ser padre no lo había planeado, pero tampoco le molestaba ¿saben? después de todo ya era un adulto independiente con su pareja, y sacaba buen dinero de ahí, era su propio jefe y le iba bastante bien, así que, encantado, aceptó la noticia del bebé en camino, le emocionaba saber que dentro del por ahora plano vientre de su novio había un pequeño frijolito que en algunos meses tomará vida y con el paso del tiempo lo llamará "papá". había un mini él o un mini kazutora esperando por nacer.y tras haber hablado con kazutora y el "por qué si ya sabías no me dijiste" había quedado con una gran duda.
la respuesta de su novio había sido: — tengo sentidos que tú como simple humano no tienes, soy felino y mi instinto me dijo que había un bebé adentro, es fácil de suponer, después de todo... hay un lazo entre el cachorro y yo.
a veces la obviedad con las que kazutora le hablaba le hacía sentir escalofríos, tal vez debería de investigar más acerca de los híbridos, más ahora que estaba en estado de gestación.
y a ahí llegaba su cuestionamiento:
¿el embarazo de kazutora se inclinaría a lo habitual de un humano o al del felino que pertenecía?
todos los híbridos evidentemente tenían muchísimos instintos de su naturaleza.
como cuando kazutora se quiso comer a sanzu...
instinto.
tora en sí; mantenía mucho a flote estos, lo que a él más le gustaba era cuando ronroneaba o se distraía jugando.
y su flexibilidad, que se veía reflejada cuando...
ay, se había salido del tema.
con el tiempo él había logrado leer a kazutora, sabía qué cosas le gustaban y qué cosas no, odiaba por ejemplo las cucarachas, y amaba comer pescado, odiaba el aroma de la cerveza y del tabaco... ¿pero saben que odiaba más?exacto.
vomitar.
— ya amor, ya va a pasar. — tomaba el largo cabello de su novio para evitar que se manchara mientras soltaba el poco desayuno que ya había ingerido. — ¿ya?
— n-no... — y regresó más.
en las buenas y en las malas ¿no? estaba bien, no pasaba nada de malo con eso, sabía que era común, el problema era que kazutora era muy poco paciente y cuando se enojaba, lloraba.
y si él lloraba, él luego no sabía que hacer, llamaba a takemichi en busca de ayuda y takemichi también terminaba llorando. anécdota vieja.
cuando ya pareció acabar, sintió su corazón romperse de ver los ojitos llorosos de kazutora verlo, avisando un pronto llanto, era débil ante el rostro de kazutora, lo ayudó a pararse y el de mechas lavó su boca mientras él daba caricias a su cabello.
— llamaré a baji para que él se encargue de la tienda hoy ¿te parece? — habló suave. kazutora solamente asintió levemente con su cabeza y lo abrazó, ocultando su rostro en la curvatura de su cuello.
no tardó en cargarlo y mejor llevarlo a la cama.
— te haré un té. ahora vengo.
— ¿té de menta? — pregunta mientras pone el agua a hervir. al otro lado de la línea oye el sonido de afirmación de mitsuya, quién era hasta el momento su esposo y él eran los únicos que estaban enterados del embarazo,— y recuerda tora, tu cachorro y tú necesitan las vitaminas. — los despidió en la puerta, pero cual fue su sorpresa que al estar saliendo, se toparon con la familia takashi.
— fuyu, tora, ¡que sorpresa! — rápidamente saludó mitsuya, tomando de la mano a neiryn, su hijo mayor. — ¿vinieron a consulta?
— sí, de hech-
— tora está en cinta. — interrumpió hakkai, hibrido de puma. mientras sujetaba su abultado vientre de ya cuatro meses de embarazo.
— ¿ah?
ni siquiera sabía que hakkai como felino sabía identificar que tora estaba embarazado ¿¡cómo es que los híbridos eran tan complicados!?, les pidió que guardaran por el momento el secreto pues querían que fuera una sorpresa para sus amigos, y en parte hasta le era de cierta ayuda que mitsuya supiera de esto.
— eso ayuda a hakkai. ¿ya desayunó?
— eh, sí, pero lo devolvió, ahorita está chillando en la habitación por que le duele el estómago.
— dale el té. más tarde puedes darle algo líquido de comer como una sopa.
tora era explosivo, lo veía algo reacio a querer que ciertos felinos machos se acercaran a él, e incluso humanos con pene, inclusive él. le había "gruñido" (más bien trató de no derretirse de ternura por su novio)
— no quiero.
— tómalo, mínimo que tengas algo en el estómago, kazu.
el hibrido negó con la cabecita, haciendo resonar el bonito arete de cascabel que colgaba de su oreja. chifuyu se rindió, dejó el té a un lado del hibrido, lo conocía, sabía que tarde o temprano caería en la tentación de tomar el líquido, se acostó en la cama y abrazó por la cintura a su novio, su abdomen aún era plano, pero ansiaba ver como poco a poco crecería con su hijo dentro.
ya ansiaba ver por la casa las pequeñas huellitas atigradas
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huellitas atigradas ;; fuyutora
Fanfictionguía de supervivencia de chifuyu matsuno para cuidar de tu novio hibrido embarazado. "- mes uno: la hembra parece aturdido al cachorro dentro suyo, acecha a la víctima, un pollo rostizado y se prepara para atacar, la espera lo mantiene hambriento...