Cuando Kara Danvers tenía 5 años le pregunto a su vecina Lena Luthor quien es 10 años más grande, que si ella se casaría con ella cuando creciera... Lena inocentemente le dijo que si para no romper el tierno corazoncito de Kara, ella nunca espero qu...
Una semana después del primer beso de Kara y Lena, los Luthor y los Danvers se pusieron de acuerdo sobre cómo darle a Kara la noticia de la mudanza.
Ninguno de ellos quería causarle dolor a la pequeña y el día de partida se acercaba cada vez más, así que decidieron cenar todos juntos en casa de los Danvers para más comodidad de la pequeña.
-¿Qué tal está tu hamburguesa cariño? – Eliza le pregunto.
-¡Está Deliciosa mami! – Kara le respondió con una enorme sonrisa y las mejillas llenas de mayonesa y tomate.
Todos solo pudieron sonreír de lo tierna que era Kara mientras observaban como Eliza le limpiaba las mejillas con una servilleta, hasta que Krypto salto a la mesa y se robó la hamburguesa de Lionel.
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-¡Krypto No! – Gritaron todos al unísono y vieron como el perro salía corriendo al patio.
-¡Mi hamburguesa! – Se lamento Lionel.
-Abu Lio Klypto solo quelia plobala polque huelen muy lico y a el no le toco... lo siento – le dijo la pequeña con un puchero matador.
-No te preocupes pequeña, estas cosas suelen pasar – Lionel no podía molestarse con esa carita.
-En verdad que Krypto es igualito a su dueña, comelón, adorable e hiperactivo ja,ja – Dijo Alex riéndose de la hazaña del día.
-En eso tienes razón, hasta hacen el mismo puchero... ¿así como uno les puede decir que no? – Dijo Lilian con su ceja alzada y una risita.
-Estás condenada Hermanita... nunca le podrás decir que no a Kara – Lex le dio una sonrisa traviesa.
-Si Lena, ya quiero ver que te pida hamburguesa diez noches seguidas y en todas tu le digas que si al no poder decirle que no. – se rió Alex y Jeremiah le siguió.
-¿Así como tú cuando te pide dulces? - Le respondió una ligeramente sonrojada Lena con la ceja alzada.
-¡Alexandra! ¿Le has estado dando dulces? ¿por eso no se duerme? – La reprendió Eliza.
-Ehh... ¡Don Lionel quiere que le traiga otra hamburguesa? – Le dijo una nerviosa Alex con cara de auxilio.
-Em... si, si no es mucha molestia. – Lionel intentó ayudarla.
-¡en seguida se la traigo! - Alex salió corriendo de la mira de su mamá.
-¡No huyas Alexandra! – le gritó Eliza.
-No estoy huyendo... estoy reemplazando la comida de nuestro invitado a quien le han robado la comida. – Alex trató de justificarse dignamente.
-jajajaja ¿así se le dice ahora entonces? – Lex le lanzó una sonrisa burlesca a Alex.
-¡Argh! ¡Papá también le da dulces! – Alex lanzó la bomba y se fue por la hamburguesa corriendo.
-¡Jeremiah! – Eliza lo regaño y le lanzó una mirada letal.
