Love Game ;; blue lock boys ✔

Teieri Anri (18+)

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se que hasta en el titulo dice "blue lock boys" pero la verdad no me aguante, perdon jqzka

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—Anri. – llamo a su compañera de cuarto desde su cama —¿Podrías bajar el volumen de tu celular? Quiero dormir y tu no me dejas. –

—¿Por qué haría eso? – pregunto indiferente la pelirroja, mientras se acomodaba ella también en su cama

—¿Porque si no, no puedo dormir...? – respondió confusa —Solo bajale por favor, ¿quieres? –

—No quiero. – contesto la contraria

—Cuando tu quieres dormir, yo te dejo dormir. ¿No es así? –

—Cuando yo quiero dormir duermo y ya, nada me va a detener. –

Se quedaron en silencio un rato y luego ambas rieron. La Teieri volvió a usar su celular.

—Ya Anri. – suplico mientras se daba la vuelta observando a su compañera, esta la ignoró

—Convenceme, y tal vez lo haga. – dijo, sarcástica

Ella se levantó y se acercó a la cama de la pelirroja, esta estaba acostada viendo hacia arriba. Mientras solo observaba las acciones de la femina, la contraria se subió al cuerpo de la Teieri y se acercó a su cara. Lentamente comenzó a lamer y besar su cuello.

—¡O-oye! – balbuceo Anri exaltada —¿Que demonios haces? – intento separarla de su cuerpo

—Te estoy convenciendo, ¿Acaso no querías eso? – hablo por la bajo mientras comenzaba a dirigir sus besos a la boca de la joven

El placer termino consumiendo a la pelirroja, dejándose a completa merced de su compañera de habitación, ambas comenzaron a besarse lentamente, mientras sus pechos chocaban entre sí, ______ se acercó aún más a la Teieri, aplastando totalmente los senos de la chica con su cuerpo, ambas estaban empezando a excitarse.

De pronto ella solo paró, se levantó y se fue en dirección a su cama propia.

—¿Por que...? ¿Por que te detienes? – rápidamente pregunto la pelirroja agitada

Por su parte, la joven sólo alzó con su mano derecha el teléfono que pertenecía a Anri.

—Sin esto ya no tengo de que preocuparme. – comento sin más, mientras se acomodaba en su cama, dispuesta a dormir

¿En qué momento le había arrebatado su celular? ¿Acaso había hecho todo eso para persuadirla? Se preguntó aún más exaltada

—¡No es justo! – dijo, enojada —No puedes primero venir a besarme para luego quitarme mi celular. – se fue casi corriendo al otro extremo de la habitación, que es donde estaba la cama de la otra chica

—Bien, la vida no es... – ni siquiera pudo terminar su frase cuando el cuerpo de la pelirroja cayó sobre ella y le arrebató el celular

—Bajate de mi. – contesto irritada, bajando a Anri de encima suya

—Claro, si tu lo haces está bien ¿no es así? – agregó desde el suelo la pelirroja

—Bien, lo siento. –

—Acepto tus disculpas. – dio un largo suspiro —Besas bien. Por cierto, pero no es lo mío ser sumisa. –

—¿No? Tu te veías tan tan entregada a mi, que incluso diría que estás hecha para serlo. – volteo a ver a la femina, quien seguía acostada en el suelo