MELTING (CHAESOO)

capítulo 5

Un día nuevo, y como todos los días, solo pensaba en una cosa, más bien en una persona

Ayer Rose me había dejado muy desconcertada con lo que había hecho, pero también lo hizo hoy, y los días siguientes repitiéndolo

Últimamente se pasaba por mi casa de vez en cuando, decía que simplemente quería perder el tiempo conmigo y era lo que hacíamos

Mentiría si dijera que no hice hasta lo imposible para poder impresionarla, al menos para no aburririla

–¡¡Jisoo!! – me abrazó fuertemente por la espalda

– Rose – respondí casi sin aire, ella no paraba de reír

– habrá barbacoa en tu casa este fin de semana – se puso frente a mí

– si, eso parece

– ¿no es increíble? – se puso frente a mi, al parecer iba de paso – te veo ahí, supongo

– sí, claro – suspiré al verla alejarse

– ¿desde cuándo Rose tan cariñosa contigo? - cuestionaba Jin cuando me acerque

– es una amiga – me senté junto a el en una banca cerca de nuestro salón

– ¿tú? ¿Amiga de Rose?, ¿cómo diablos paso algo como eso?

– yo también me lo estoy preguntando – cuando voltee a verla ella seguía viéndome, luego volteo con sus amigas, parecía contarles algo mientras reía

Me alegraba que Rose se acerque más a mi incluso en el colegio, eso era una muestra de que no se avergonzaba de hablar conmigo

Era mucho decir, Jin y yo éramos simplemente considerados los raros por lo que pocas veces alguien se nos acercaba

Éramos en general personas muy solitarias, por lo que esto para nosotros no era del todo malo

Y ya si queríamos hablar con alguien nos quedábamos hasta tarde en algún juego mientras charlamos por llamada o alguna cosa así

Desde que entre en el colegio el fue mi salvación para no quedar sola, y desde entonces ha sido casi mi único amigo, pero no había duda que era el mejor que tenía

– ¿Hoy te conectarás? Empieza el torneo y pensaba que podíamos hacer equipo

– claro – sonreí, igual no tenía nada mejor que hacer

El resto de las clases fueron igual de aburridas como siempre, no resisisti la tentación y termine por saltarme la última

Fui a la biblioteca a perder el tiempo jugando con el móvil, pero tuve que salir al sonar la campana, si me tomaba más tiempo Rose podría pensar que estaba fumando o algo así

Iba saliendo para ver si me la encontraba cuando sentí unas manos rodearme y nublar mi vista

– adivina quién soy - mi corazón se agitó al sentir esas suaves manos, el aroma acompañado de esa dulce voz le decía todo

– ¿Rose?

– ¿quién más boba? – se puso delante – habrá una tarde de películas en mi casa, solo con dos de mis amigas, ¿quieres unirte?

– yo... Pero no conozco a tus amigas y...

– pero yo estaré y te las presentaré, obviamente

- no lo sé, yo... – llevé mi mano a la cabeza mientras pensaba

- ni te atrevas a negarte, aún me debes lo de mi cumpleaños – era verdad, ella me había invitado, pero ese día mis padres no estaban en buenos términos, así que no pude ir – no creas que lo olvidaré fácil