Todo Por Ti [Pablo Gavi] +18

"Amigos"

Me desperté cerca de las 7:00 de la mañana ya que a las 9:00 tenía que estar ahí. Hice mi rutina de mañana y me puse mi ropa. Básicamente el short de volley y la remera del Barcelona. Me hice una colita y salí de ahí. Obviamente con mi bolso ya armado.

Me subí al auto y traté de arrancar hasta que me di cuenta de que no arrancaba. Traté de nuevo y cuando me di cuenta de que el tiempo lo tenía justo maldije en voz baja.

Usé una bicicleta vieja que mi mamá guardaba en la casa y fui al estadio. Ya iba tarde. Muy tarde. Me iban a matar y era el primer día.

Cuando llegué, dejé mi bici tirada cerca de un auto negro. Un Cupra.

Corrí hasta la cancha, ya que sabía donde quedaba gracias a Gavi. Antes de poder llegar me choqué con un pecho bastante marcado. Cuando miré para arriba lo vi.

-¿Qué hacés acá?

-Vine a ver el entrenamiento junto a unos amigos.

-No espero para ver la noticia de "Pablo Gavi fichado para el equipo de Volleybol femenino del Barça".

Y si. Era Gavi con el que me había chocado. No sé para qué quería ver el entrenamiento pero no le pregunté más y salí corriendo de ahí para la cancha.

Cuando entré todas las miradas se clavaron en mi. Estaban todas mis compañeras y mi entrenadora mirando.

-Hola. Perdón el auto no arrancó.

-No hay problema. Haré que alguien arregle tu coche. Tu debes ser Leah, ¿verdad?-Dijo mi entrenadora mientras se acercaba hacia mi.

-Si

-Bienvenida al Barça. Raul me ha dicho lo bien que juegas. Eso lo comprobaremos hoy. Venga, a correr. Tres vueltas alrededor de la cancha.

Yo dejé mi bolso en un banco y empecé a correr. Una chica se acercó a mí. Era rubia, tenía ojos verdes y una sonrisa muy bonita.

-Hola!- Me dijo emocionada.- Soy Julia. Como no tenés ninguna amiga vine a ser tu primera.

-Tengo amigas solo que no acá.

-No importa,  ahora ellas están en el pasado y yo en tu presente. Yo soy de Argentina también.

No sabía cómo supo eso o cómo lo adivinó, pero no quise preguntar. Era rara pero amable al mismo tiempo. Me caía bien.

Le sonreí hasta que vi un movimiento en las gradas que me hizo mirar. Y ahí estaban. Pablo Gavi y sus "amigos", mejor dicho Pedri Gonzalez, Ansu Fati, Alejandro Balde y Eric García.

Gavi notó mi mirada y me sonrió. Le levanté el dedo del medio y seguí hablando con Julia, como si no me importara que los mejores jugadores del Barça estuvieran mirándome.