1

1K 49 6
                                    

¿Cuánto tiempo más tendría que estar allí esperando?

Taehyung volvió a resoplar mirando a todas las personas a su alrededor una vez más en busca de Jimin, quien media hora atrás le había asegurado que volvería en cinco minutos.

Claramente mintió y probablemente ahora andaba coqueteando con Yoongi en alguna habitación, ¿o tal vez con Hoseok? No recordaba el nombre del último chico del que su mejor amigo le había hablado.

Miró su vaso aún a la mitad, sintiendo su billetera llorar solamente por pensar en lo cara que le había salido una simple Coca Cola.

Dio un sorbo con el que terminó el contenido antes de colarse entre las personas y subir a la planta de arriba llamando al bajito pelinegro, que por supuesto no respondió.

Lo que sí encontró fue a varias personas haciendo cosas que deseaba totalmente borrar de su cabeza.

Gruñó cuando encontró la última habitación vacía y bajó de nuevo las escaleras optando por llamar al mayor, suspirando aliviado cuando este respondió. Estaba vivo al menos.

—¿Sí?

—¡Hyung! ¡¿Se puede saber dónde andas metido?!

—He ido un momento a casa de Yoongi, no te he avisado porque pensaba que íbamos a tardar menos, pero te prometo que en 10 minutos estoy allí. Nos lo pasaremos genial, ya verás —dice al otro lado del teléfono claramente un poco agitado.

—No quiero pasármelo genial, quiero irme de esta fiesta pero no sé dónde está esto y apenas tengo batería así que trae tu culo ahora mismo y sácame de aquí —grita frunciendo más el ceño al escuchar a su amigo reírse —¡dile a tu ligue de esta semana que me alcance en coche o algo!

—No tiene gasolina —explica y resopla antes de seguir hablando —tardo poco, ¿vale?

Taehyung colgó sin estar nada convencido de sus palabras, ¿por qué había acabado siendo el mejor amigo del chico más desastre de su universidad?

Negó apartando aquel pensamiento de su mente y volvió a abrirse paso entre la gente. Al menos iba a esperarlo fuera lejos de todo aquel olor a sudor y alcohol barato.

Respiró ondo cuando por fin estuvo en el jardín de la casa de dios sabe quien, en serio ¿en qué momento pensó que era buena idea hacerle caso a Jimin?

Echó un vistazo alrededor buscando un sitio en el cual acoplarse hasta que el mayor llegase para poder patearle la cara antes de obligarlo a llevarlo a su casa.

Acabó encontrando una zona de césped que parecía bastante decente, y lo mejor de todo es que apenas había gente cerca al estar algo alejada de la entrada a la casa.

Un escalofrío recorrió su cuerpo apenas se sentó debido a lo frío que estaba el pasto y al húmedo ambiente que calaba hasta los huesos.

Apoyó su espalda en la pared y se hizo una bolita tratando de darse algo de calor a sí mismo.

¿En serio iba a pasarse la noche esperando a Jimin?

¿En serio su amigo lo había abandonado a su intemperie en su primera fiesta para ir a enrollarse con Yoongi?

¿Quién narices era además ese tal Yoongi del que tanto le hablaba Jimin últimamente?

¿Y quién narices era ese desconocido que se estaba acercando a él tan directo?

Taehyung se tensó un poco cuando el pelinegro se paró a su lado y se dirigió hacia él.

—¿Te molesta si me siento? —pregunta señalando el lugar a su lado.

Adicto «KooKTae»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora