❝Samuel De Luque, un dedicado dentista que ama su profesión, sin importar las dificultades y los retos que este mismo le implique.
Alexis Maldonado, para las personas más sercanas Quackity, es una serena y dedicada persona que de igual manera le a...
Después de su maravillosa unión frente a las personas más importantes en su vida, no tardaron mucho en arreglar sus respectivas maletas para ir a su tan esperada y especial luna de miel, que por primera vez iban a disfrutar del uno al otro sin ninguna interrupción; ya sea por su trabajo o por asuntos personales.
No planearon nada ostentoso ni muy cargado; simple, sencillo y romántico ante sus propias palabras.
— "Savannah es una ciudad costera de Georgia separada de Carolina del Sur por el río Savannah. Es conocida por sus cuidados parques, los carruajes a caballo y la arquitectura antebellum. Su distrito histórico está lleno de plazas con adoquines y parques, como Forsyth Park, que recibe la sombra de robles cubiertos de musgo español. En el centro de este pintoresco distrito, se encuentra la catedral neogótica de San Juan Bautista, un sitio icónico." — recitó aquel omega tras leer aquella información en su buscador google, acomodándose más en los grandes y anchos brazos de su ahora esposo.
— Te faltó leer de su clima — rio a lo bajo — Los veranos son cálidos y pacíficos, como tú.
— ¿Ese fue un cumplido? — contuvo aquella sonrisa juguetona, definitivamente su esposo era pésimo en eso.
— Bueno, al menos lo intente — dijo sin más para después plantarle suaves besos que poco a poco fueron perdiendo su toque de inocencia, antes de que el omega pudiera reaccionar su alfa ya buscaba desesperadamente el contacto físico más a fondo; sobresaltándose a la repentina acción en donde este se metía por de bajo de su ancha playera y antes de siquiera poder protestar; sintió una fuerte presión en su pecho... Definitivamente era hombre muerto.
— ¡Samuel! — exclamó enojado ante la inesperada acción dándole un justo golpe en la cabeza; que por si fuera poco seguía por debajo de su ropa, sin pensarlo el alfa a modo de defensa mordió de igual manera su otro pecho ya qué, se le hacía injusto no estar a la par... Definitivamente su omega lo iba a castrar sin importar que estuvieran aún en el avión.
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