𖥨์ེ░꙰ོ̼̫ꪳ⃢ 📌 ̖́ ── ❝ 𝐁𝐎𝐍𝐄𝐒 𝖡𝖴𝖱𝖨𝖤𝖣 ° ¦ Perrito & Death

Prologo

El inefable frío de una noche de invierno, no fue para nada recibido para los habitantes del bosque, los copos de nieve caían uno por otro. Frío aire azotando a los árboles y las criaturas qué se escondian por el frío.

La muerte, una palabra temida por muchos. Para otros, una cosa que solo debe de pasar. Tomando múltiples de formas, de distintos cuerpos, tamaños, y personalidades. Todos con el mismo leal propósito.

Su pelaje blanco, solo se esponjo y quedo más albino de lo que ya estaba, copos de nieve se estancaron en su cabeza, al igual que en su ropa negra. Su calor corporal era más que suficiente para no sentir frío. Después de todo, su pelaje siempre lo mantenía de una manera templada, ni frío, ni calor.

Sus cuentas pendientes, estaban en una larga lista qué tenía por obligación, qué cumplir. El remordimiento había acabado desde hace ya mucho tiempo.

Sin embargo, la muerte tenía piedad para aquellas almas que cambian. No en todos los casos, los más especiales llegaba a perdonar y dejar vivir.

No era, un completo monstruo.

Sus orejas se aplanaron a su craño con firmeza, dando bostezos cansados y aburridos. Caminando dejando huellas en la nieve blanca. La única prueba, viviente qué existía.

Era una pena que las huellas se borraran con el tiempo.

Sollozos desesperados inundaron su campo auditivo, girando su cabeza en dirección de estos.

Sus ojos rojos examinaron con cautela una escena, desgarradora ante sus ojos.

Una camada de cachorros, pequeños, sostenían entre todos a uno más diminuto qué todos, en un calcetín de color blanco y azul claro, sus risas desesperantes no faltaron.

Colocando una enorme piedra dentro del calcetín, haciendo, qué la criatura dentro de el objeto soltara un chillido agudo de dolor al sentir el material azotar en su cabeza duramente, provocando qué una herida se posicionara.

Una sonora y feliz risa resonó por el lugar frío y vacío, el pequeño perro adentro del calcetín solo sonrie con positividad. Sus hermanos, solo lo observaron estupefactados, curveando la boca en una mueca.

— ¡Es el mejor maldito plan del mundo, rápido, vámonos! — uno de los cachorros hablo, con un pelaje canela y preciosos ojos azul zafiros. — ¡Vámonos! —

— Esto es muy cruel.. — bajo sus orejas, la chica de la camada, para mirar el agua, temblando de miedo, siendo cómplice del acto. — ¡Debemos sacarlo!, ¡Se va ahogar! — exclamó con un ceño fruncido preocupado.

— Ese era el plan, duh — le dio un zape en la cabeza de su hermana, el mayor de todos, mientras se daba la vuelta son mirar atrás — Ahora, vámonos. — ordenó, alejándose del río.

— ¡Voy! — movió su colita feliz para seguir a su hermano.

La perrita de pelaje blanco y manchas color café, trago saliva, culposa, estaba a punto de lanzarse al río cuando una fuerte pata le tomo de la bufanda tejida roja que llevaba.

— No quisieras terminar como el, ¿Verdad? — sonrio, con inocencia para jalar más fuerte la bufanda haciendo que la contraria tosase,solo asintió temerosa. — Bien, ahora vámonos. —

— Perdoname.. En verdad lo siento.. — sus orejas se bajaron, mirando el río, agrandando sus ojos al ver burbujas salir de este. Indicando una cosa.

Se estaba ahogando. Estaba muriendo, lágrimas se acumularon en las esquinas de sus ojos, tratando de quitarse del agarre fuerte que le lastimaba. Gimió para solo mirar como se alejaban del río, con lágrimas callendo sobre sus mejillas peludas.

Lobo observó con cautela, caminando hacia el río, mirando que la camada se había ido. Algunos de ellos debían tener un buen juicio.

Una mueca, se extendió por su rostro, arrodillandose ante el lago. Gruñendo ante ver la escena.

Saco una de sus cuchillas filosas, para sin mucho esfuerzo, tomar el calcetín, haciendo un agujero en este por sus armas. Sacándolo del agua con rapidez.

El, había salvado a una criatura. ¿La muerte salvando a alguien?, ese era el trabajo de la vida, ¿será acaso qué la vida estaba cerca?, ¿esto era una clase de prueba?.

Las preguntas, tendrían respuestas en el futuro.