Una Vida a tu Lado [TERMINADA]

"80"

Narra Grecia Evans

—¿Cómo que no está aquí? —tragué, quise mantener la calma frente a Jake, así que tome sus manos y las acaricié

—No lo sé —me miró a los ojos y pude ver la duda en ellos

—¿Qué pasa cariño? —unas cuántas lágrimas mojaron su rostro —No llores.

—Es que... Mi papá... —puso su cara en mi pecho y empapó mi camisa de hospital con sus lágrimas

—Hey, Hey —lo hice verme —todo está bien —negó —Si si, todo está bien. Estoy aquí amor mío. Solo que, yo, acabo de... Despertar y no se muy bien que ha pasado, es todo

—no quiero que algo así vuelva a pasar mamá —se aferró a mis brazos

Bese su frente varias veces

—Me quedaré contigo ¿Si?  No me iré...

Me acosté a su lado y nos cubrí con la cobija. Lo acerqué a mi y puso su cabeza en el hueco de mi cuello, dónde oí cómo su respiración se volvía cada vez más regular.

Estar con Jake me quitaba un gran peso de encima, de solo pensar que algo malo le hubiera pasado era aterrador, ya habíamos estado separados mucho tiempo y daría mi vida por él si era necesario.

Solo faltaba ver y saber de mi hija, nació antes de tiempo y en las condiciones con las que lo hizo me hacía pensar lo peor, pero en el fondo solo quería que estuviera sana.

Pero lo más angustiante era Fabián, no saber de él. Tenía que hablar con alguien pronto, mi madre o mis suegros, alguien tenía que decirme qué fue lo que exactamente pasó. 

Y lo más importante ¿Dónde estaba Fabián? 

Sin más me quedé dormida junto a mi pequeño pero fuerte hijo.

Un tiempo después sentí como los débiles y tenues rayos de luz solar entraban por la ventana y rozaban mi rostro. Me removí en la cama y sentí el cabello de Jake en mi cuello; finalmente abrí mis ojos y bostece.

La puerta se abrió y ví a Matthew entrar a la habitación con un café en sus manos, pero al verme abrió sus ojos de par en par.

—Grecia ¿Qué haces aquí?

Me separé un poco de Jake e intenté bajarme de la cama, pero un mínimo dolor me detuvo.

—Con cuidado —dijo al ver mi rostro

—Matthew. Desperté ayer y, encontré a Jake anoche

—Tu madre está aquí, dijo que iría a tu habitación, pero estás aquí así que.

—Grecia —entró mi madre corriendo —Dios ¡Me asustaste! —me abrazó rápidamente

—Tienen que explicarme muchas cosas —los mire a ambos, no quería que preguntará cómo estaba nada, solo quería la verdad

—Hablaste con Jake ¿No es cierto? —asentí lentamente

—Llamaré al doctor —Matthew salió del cuarto

—Tienes mucho que decirme mamá, pero...¿Cómo está mi bebé?

Su mirada se suavizó

El doctor entró en la habitación y me hizo una revisión ahí mismo ya que me negué a salir de la habitación y dejar a Jake, quería que despertara y me viera, y así fue. 

Llevaron otra cama a la habitación y así no tuve que salir de ella. Nos llevaron el desayuno, del cual mi hijo no quiso. 

—¿No tienes hambre cariño? —negó recostando su cabeza de mi pecho y lo rodeaba con mis brazos