Capítulo 3

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Borrador pollito había llegado a su nuevo destino, él disfrutaba el caos que se generaba, pero jamás interferiría, era tan solo un informante, siendo leal a quien le pagara el suficiente maíz para complacerlo.

Ahora estaba frente a un edificio de oficinas, se sentó en la sala de espera a que su antiguo cliente le llamara.

¿?: Ven pollito, puedes entrar

Entro en la oficina donde estaba su cliente, una persona con muchas conexiones, demasiado poderoso para ser desafiado.

Pollito: Hola de nuevo Jefe

¿?: ¿Qué novedades hay?

Pollito: Esfero rojo está en prisión, aunque dudo que se quede allí los diez años de su condena, esfero negro y azul viven ahora en una casa afuera de la ciudad, alguien nuevo vino del bajo mundo, pero desconozco su identidad aun – se quejó – Y Lápiz esta tomando las cosas bajo su control con una facilidad que es ciertamente inquietante

¿?: No podía esperar menos de él – se regocijo – Veo que ya casi todas las piezas del tablero están alineadas, además, quiero que organices una reunión con este misterioso individuo

Pollito: Eso tendrá un costo adicional

¿? Soltó un sobre en el escritorio frente a borrador pollito, después de verificar el contenido sonrió satisfecho.

Era tan divertido ver cómo el mundo ardía.

¿?: Espero que este encuentro sea muy pronto

Pollito: Delo por hecho señor

El informante estaba a punto de retirarse a su siguiente destino cuando ¿? Lo detuvo.

Por cierto, asegúrate de que Lápiz este seguro, no me gustaría que mi hijo sufría algún daño

Pollito: Como desee, Lápiz mayor

Ubicación Desconocida

Borrador pollito había llegado a su segundo pendiente, tenía que ver lo que haría con el sapito que estuvo a punto de delatar a esfero negro y azul, no podía dejar eso sin castigo.

Sapito: Por favor – rogó - ¡Déjenme ir!

Se calló en cuanto vio a uno de sus secuestradores y empezó a temblar de miedo.

Pollito: Bajo tierra, bienvenido al circo – dijo con una sonrisa - ¿Te sientes nervioso?

Sapito: ¡No diré nada! – aseguro - ¡Por favor!

El otro lo ignoro y solo coloco sus manos sobre los hombros del niño.

Pollito: No queda nadie para encontrarte – susurró – Tomare la esperanza que quede aquí

El escenario se ilumina con luces controladas y dan conocer que allí también estaba otro sapito, solo que un poco más mayor.

Pollito: Bajo la superficie, construido sin propósito ¿Merecían esto?

Los ojos de sapito se abren con horror, al reconocer quien estaba atado frente a él.

Sapito: ¿Hermano?

M. Sapito: Déjalo ir – pidió – Tomaré su lugar dentro de aquí

El informante rio estrepitosamente con incredulidad.

Pollito: ¿En serio creen que cualquiera de los dos saldrán de aquí con vida?

La clásica música de un animado circo empezó a sonar, un martillo payaso entro con una sonrisa que no pintaba nada bueno para los hermanos sapito, solo sabían una cosa.

No había escapatoria.

Borrador pollito camino sin prisa por aquellos pasillos subterráneos, retorciéndose de alegría al escuchar un nuevo grito de agonía.

Le encantaba su trabajo.

Prisión

Borrador pollito estaba esperando a que trajeran a su presa favorita, había estado él allí tantas veces que no le importaba esperar, le gustaba la sensación de desesperanza y dolor que rondaba en las prisiones.

Las manecillas del reloj anunciaron que era el medio día y la dama roja que esperaba entro al lugar, la sentaron con unas esposas en las muñecas y los dejaron allí solos.

En la mesa había un tablero de ajedrez.

Pollito: La prisión no le sienta nada mal – comentó.

Movió un peón dos casillas al frente.

Rojo: Todos aquí son unos idiotas, perros falderos que se rinden ante una figura autoritaria

Pollito: Así que... ¿Cuánto control tiene ya de la prisión?

Rojo: Bastante a decir verdad – frunció el ceño – Pero no es suficiente

Pollito: ¿Uh?

Rojo: Si quiero tener mi venganza – hizo una pausa – Necesito más poder

Con eso dicho hizo un jaque mate habiendo ganado el juego, sacrificando a sus peones.

Pollito: Bueno pues – se levantó – Supongo que aquí es la supervivencia del más fuerte

¿Quién controla todo?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora