Entre composiciones y libros

CAPITULO 1

Eli se encontraba en su trabajo estresada, triste y agotada, ese día para ella era un caos. Debía de terminar su libro, pero ¿Qué final darle a un libro que habías comenzado con la finalidad de que fuera romántico y a mitad de el tú terminabas con el corazón partido en dos?

Al no poder avanzar más con el, solo tomo su bolso y abrigo, saliendo de su oficina dentro de su hogar, para dar un pequeño paseo. Necesitaba despejar sus ideas y que mejor que ir por un café.

Todos los que la conocían se preguntaban el por que de su actitud tan seca de ese día, pero nadie podia imaginarse que acababa de romper con su pareja de cinco años.

Su mejor amiga Yelena, le habia mandado un par de fotos de su novio el cual se encontraba besando a otra chica que ella conocía a la perfección, se suponía que ambos eran amigos o eso le dijo su novio cuando se encontraron por sorpresa en la calle, hace ya unos años.

Ahora sabia lo ciega que habia sido. Lo peor del caso no eran las fotos que le habían mandado, sino que por querer averiguar que todo fuera verdad y no un malentendido, comenzó a buscar algún indicio y los encontró todos y casa uno de ellos.

Pero el ultimo y que le rompió su corazón aun más fue el encontrar a su novio y a la chica en el trabajo de él besándose con demasiado amor; Él nunca se dio cuenta de que ella estaba ahí, pero no pudo ni siquiera actuar en ese momento ella se conocía y sabia lo debil que era en su presencia, por lo que se alejo de él sin contactarlo aunque le mandara mensajes y tratara de hablar con ella.

Ahora una semana después de enterarse de todo, seguía sin poder concentrarse en su propia vida, por lo que sabia lo que debía hacer aunque fuera muy doloroso para ella.

Terminaría con su novio.

Estaba caminando hacia el metro el cual tomaría para llegar a la cafetería, necesitaba un poco de cafeína en su sistema si iba a hacer lo que tenia planeado.

Al llegar a la cafetería fue directo al mostrador no habia mucha gente ese día, quizás por la hora que aun era temprano. Al ya tener su pedido giro con la intensión de ir a una de las mesas junto a la ventana para poder pensar en lo que haría a continuación, pero todo se fue a la borda cuando sintió como su cuerpo se estrellaba contra algo o mejor dicho alguien más.

Su bebida termino por quemarle la mano y hacer que lo soltara provocando que cayera al suelo vaciándose por el suelo y salpicándolos un poco en el pantalón.

-Lo siento, perdón soy muy distraída-fue lo primero que dijo, mientras se agachaba para poder recoger su vaso y tirarlo a la basura-. Me podría prestar su trapeador para limpiar mi desastre.

Eli era una chica demasiado tranquila y siempre que hacia algo mal le gustaba arreglarlo aunque fuera en un lugar publico como ese.

-No se preocupe señorita, ahorita lo limpiamos ¿gustaría otro café?-la joven del mostrador, no pudo enojarse con ella, ya que le pareció una persona con buenas intenciones pero mala suerte.

-Por favor y lo que pida el joven me lo cobra-luego miro al hombre que estaba frente a ella-. Tómelo como disculpa por ensuciar sus pantalones.

El joven frente a ella la miro con una sonrisa, no estaba molesto al parecer.

-No se preocupe, no se nota la mancha y debo decir que ya era momento de lavarlos. Todo pasa por alguna razón ¿no lo cree?-él le extendió su mano-. Aceptare él café solo para que no se sienta culpable. A todo esto soy Eder.

Ambos recibieron su pedido, la chica noto como de la chaqueta del hombre sobresalía una libreta y una pluma, por lo que pudo evitar preguntar.

-Disculpe ¿usted escribe?-mientras que señalaba a su bolsillo, el hombre la miro con nerviosismo para luego sonreír.

-Si se refiere ¿a qué si soy escritor de libros o algo así? No, pero si soy compositor.

Sin que se dieran cuenta ambos terminaron sentados juntos mientras que compartían una platica sobre diferentes temas.

-Eres muy interesante Eli-le dijo el chico con una sonrisa divertida.

-Y dime Eder, ¿en que nuevo proyecto estas creando?

-La verdad es que no tengo nada aun, tengo un pequeño bloqueo desde hace un mes y bueno solo me la paso escribiendo frases que al final no se convierten en nada.

-¿Podría ver?-le hiso una cara tierna.

El chico no podia parar de reír el haber conocido a Eli, era algo increíble para él que hace mucho no se sentía tan en paz en presencia de alguien más.

-Solo no te vayas a burlar por favor.

Le dijo mientras que le pasaba su libreta y ella comenzaba a leer todo, la cara de Eli cambiaba dependiendo de la frase que leía. Cada una de ellas le parecía más interesante y le gustaba, le transmitían diferentes emociones desde felicidad hasta nostalgia.

El chico que la veía podia notar todas sus expresiones pensando que habia sido mala idea el dejarle leer su libreta, pero ya no habia vuelta atrás, ella estaba conociendo parte de su alma.

Cuando termino de leerla la puso en la mesa con cuidado y miro a los ojos al chico.

-Eder eres increíble, tienes demasiado talento. En algún momento me gustaría escuchar alguna de tus canciones.

-¿Eso crees? La verdad es que a muchos no les gustan, pero prometo que si nos volvemos a encontrar te mostrare alguna de mis canciones terminadas.

-Es un trato-ambos lo sellaron con un apretón de manos, mientras que se levantaban para irse de la cafetería olvidando los problemas con los cuales habían ingresado.

Pero era hora de volver a su realidad y eso para Eli significaba el ver a su novio, para terminarlo de una vez por todas.

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