único.

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Ariadna se sentía una tonta. Había confiado en un héroe, y una regla no escrita para cualquier mujer en este tiempo era no confiar en los héroes, porque ellos son capaces de todo para lograr sus objetivos. Antes lo admiraba, ahora le resultaba repulsivo.

Pero todo lo malo siempre pasa por algo. Cuando creía que iba a quedarse hasta la muerte en esa isla, apareció un extraño (y lindo) chico con uvas en la cabeza.

Si, la primera vista fue curiosa, pero eso no significaba que fuera mala. Él era tan descarado para coquetear y bromear que no pudo evitar reír, ese chico le dio la alegría que le faltaba.

Y cuando él le ofreció hacerla su esposa... dioses, en cualquier otro momento lo hubiera rechazado, pero algo en ella le hizo aceptar, porque de alguna forma, sabía que era lo correcto. Se abrazaron y lo supo, quería quedarse así de cerca con él por y para siempre, porque él es su amado.

Un corazón prestado y uno triste se unieron. Ahora, frente a los dioses, Ariadna puede jurar ser dramática y honesta para su amado y que siempre le guardará una silla a su lado; y Dioniso jura guardar todos sus chistes sucios para ella, porque cada uno es el amado del otro, por y para siempre, hasta el fin de la inmortalidad.

Venus.

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⏰ Última actualización: Apr 18, 2023 ⏰

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lover;; Dioniso y AriadnaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora