliz porque ya estaban teniendo problemas lo cual me daba más oportunidad de poder conquistarla.

Feminizado y humillado a la fuerza por mi mejor amiga y su novio 🔞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora