Índigo // Lo'ak

Capitulo 1 | Son extraños

Eyva

Me desperté por los ruidos, supuse que ya era hora de levantarse. Así que me levanté, era muy temprano, pero el sol poco a poco se hacía notar en el cielo junto con las nubes. En el lugar donde vivimos es muy caluroso, por lo que no tenemos que preocuparnos por un clima helado.

Me dispuse a salir de mi choza. Tan solo di unos cuantos pasos ya que me encontré con Aonung, que para mí mala suerte era mi hermano mayor.

El idiota de mi hermano

Cuando me vió me dedicó una sonrisa—. Buenos días hermanita.

Lo mire raro, él nunca sonreía. Algo malo estaba pasando, y si no. Algo malo estaría por pasar. Estoy segura.

— ¿Qué hiciste ahora? —indague
cruzada de brazos.

Era ahora él, quién me miraba raro.

— ¿De qué hablas, Eyva? —estaba segura que se hacía el desentendido.

Rodé los ojos.

— Tu nunca sonríes, ¿Que te ha picado? —le digo—. Algo malo ha pasado o está por pasar.

Aonung cruza los brazos mirándome indignado. Al parecer quiere copiar todo lo que hago. Que molesto que es.

¿Por qué Madre y Padre no lo votaron cuando nació?

— Yo me preguntó lo mismo, ¿Sabes? —soltó una pequeña carcajada.

Yo solo entrecerre mis ojos mirándolo, y baje mis brazos enfadada.

— Eres repugnante —le digo enojada.

— Gracias hermanita, me halagas —responde tocándose el pecho y mirándome con ternura. Es obvio que actúa.

— Ya dime qué es lo que quieres —le exijo.

— ¿Tanta insistencia tienes de irte? —me pregunta. Pffff, es obvio que si. Él podrá ser muy guapo y todo, pero yo no lo aguanto y Tsireya mucho menos.

— Si eso hace que ya no vea tu fea cara, pues... ¡Si! —digo obvia.

Él me mira ofendido—. ¿Sabes cuántas chicas de aquí darían su vida por verme sonreír? —y ahí está el Aonung egocéntrico con el ego hasta las nubes—. Tú eres una de las pocas que lo ve, considerate afortunada y valoralo.

¿Es enserio? Justo cuando pensé que no podía ser más idiota.

Mi hermano es bueno, claro. Fuera de todoooooo. Pero lo malo es que no es... Mmmm, ¿Como decirlo sin que suene mal?

Bueno es básicamente... ¡Un imbécil! Todas las chicas de aquí mueren por él. Pero es un imbécil con ellas. Les dice los típicos halagos y cosas bonitas.

Él nunca ha tenido pareja, pero se divierte ilusionando a inocentes na'vis de aquí. Junto con sus amigotes. Alias los peces bandidos. Lo último es broma, pero si sería genial.

Mi hermana y yo, tenemos amigas que se enamoraron de él. Solo las ilusiona ya que él no puede tener pareja. No hasta que se case.

Aunque, ¿Quién en sus cinco sentidos estaría con él?

Él será el futuro jefe de la tribu Metkayina, pero como va yo creo que ni una semana durará.

Bueno, donde iba. Pues el ilusiona chicas hablándoles bonito. Lo ve como un juego y se hace el inocente cuando le preguntan. Pero lo malo es que nosotras somos las que sufrimos ya que perdemos amistades por su culpa.

Pero obviamente él no ve eso. Y solo se divierte.

— Ven hermanito —le hago una señal con mi dedo para que se acerque, y ¡oh sorpresa! Se está acercando muy obediente.