Haunted [Anthony Lockwood] (CANCELADA)

01 | The new girl

—¡NO INVENTES, ALÉJALO DE MÍ! —soltó un chillido la chica a la que entrevistábamos para luego salir corriendo.

Rodé los ojos.

—¿Qué te dije? No es lo que buscamos —dije saliendo de detrás de la puerta mientras tomaba de mí té.

Lockwood suspira, pasándose una mano por el cabello y se levanta—Bueno, esa fue la última.

George entró a la habitación con una chica, la miré con los ojos entrecerrados.

¿Si esa fue la última qué hacía ella aquí?.

—Tú ganas, aún había otra —comenta George mirando a Lockwood, y luego me dirije una mirada de reojo algo alarmado.

¿Qué hace?

—No, tú ganas. Revisé la lista. Era la última —replica un Lockwood dándole la espalda a la visita.

—Entonces, ¿quién es ella? —dice George señalando a la chica, y Lockwood se da la vuelta.

La chica, sin embargo, dejó que sus curiosos ojos grises danzaran por la habitación hasta que cayeron en mí.

Ahí fue que comprendí la mirada de George apenas los ojos de la chica se abrieron con impacto—¿Eliza Wallace? —parpadeé y miré a Lockwood, el que me devolvió una mirada tensa—¿qué haces aquí? Se supone que medio país te está buscando —me mira expectante.

Yo desvié la mirada de ella, carraspeando. No debí salir hasta asegurarme que no quedara nadie.

Se forma un silencio algo incómodo en lo que busco qué decir. Estaba paralizada. No sabía cómo responder su pregunta. Ni yo sabía qué hacía aquí.

Anthony parece notar mi incomodidad porque interrumpe el silencio—Hola, soy Anthony Lockwood —sonríe ligeramente cuando su mirada se fija en él.

Lockwood era el rey del egocentrismo.

Amaba estar en la pantalla, que la atención cayera en él. Prueba de ello eran los numerosos recortes de periódicos y fotografías de sus logros que decoraban las paredes de las escaleras. Y si no estuviese tan desesperada por tener un techo sobre mí cabeza tal vez discutiría con él acerca de la decoración del lugar pero eso podría esperar.

—Soy Lucy Carlyle, no avisé que venía pero vi su anuncio en el periódico y estaba en el área —dice la chica mirándome de reojo.

Si sabía quién era pues era lógico que se estuviese preguntando qué hacía aquí. Afuera de esta casa decoraban las calles mi cartel de desaparecida y luego entraba aquí para verme tomando un té de lo más tranquila. En sus ojos, debe ser alucinante.

Yo la miré brevemente para luego dirigir mi mirada hacia Lockwood, quién la miraba a ella, intrigado.

Reconocía esa mirada.

Lockwood carraspeó, queriendo ser el centro de atención de nuevo—¿Nos conoces?

—No —dijo ella tajante negando con la cabeza, pareciendo recordar porqué estaba aquí—Mi currículum —explica acercándose y ofreciendo un pedazo de papel doblado que Lockwood recibió.

Yo miré a George con el ceño fruncido.

¿Quién era ella?

En cualquier agencia un currículum era tomado con mucha seriedad, al igual que el de cualquier adulto el ser menores no nos exoneraba de tener que demostrar una buena presentación. Y sin embargo, aparecía esta chica con un papel doblado, con un bolso gigante colgado del brazo cómo si eso fuera lo más profesional del mundo. Seremos una agencia dirigida por menores y por lo tanto no tan formales pero a primera impresión si que picaba un poco mi curiosidad esta chica. Y parecía no ser la única.