El contrato

Epílogo

13 meses después

Kara estaba preocupada por los aperitivos que preparó, asegurándose de que estuvieran perfectos. Estaban el queso y las galletas saladas, la bandeja de vegetales y los camarones para picar hasta que el pavo estuviera listo. Miró el termómetro en el mostrador que estaba dentro del pavo. Estaba en camino de ser hecho a la hora propuesta de comer.

Se aseguró de que el vino y las bebidas espirituosas estuvieran alineados con las copas adecuadas, junto con muchas opciones sin alcohol. Ruby iba a estar allí después de todo, pero se aseguró de tener sus cajas de jugo en el refrigerador para que estuvieran frías cuando quisiera una.

Escuchó el sonido familiar de unos tacones antes de escucharla decir: "Realmente hiciste todo lo posible este año".

Ella se volvió  con los ojos muy abiertos. "¿Crees que es demasiado? Me esforcé mucho para mantenerlo simple, pero no quería que nos quedáramos sin comida y siempre es bueno tener una variedad, además quería asegurarme de que Ruby comiera--"

Sintió su mano en su hombro, su característica sonrisa en su rostro mientras la miraba. "Todo esta bien. No te preocupes."

Ella dejó escapar un suspiro. "Lo sé. Solo quiero que todo vaya mejor que el año pasado, eso es todo".

Len se rió y le dio un beso en la frente. "No fue tan malo. Esta vez estamos felizmente casadas".

Ella sonrió. Llevaban seis meses felizmente casadas, después de que le propusiera la última Navidad. Len no tuvo reparos en hacer nada oficial, mientras que ella estaba feliz de tomarse su tiempo. El plan original era casarse en algún momento del otoño, tal vez incluso del invierno. Luego, después de graduarse, la llevó a su cumpleaños, un viaje sorpresa de una semana a Hawái, y ella lo supo. No quería esperar más, quería estar con ella por el resto de su vida.

A ella no le gustaba el alboroto por las bodas y a Len tampoco le importaba hacer alarde de ello, así que cuando regresaron de su viaje, se casaron. Len estaba muy feliz de hacerlo oficial y ambos se divirtieron cuando se casaron el día en que su contrato habría expirado.

Sus amigos estaban molestos con ella, por decir lo menos. Estaban felices por ella, pero no les gustaba que les sorprendiera que su amiga se casara de repente. Al final lo superaron.

Len decidió cumplir su promesa de mostrarle el mundo, porque decidió tomarse dos meses libres del trabajo, dejándolo en manos de su capaz nueva compañera Eve, para llevar a Kara por todo el mundo a viajar. Eve estaba más que feliz de probarse a sí misma y aceptar el desafío, mientras que Len estaba feliz de dejarse llevar y disfrutar de estar con su nueva esposa.

Vio más del mundo de lo que nunca pensó que vería y cuando regresó, buscó activamente un trabajo. No le tomó tanto tiempo como pensaba y comenzó hace unas semanas como reportera en Catco.

Finalmente se sintió feliz con su vida, especialmente porque Len había decidido tomar menos trabajo. Decidió que para la Navidad de este año le iba a regalar algo que deseaba desde hacía mucho tiempo. Iba a decirle que estaba lista para intentar tener un bebé.

Entonces empezó a sentirse enferma. Cuando un día fue a tomar su control de la natalidad, se dio cuenta de que había estado tan preocupada por viajar y su nuevo trabajo que aparentemente se había olvidado de tomarlo. En algún momento se perdió una semana entera y no se dio cuenta de que ese era el caso hasta que no tuvo su período. Incapaz de manejar el suspenso, tomó una prueba sin que Len lo supiera, ya que no quería excitarlo sin ningún motivo. La prueba confirmó sus sospechas.

Ella quería decírselo tanto. Sabía que estaría extasiado, independientemente de si ya habían aceptado intentarlo o no. Trató de no hacerlo obvio y se frotó el estómago inexistente, pero estaba asustada y nerviosa, pero emocionado también. No quería revelarlo hasta después de que todos se fueran. Sabía que si se lo decía se emocionaría demasiado y se lo contaría a todo el mundo. Ni siquiera estaba segura de cuánto tiempo tenía, pero sospechaba que aún era muy temprano. Ella no quería hechizar nada.