Lisa pov
Salí de mi Departamento decidida, después de 25 años de dolor y sufrimiento al fin hoy tomé la decisión que me tomo 25 años en tomar, nunca fui buena tomando decisiones cada que tomaba una algo malo pasaba era como mi mala suerte, hoy era mi aniversario con Jennie hoy hace 4 años me enamoré de ella pero no me arrepiento pasar los últimos años de mi vida con ella fueron los mejores que pude tener
Llegue a mi destino que era una cafetería que era una de mis favoritas su diseño era simple y anticuado pero acogedor, este lugar me da una paz inexplicable aparte que sus cafés y postres eran los más deliciosos de toda Corea del Sur en mi opinión
Pedí un Americano frio y un pastel de terciopelo rojo que es uno de mis favoritos, los cajeros ya me conocían hasta me hicieron un menú especial para mi, luego de que me hallan dado mi orden tomé asiento en una mesa de madera en una esquina, siempre que venia tomaba asiento en la misma mesa
Mientras comía mi pastel saboreaba cada parte de él como nunca lo había hecho, disfruté cada sorbo que le di a mi café podría decir que esta vez si disfrute mi comida como nunca, mis papilas gustativas quedaron encantadas
Mientras terminaba la cafetería se comenzó a llenar de mucha gente la mayoría eran parejas pero una llamo mi atención por completo, eran dos chicas una alta de pelo negro y una pequeña de pelo castaño al parecer estaban discutiendo quien pagaba la cuenta pero al final la chica alta terminó pagando la pequeña estaba enojada por que no la dejo pagar pero la mayor para que se contentara le compro lo que parecía su postre favorito y la pequeña le brillaron los ojos como si tuviera estrellas en ellos, la chica comía muy feliz mientras la otra chica la admiraba como la obra más bella que an visto sus ojos, la chica terminó de comer y como agradecimiento le dio un peso y salieron con las manos agarradas del lugar con una sonrisa enorme
Podría decir que lo más hermoso que vi hoy, mis pensamientos vagaban mientras observaba al suelo estuve más de 10 minutos viendo el suelo, intentando procesar todo, no sentía nada más que un dolor en mi pecho, pero de la nada comenzaron a salir lágrimas de mis ojos
La gente miraba como salían lágrimas de mis ojos sin entender por qué, me levante y comencé a caminar todos me observaban y las lágrimas no paraban ya no tenía control de mi cuerpo, algo dentro de mi lloraba como nunca antes
Salí del lugar y caminaba sin ver mi camino estaba perdida en mis pensamientos caminando sin destino alguno, el dolor en mi pecho seguía ahí cada vez más doloroso, hasta que choque con alguien y regrese al mundo de vuelta
—L-lo siento no fue mi intencio...—no termine la palabra y me quede congelada, ala ultima persona que quería ver hoy era a ella
—L-Lisa, necesito que me escuches
—no tengo por qué escucharte
—por favor lisa, yo sé que no harías nada por mi pero porfavor escúchame así sea por unos minutos, Lisa tu sabes más que nadie que mi corazón late por ti
-Jennie yo por ti que no haría, yo por ti mataría, si puediera mis huevos rompería, arrancaría mi corazón y te lo entregaría. adornaría tus manos con mi sangre mientras me hago las heridas, yo te daría mi vida Jennie, pero ya no quiero sentir dolor por ti—dije dando la vuelta y alejándome de ella
Voltee a ver si Jennie no me seguía y al parecer no, una parte de mi quería que me siguiera y otra no, cada vez que la miraba sentía una sensación rara que nunca había experimentado
Cayó la noche y me dirigía a una librería a comparar algunas cosas, me tomaría al tiempo para hacer algo para mis seres queridos o mis amigos
Compre 3 cartas para escribir en ellas, mi plan era hacer algo simple pero que se dieran cuanta de mis sentimientos en cada palabra quería reflejar todo
Caminaba por las oscuras calles de Corea, ya no le tenía miedo ala oscuridad ahora la oscuridad me cuidaba me sentía a salvo camine unos cuantos minutos y llegue a un edificio, salude a la gente como de Costumbre me acerque ala recepción y entregue las cartas para que se las dieran alas personas que dije, luego comencé a subir las escaleras y llegue al 5 piso luego subí al elevador y llegue al piso 25
Salí ala azotea y me senté en una orilla observando la hermosa ciudad de Seúl, mis pies estaban en el aire, la brisa me golpeaba pero mi cuerpo ya no sentía frío, estar ahí sentada me puse a pensar todo lo de mi vida tanto lo bueno como lo malo, y llegué a la conclusión de que escapar del problema no era lo que necesitaba, lo que en verdad había que hacer era terminar con el problema.
