CAPÍTULO 5

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     A la mañana siguiente, Gu Yuan se despertó con una fuerte sensación de plenitud en la vejiga. Abrió los ojos incómodo y giró la cabeza ligeramente para mirar a Xue Yi, que todavía dormía a su lado.

     Xue Yi es guapo, tiene cejas gruesas y rectas, y ojos delgados que se curvan incluso cuando está enojado, como si sonriera, y un par de ojos que son tan brillantes como las estrellas. El puente de su nariz es recto, los rasgos faciales son duros, con un par de labios ligeramente delgados, aunque la forma es hermosa, también es un símbolo de inconstancia.

     Gu Yuan siempre ha sabido que Xue Yi se ve guapo, pero no importa qué tan guapo sea un rostro, cualquiera debería cansarse de él después de siete años. Y la picazón de siete años es de hecho un gran obstáculo entre marido y mujer.

     La mirada de Gu Yuan se quedó en los labios muy pálidos de Xue Yi por un momento, y luego estiró el brazo para despertar a Xue Yi para que lo ayudara a ir al baño.

     —¡Bien! —exclamó Gu Yuan, levantando su brazo, tiró de su herida en la costilla sin querer, Gu Yuan tenía tanto dolor que dejó de moverse. Mirando a Xue Yi que estaba profundamente dormido, lo llamó en un mal tono—. ¡Xue Yi, levántate! ¡Levántate rápido!

     —eh~ —dijo Xue Yi, roncó un poco, ni siquiera movió los párpados y siguió durmiendo profundamente, Gu Yuan no tuvo respuesta a su llamado sin importar cuanto gritara.

     Gu Yan no pudo aguantar más, sabiendo que Xue Yi tenía mal genio cuando no dormía lo suficiente, aún soportó el dolor y levantó la mano para pellizcar la nariz de Xue Yi con fiereza, impidiéndole respirar.

     Xue Yi movió sus párpados un poco perturbado, pero no logró abrirlos. Simplemente levantó la mano para apartar la mano que le pellizcaba la nariz.

     —Detente —murmuró Xue Yi en voz baja, disgustado.

     Gu Yuan no retiró la mano que cubría la nariz de Xue Yi, con dificultad logró que su otra mano tapara la boca de Xue Yi.

     Xue Yi pronto se despertó debido a la dificultad para respirar. Tenía muy mal genio, levantó la colcha y se sentó, mirando a Gu Yan con los ojos muy abiertos, enojado.

     —¿Qué estás haciendo temprano en la mañana? No me dejas … —dijo Xue Yi, no dijo la última palabra "dormir". Miró la bata de hospital azul claro en el cuerpo de Gu Yuan y la gasa blanca envuelta alrededor de su cabeza, y contuvo esa última palabra.

     Después de esta terrible experiencia, estaba completamente despierto y también recordó que Gu Yuan ahora es una persona enferma y ni siquiera puede levantarse de la cama.

     Contuvo su ira, miró la parte inferior del cuerpo ligeramente abultada de Gu Yuan y probablemente entendió. Cuando se despertó, también sintió un poco de ganas de orinar, sin mencionar que Gu Yuan bebió mucha más sopa que él anoche.

     —¿Quieres orinar? Espera, traeré el urinario —dijo Xue Yi en voz baja, frotándose las esquinas de sus ojos.

     Gu Yuan admiró la expresión en el rostro de Xue Yi de furia a calma, y curvó los labios sintiéndose aburrido. En comparación, todavía prefiere una cara de enfado. Cada vez que ve a Xue Yi de mal humor, con las mejillas hinchadas y los ojos redondos, como un león al que le han volado el pelo, su estado de ánimo mejora mucho.

     Gu Yuan miró a Xue Yi, pensando que pedirle a Xue Yi que lo ayudara a ir al baño sería un poco complicado, por lo que asintió levemente y emitió un 'um' bajo.

    Soportando mareos, Xue Yi se sentó en el borde de la cama y se inclinó para ponerse los zapatos, luego se puso de pie, sintiéndose aún más mareado, estiró sus largos brazos y se apoyó en el reposabrazos en la cabecera de la cama, para no caer al suelo.

[Finalizado] Gong RenacidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora