Parece ser casualidad

Tenemos planes

Mi alarma empezó a sonar, pero el sonido que producía ese invento hacía que mis oídos sangraran.

Puñetera alarma, suena más fuerte si quieres.

Me levanté porque mis oídos no soportan más y hoy justo no tengo planes así que podría haber dormido todo el tiempo del mundo, pero se me olvido apagar la estúpida alarma. Ya estoy despierta así que me pongo a mirar mi teléfono. Tengo dos notificaciones de WhatsApp, y lo mejor es que las dos son de Bruna. Bruna es mi mejor amiga, la conocí en un aeropuerto porque ella estaba desorientada, acababa de llegar de Brasil a España y la acogí en mi casa. Sí, un poco raro y arriesgado acoger a una chica que ni siquiera hablaba Español en tu casa, pero la verdad no me arrepiento de nada. En fin, el caso es que me muero de curiosidad por saber qué me quiere decir.

"Emily hoy no salgas, que ahora nos he conseguido planes"

"Nos vamos al cumple de Ferr!"

Me apunto! Estás viniendo hacia mi casa, ¿Verdad? 

"Lo has clavado"

"Pero ojito con su hermano eh"

Ahora mismo tengo tanto sueño que por mí no iría, pero es mi amigo y amo los cumpleaños, así que sí, iré. O mejor dicho iremos. Por cierto, hablamos de Fernando González, es nuestro amigo y lo conocimos en una playa de Canarias. Lo de su hermano no viene mucho a cuento, sé que su hermano es Pedri González y es futbolista, pero nunca le preste mucha atención, como supongo que él a mí tampoco. 

Son la una de la tarde y aún no he desayunado, así que me dirijo a la cocina y me hago un buen cafecito, diría mañanero, pero ya estamos en la tarde. Justo en eso suena el timbre, voy a abrir y como no, era Bruna con su piel morena y esos ojos azules claros que destacan tanto, su pelo más rizado de lo normal y un abrigo acolchado puesto. Está esperándome con los brazos abiertos. Le doy el abrazo que estaba esperando y la invito a pasar a la sala.

—Oiiii! ¿Te gusta el plan? —me dice mientras me mira con una sonrisa en la cara

—Me encanta, aunque si quieres, avísame más temprano la próxima vez.—le digo con un tono irónico

—Peeerdón, pero ayer casi no pude dormir, me pasé de energizantes.

—Se nota, estás más hiperactiva de lo normal y eso que ya lo eres. —le digo tratando de no reírme muy alto

—Lo sé, pero venga, vamos a tu habitación que te ayudo a escoger ropa —me dice ya dirigiéndose a ella

Mi casa ya era como la suya, y viceversa. No sería raro venir del gym y encontrarme a alguien acostada en el sillón viendo una película romántica en Netflix. Mientras dejo que Bruna busque mi ropa me hago una ducha y me lavo el pelo. Cuando salgo la veo comiendo galletas en el salón mientras se escribe con alguien. 

—Oiii, ¿Bruna con quien te escribes? —le digo subiendo y bajando las cejas

—Con Feerrr, dice que su hermano está muy aburrido mientras te espera —me dice riéndose

¿A qué viene eso? Obviamente, es mentira, probablemente le importara muy poco si voy o no. Y madre mía ni siquiera sé por qué estoy sobre pensando tanto esto.

Creo que he pensado en voz alta porque Bruna me ha tirado una mirada picara y luego le ha mandado un audio a Fer diciéndole que alguien no para de pensar en su hermano. Trato de ignorar lo ocurrido y solo respondo rodando los ojos. No entiendo por qué Bruna hace estos comentarios, de verdad que no lo entiendo. Nunca le habíamos dado importancia a Pedro, lo vi tres veces, pero nunca dialogamos, solo Bruna hablaba con él. Trato de despejar mi mente y al entrar a mi habitación veo en mi cama unos pantalones negros vaqueros y arriba una sudadera blanca y que casualidad que Bruna vaya igual. A ella le encanta combinar la ropa conmigo y con todo el mundo. Me pongo lo que me ha preparado y joder, ¿las cuatro ya? Al parecer Bruna me ha leído el pensamiento porque ha entrado a la habitación y me ha dicho que tenemos que irnos ya de ya.

Si entra la curiosidad de saber por qué no vamos tan arregladas es porque esto es una "mini fiesta" y no va a haber mucha gente, es en la siguiente en la que iremos todos arreglados. Es que justo el cumpleaños de Fer cae entre semana y es en el finde donde se hará la "gran fiesta".

Bajamos por el ascensor hacia el parking, llegamos al coche de Bruna y entramos, ella arrancó y desde ahí no deja de hablarme de Pedro, Pedri, Pepi... Como sea. Todavía no entiendo el porqué, no respondo y solo escucho. Según ella es un chico muy amable y comprensivo, simpático y empático, sabe cocinar, pero no mejor que Fer, es divertido y mil cosas más que mi mente no logra retener.

Bruna sigue conduciendo hasta que nos paramos enfrente de una casa y nos bajamos del coche. Pico al timbre y nos abren enseguida. Subimos escaleras y en la puerta está Fer esperándonos con los brazos abiertos. Comienzo a correr y le doy un abrazo, Bruna viene detrás de mí y también le da un abrazo. Estar con Fer siempre me pone de buen humor y no sé por qué. Su madre y otros familiares también están cuando pasamos a la sala. Y obviamente los saludamos. Entre ellos estaba su hermano pequeño, digo pequeño, pero incluso es más mayor que yo. Me saca un año. Es un chico alto con los ojos cafés, pelo castaño y bastante fuerte.

Tiene una cara muy seria así que prefiero no acercarme mucho, tampoco creo que le importe si no lo saludo. Ya habían pasado los entrantes y yo no me separo de Bruna, pero tampoco dejo de mirar a su hermano, suena mal lo sé, pero nunca me había fijado tanto en él.