ASESINATOS EN EL HOTEL

CAPÍTULO 1

30 de julio de 1920 Londres

Un día el detective Sherwood fue invitado al hotel de 5 estrellas, France Colline, un hotel situado en Francia, París. La invitación era del millonario Pablo Ricardo III, de 56 años, que fue heredero de la fortuna de Pablo Ricardo I y II, grandes comerciantes de vino en 1790, una época de gloria para ellos, todos los nobles y los ricachones compraban ese vino, ya que ese vino era el más rico en aquella época.

En la invitación ponía que iban a haber 16 personas más en el hotel. Iban a ir personas muy reconocidas como Millie una actriz, o Lina otra gran actriz muy amiga de Millie. Él pensó que podría disfrutar de esas vacaciones, ya que su trabajo de ser detective, de casos muy importantes, pues es muy agotador.

Claro que como Sherwood es muy caprichoso quería una suit grande donde poder estar esa semana entera y disfrutar de sus pequeñas vacaciones. Las vacaciones empezaban a la semana siguiente.

A LA SEMANA SIGUIENTE (13 agosto de 1920)

El señor Sherwood empezó a empaquetar sus cosas, como, la ropa y lo más importante, su gorro y sus pipetas. Y de paso el señor Pablo para que viajaran mejor hasta Francia les dejó un boleto de primera clase para el Orient Express.

Ya con todas sus cosas empaquetadas, con su carruaje de color negro y sus dos caballos blanco brillante, y condujeron hasta la parada del Orient Express, el señor Sherwood bajo todo su equipaje y lo transporto hasta el tren. Fue un viaje largo hasta Francia, un viaje de 31 horas exactamente. En el tren al señor Sherwood le sirvieron y le dieron su propia habitación, solo que aún no se había topado con nadie allí en el tren.

13 agosto de 1920 Francia-París

El señor Sherwood, ya llegó a su destino Francia-París, justo en el punto más conocido del país. Llegaron al gran hotel con grandes vistas a unas montañas, preciosas.

De golpe un chico joven apareció por la espalda del señor Sherwood. Se presentó, se llamaba Nico, un chico que trabajaba como mozo de equipaje. Nico cargó todas las maletas de Sherwood en un carrito de color oro. Y Nico le acompaño a su habitación. El señor Sherwood se quedó con los ojos como platos, era una suit grande como el pidió. Y después el joven le dijo que tenía que ir a comedor para reunirse con el señor Pablo.

Los dos bajaron al comedor. Donde encontraron a 17 personas. Entre ellas pude distinguir a Millie una actriz muy famosa y a Lina, una actriz y compañera de Millie. El detective las saludo caballerosamente, y ellas hicieron una pequeña reverencia, ya que era un inspector muy reconocido. El señor Pablo empezó a hablar.

Pablo- Buenas noches, señoras y señores, os he reunido aquí para tener unas vacaciones espectaculares de una semana. Espero que disfruten. Y ahora podremos comer en este bufet libre y conocernos un poco todos. Gracias.

Y así Pablo acabó su pequeño discurso. El detective fue directo a los canapés, un manjar muy sofisticado que le encantaba comer. De golpe se le acercó una jovencita con un joven por detrás de la espalda.

Diana- Hola detective Sherwood, soy Diana una gran fan sulla, me encanta como resuelve sus intrépidos casos, señor.- Dijo ella con buenos modales.

Sherwood- A muchas gracias.

Diana- Y este es mi amigo Hugo.

Hugo- Hola. -Dijo tímidamente.

Sherwood- Mucho gusto conocerla.

Diana- Yo también, gracias.- Y se despidió.

Un rato después se le acercó Millie con su amiga Lina, las dos grandes actrices. Y un rato después Pablo se unió a la conversación.

Sherwood- Mucho gusto conocerlas, a las dos, grandes actrices.

Pablo-¿Le gustan los canapés que hemos servido esta noche, señor?

Sherwood- Sí, una gran exquisitez.

Al final de la noche el detective Sherwood acabó conociendo a todos hasta a la exmujer de Pablo que le fue infiel con una tal Rita que se supone que era mucho más rica que ella Ronda. Llego el final de ese delicioso festín. Ya eran las doce de la noche. El señor Pablo indicó a todos los invitados que procedieran a ir a sus habitaciones.

El detective antes de dormir se dio una buena ducha, ya que hacía dos días que no se duchaba, después de unos 15 minutos de ducha, el señor Sherwood se secó y se puso si pijama de algodón de color azul marino, como las profundidades del mar. Se alisó su preciado bigote y se puso una pequeña máscara para taparlo y que no se estropeara, según él era lo más importante de su cara y lo que le hacía más atractivo.

Se estiró en su gran cama con sábanas de color blanco, empezó a leer su novela favorita, de un amor que un capitán nunca pudo conseguir. A él le gustaba ese libro porqué él también estaba solo como el marinero y lo entendía.

A LA MAÑANA SIGUIENTE

Todo el mundo se despertó por un grito escandaloso de la mayordoma del señor Pablo. Todos los invitados, corrieron hasta que encontraron a Jina tirada en el suelo llorando a cántaros, con el café tirado en la habitación del señor Pablo, todos preguntaron hasta que la voz del inspector sonó entre todas las voces del lugar.

Sherwood- Pablo está muerto.

Todos exclamaron, se asustaron y empezaron a murmullar entre ellos. El señor pablo tenía un cuchillo clavado en el corazón.

Lanci- Soy aprendiz de médico, puedo intentar saber a qué hora murió.

Sherwood- Sería de gran ayuda señorita, muchas gracias. Ahora todos retírense de esta habitación, vamos a inspeccionar.