La luz del sensor se encendió incluso antes de que se abriera la puerta de la entrada. En una noche tranquila, completamente silenciosa y calida, Jaehyun regresó nuevamente a casa.
En cuanto entró, sintió un extraño olorcito en la punta de la nariz pero, de inmediato descubrió que provenía de la mesa que estaba atestada de latas de cerveza arrugadas y vacías. No dijo nada. La mejilla, que le habían golpeado en la mañana, se le hinchó tanto que comenzó a parecerle un globo de agua así que, preocupado de que le pasara lo mismo a la cara de Taeyong, Jaehyun llegó, subió las escaleras y abrió la puertita de su habitación con muchísimo cuidado. Miró dentro, a través de la rendija, y pensó:
"¿Y si está despierto?"
Pero al final, sonrió al descubrir que en realidad Taeyong estaba roncando.
Cuando se acercó, notó que incluso se había quedado dormido mientras escuchaba música porque una canción en inglés comenzó a filtrarse por el auricular que estaba fuera de su oreja. Además, aunque la pantalla del teléfono también estaba brillantemente iluminada, reproduciendo un vídeo de un concierto de rock, su cabeza estaba tan enterrada debajo del edredón que se preguntó como es que todavía estaba respirando.
Se sentó suavemente junto a Taeyong y le sacó los audífonos. Luego los puso sobre la mesa, colocó el teléfono celular allí también, lo acomodó un poquito más al centro e incluso se dio el lujo de ponerle una almohada en los pies para lograr que los tuviera bien en alto. Luego, cuando la cama, que había estado algo caótica, se arregló lo suficiente como para no parecer un nido de ratas, Jaehyun miró cuidadosamente a la cara de Taeyong como aprovechando que no lo estuviera escuchando ni mirando precisamente en ese momento.
Tal vez había sido por lo que habían hecho antes, pero los labios de Taeyong parecieron tan hinchados como seguramente lo estaba su mejilla. Y mirando su boca roja y regordeta, la verdad era que el beso en el salón del hospital le vino a la mente sin que pudiera hacer algo para evitarlo.
Jaehyun suspiró, y en ese momento decidió acariciar suavemente los labios de Taeyong utilizando los dedos. Era muy posible que se hubiese sorprendido demasiado por el beso que le dio en el hospital así que, después de que salió apresuradamente de la habitación, Jaehyun se arrepintió mucho y deseó no haberlo hecho nunca para empezar. Era solo que, se trataba de un momento demasiado íntimo como para que pudiera pasarlo por alto. Demasiado sexy como para no hacer ningún movimiento.
Los dedos de Jaehyun, que habían rozado cuidadosamente los labios de Taeyong, atravesaron su barbilla recta y pasaron por su nariz, increíblemente afilada y hermosa. Sus cejas oscuras se fruncieron ligeramente por lo frío de su piel y gracias a eso, las arrugas parecieron comenzar a formarse en el medio hasta que Jaehyun, que le sonrió, comenzó a acariciarle suavemente con las puntas de los dedos hasta que su hermoso rostro se tranquilizó de nuevo. Luego, frotó sobre sus cejas oscuras, como si jugara con ellas, y peinó sus pelitos hacía la derecha para que quedaran tan lisas como siempre. Le repasó los lunares con la punta de las uñas y segundos más tarde, solo bajó por su mentón y se perdió en su cuello.
Nuevamente, Jaehyun pareció no poder apartar los ojos de sus labios.
Jaehyun miró a Taeyong en silencio y lentamente bajó la cara sobre la suya. El cabello, enmarañado por soportar un día realmente pasado, rozó su mejillas y su nariz y finalmente se derramó completamente sobre Taeyong hasta hacerle cosquillas.
Los labios rojos de Jaehyun tocaron los suyos. Fue un contacto muy breve en realidad. Una cosita de nada.
"Buenas noches."
Como un gato callejero cruzando el umbral, los suaves pasos de Jaehyun volvieron a escucharse en la habitación uno tras otro tras otro y luego, la puerta que había dejado bien abierta todo este tiempo se cerró firmemente con un pequeño "Click".
Pero cuando Jaehyun desapareció, la mano de Taeyong, que yacía sobre la cama, se apretó hasta volverse un puño. De hecho, hizo tanta fuerza en los dedos que se le salieron las venas del dorso y lo hicieron parecer como si le estuvieran palpitando. Al inicio realmente se confundió en cuanto a quién era la persona que acababa de tocar su rostro y robarle un beso. Pero aunque el calor de su asiento en la cama desapareció, el olor de su mejor amigo permaneció en la habitación hasta llenarle los pulmones. Incluso sin abrir los ojos, podía sentir su mirada vertida en él y la manera en la que estaba suspirando.
Taeyong se tapó con la manta hasta la coronilla y empezó a escuchar ese molesto sonido de latidos en sus orejas. "Pam, pam, pam." Como si no solo su cerebro, sino la casa entera estuviera a punto de derrumbarse. Además de eso, el calor hizo que su pecho se sofocara y que sintiera que no podía respirar a menos que abriera una ventana y se abanicara con las manos.
Pero lo malo de esto era que debido a Jaehyun, quien solo dejó dudas y temblores en su cuerpo, Taeyong se quedó despierto TODA la noche, con los ojos bien abiertos y las manos en la boca.
Pero aún así, era como si la cerca llamada "Amistad" no se cayera fácilmente y Taeyong solo la rondara igual a una mansa oveja que se movía según la voluntad de un pastor.
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Best friend ever - Jaeyong [Adaptación]
FanfictionNada esta bien y eso lo sabe Taeyong. Simplemente, era imposible sentir algo por Jung Jaehyun, su mejor amigo por siempre.