Provocation || NAMJIN 🔞

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Namjoon tomó un vuelo a Los Ángeles, el primero que encontró y aunque pudo leer en twitter ciertas especulaciones con respecto a ir al mismo destino de Seokjin, luego de un live tan polémico, decidió no indagar.

No eran idiotas... y los fans tampoco.

Llevaban muchísimo tiempo evadiendo esas suposiciones, tanto ellos, como la empresa y aunque ya habían mencionado la posibilidad de compartir con el mundo que llevaban años juntos, nunca se concretaba, quedaba en simples conversaciones que se guardaban en el cajón hasta que una nueva foto juntos aparecía, o un video, o un cruce de miradas cómplices en el escenario recibiendo algún premio...

Seokjin abrió la puerta de su habitación de hotel y ni bien lo hizo, Namjoon ya la estaba atravesando, rodeándolo con sus brazos de manera posesiva y adueñándose de sus labios de forma feroz, hambrienta, como si se hubiera tragado con esfuerzo doce horas de vuelo, donde experimentó una desesperación por encontrarse así con su novio, por tenerlo de esta manera, sintiendo sus manos recorrer su espalda, apretar sus hombros, desordenar su cabello.

Namjoon jadeó, cargando a Jin, haciendo que este rodeara su cintura con sus piernas. El más alto cerró la puerta de una patada y Jin sonrió, lo sentía ansioso y eso lo entusiasmaba.

—No puedo creer que me hayas hecho eso —susurró Nam, adentrándose a la habitación sin molestarse en mirar ningún detalle, quería una cama, un sofá o la superficie que fuera para sentar el cuerpo de Jin y poder tocarlo más a gusto—. Todos te escucharon gemir, no tienes idea de la cantidad de cosas que están diciendo los fans en Internet.

—¿Sorpresa? —Sonrió, enredando sus manos en su cabello una vez que Namjoon lo sentó sobre el tocador de la habitación, el más alto se metió entre sus piernas y Jin las abrió más, para aceptarlo—. Espero que te haya gustado.

—Sabes que sí...

—Puedo imaginarlo... —Jin delineó el labio inferior de Nam, con su dedo pulgar—. Todo este tiempo te estuve recordando, recostado en la cama, tocándote, me gustaría ver eso de nuevo.

Namjoon se mordió el labio para contener su sonrisa, luego atrapó entre sus dientes el dedo de Seokjin.

Por supuesto que ya lo había hecho frente a Jin y por supuesto que también había visto a Jin tocándose, lo sentían muy erótico, pero las ganas siempre podían más y terminaban tocándose mutuamente.

El primero en inclinarse hacia adelante para retomar la sesión de besos fue Nam. Jin lo recibió con energía, enrollando sus brazos alrededor de su cuello, profundizando el beso todo lo que su boca de lo permitía, mientras que, con sus piernas, rodeaba su cintura manteniéndolo cerca, tan pegado a él que podían sentir el miembro del otro poniéndose cada vez más duro con el paso de los segundos y los besos.

Nam bajó sus manos por el costado del cuerpo de su novio, acariciando su espalda de paso, pasando por su cintura y bajando hasta sus muslos, donde los apretó con sus manos separándolos un poco más, como si necesitara aún más espacio para meterse entre Jin y alcanzar a frotarse con él.

Jin movió sus manos por sus brazos y sus hombros, empezando a sacarle la chaqueta de mezclilla, le encantaba desvestir a Namjoon, para otras personas podía ser algo tedioso, pero para él era un ritual importante; por cada prenda los besos se multiplicaban, las caricias iban más allá y podía empezar a sentir los primeros suspiros pesados contra su cuello.

—Quiero escucharte —susurró Nam, desprendiendo los botones del pijama de Jin, tenía la misma ropa que en el live, así que era fácil de recordar—. Pero que esta vez sea solo para mí.

—Siempre es solo para ti —respondió Jin, desabrochando sus jeans y bajándolos solo un poco—, en todo momento solo pensé en ti, era muy difícil concentrarme, tal vez por eso no podía avanzar en el juego.