⤿ Sean bienvenidos a este libro donde se subirá contenido de son Heung-min, algunos serán sacados de tumblr; todos los créditos para los autores y escritores, uno que otro será sacado de mi imaginación.
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Un poco de ruido lo despierta de su sueño, sonríe cuando asocia lo que podría ser y te mira rápidamente descansando, aleja las mantas de su cuerpo con cuidado de no despertarte y camina por el pequeño pasillo hasta llegar a su habitación.
Su corazón todavía estalla de alegría y cree que ese sentimiento nunca desaparecerá, es la primera noche que tu hijo llena a ese pequeño espacio con su presencia, solo unos días cuando sus vidas han cambiado radicalmente.
Tuviste que obligarlo a salir de esa habitación antes, obligándolo a ir a descansar porque lo necesitaba y porque se habría arriesgado a despertarlo si continuaba así.
Pero la verdad es que tampoco quería apartar los ojos de él, su bebé todavía no podía creer que finalmente hubiera nacido lo habían esperado tanto tiempo, esos meses parecían los más largos, pero al mismo tiempo los más cortos de sus vida y ahora ahí estaban; preocupándose por si está respirando o si debería comer o si tiene frío.
-Gracias por levantarte, pero creo que tiene hambre-Sonny se da la vuelta y te encuentra apoyada contra la puerta, el sosteniendo al bebé de forma segura en sus brazos una sonrisa se dio espontáneamente en tus labios a medida que te acercas a dejar un beso en la cabecita de tu bebé.
Durante años habías visto a Sonny con los hijos de amigos y familiares en sus brazos y ahora, saber que es al suyo a quien mira con amor, que se balancea ligeramente, que trata de no llorar es una alegría para los dos.
-¿No puedo ayudarte?- se queja de la mera idea de dejar al niño, a pesar de que tú eres su madre. -A menos que tengas suficiente leche para satisfacerlo, no lo creo-te ríes mientras te sientas en la mecedora que Sonny había puesto en la habitación y apenas sostienes un bostezo antes de que Sonny ponga al bebé en tus brazos. -Tendrás tu momento, papá -No puedo esperar a llevarlo al estadio-suspira mirándoos a los dos. -Tal vez unos días más, ¿de acuerdo? Vamos a mantenerlo solo para nosotros un poco más de tiempo-le pones el dedo en la mejilla mientras el bebé da pequeñas sonrisas -Tienes razón- te besa la frente
