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Hoy intenté cortarme pero las que se cortaron fueron mis palabras.

Me da culpa sentir esta ansiedad porque se que aunque sea parte de mi cuerpo, no la quiero.

Busco evadir temas para poder estar bien sabiendo que siempre vuelvo a lo mismo, pero me entretiene pensar que soy fuerte y que puedo seguir.

Estoy temblando, mi corazón ahora esta frío, y eso que hacen 40 grados.

Fue un verano muy superficial y vacío, no quiero volver a la rutina, lo único que me planteo es tirarme al vacío.

Cansada de las nauseas, los mareos, los vomitos y de disociar mi cuerpo.
Siento los escalofríos cada vez mas fuertes, quizás es el miedo.

Muchas veces me planté ante el miedo, siempre creí ser fuerte pero ahora estoy cada vez mas lejos de serlo.

Me siento la protagonista de una película triste, de esas películas donde el personaje principal termina teniendo una muerte trágica por tener problemas internos y no soportar mas la vida.

El cargo de consciencia me esta taladrando la cabeza, una y otra vez la culpa.
La culpa de sentir que no puedo hacer nada bien, de que no se cuidar lo que quiero o a quien quiero.

Siento que ya no sé querer. Siento que ya no siento.

Lo peor es tener que contar hasta 10 para calmarte, aunque a mi ni las pastillas me calman.

Siempre tropiezo con la misma piedra, con mis mismos errores. Duele no saber como esquivar esa piedra.

Hoy no me desperté con ganas de escribir pero la ocasión lo amerita. Ya ni se para que escribir si se que ya es muy tarde para que vuelvas.

Ojalá las promesas no existieran, habrían menos decepciones.

El caos, el pánico y la ansiedad fueron factores que me ayudaron a entender la realidad.

Quiero rehacer mi vida pero no sé como, ya no tengo las fuerzas que necesito.

Creo que ya tengo la excusa que buscaba para despedirme e irme, pero prometí no abandonar.

Quiero poder decir que no me aterra el futuro pero lo único que hago es llorar al pensar que nada va a ser igual.

Ya me duelen las manos de tanto pegarle a la pared, me duelen las piernas de tanto clavarme agujas, me duele el estomago de tantas pastillas y me arden los ojos de tanto llorar.

Quiero desconectarme un rato de mi mente, siento que estoy presa y que por mas que quiera nunca voy a poder escapar.

Recen para que no me ahogue en mis palabras y me vaya.

Hasta que deje de dolerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora