Sorpresa

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Pasó aproximadamente un mes y medio desde que Moa se fue, en todo este tiempo solo tuve una recaída que ocurrió cuando Yui tuvo que ir a una reunión de emergencia y yo no quise acompañarla, fue un lapso de 10 minutos en lo que llegaba mi hermana a la casa por un atraso en el tráfico que ocurrió todo... nuevamente fue culpa del alcohol y la combinación de mis medicamentos, cuando Himeka llegó me encontró inconsciente y me llevó de inmediato al hospital. Luego de ese episodio me internaron por unas semanas y ya estoy fuera de la clínica.

Me encontraba con Himeka en el sofá viendo una película ya que Yui tuvo que ir a una reunión de trabajo, cuando un fuerte mareo se hizo presente, no tuve más opción que correr al baño.

Himeka: ¡Suzuka! ¿Qué ocurrió? -preocupada-

Su: No lo sé... solo me mareé y sentí náuseas... -intentando recomponerse-

Himeka: Te llevaré al hospital.

Su: ¡No!... perdón... no quiero ir al hospital, sabes que los odio.

Himeka: Si empeoras no tendré más opción que llevarte, ven vamos a la cama a descansar. Te prepararé algo para las náuseas.

-La lleva a su cuarto acomodando las almohadas para que ella quede cómoda, deja la habitación y le dice que ya vuelve con algo-

Su: Maldición... -vuelve a pararse al baño corriendo pero está vez si vomita-

Su: Genial... ahora me enfermé del estómago.

-Himeka vuelve con una infusión de hierbas, era el mismo que le preparaba ella a Moa cuando le dolía el estómago por comer mucho-

Su: Mmm... solía prepararlo para Moa -dice cerrando los ojos mientras olía la infusión para luego darle un sorbo-

Himeka: Su... disculpa la pregunta pero -su cara se sonroja- ¿Cuándo fue la última vez que tuviste sexo con Moa? -evitando mirarla a la cara-

Su: -se atraganta- ¿Eh? ¿Y esa pregunta? -sonrojada-

Himeka: ¿Y si estás embarazada? Yo no estoy enferma y tú náusea vino de la nada... igual puede ser que esté equivocada pero hay que pensarlo como una posibilidad.

Mi corazón se aceleró, es cierto, no me ha llegado mi periodo además antes del accidente nosotras si tuvimos sexo... de hecho casi toda esa semana la pasamos tocando nuestros cuerpos cada vez que podíamos...

Su: Mierda... si tuvimos... más de una vez en la semana -lo siguiente lo dice casi susurrando- y sin protección...

Himeka: -sorprendida- Compraré un test, ya vuelvo.

Si resulta ser cierto, si tan solo estuviera embarazada de Moa tendría una razón para vivir. Cuando Himeka se fue no pude evitar sonreír, de verdad deseaba estarlo; mis pensamientos fueron interrumpidos con otra náusea. También había notado que mi pechos estaban más sensibles que de costumbre pero eso igual me ocurre cuando me va a llegar el periodo así que no le tome importancia. Pasaron 10 min y Himeka llegó.

Himeka: Ten -me entrega la caja- ve al baño, te esperaré aquí sentada -le sonríe-

-Su asiente con su cabeza y se dirige nerviosa al baño, sigue las indicaciones de la caja y espera el resultado-

Su: Toma... no puedo verlo, estoy muy nerviosa.

Himeka: Es... positivo... -la mira emocionada- Serás madre hermana -se apresura en abrazarla-

Su: Madre... -comienza a llorar- si es una niña la llamaré como su madre.

Himeka: Mañana pediré hora para que comiencen tus controles -sonríe- estoy muy feliz por ti Su.

Después de varios meses

Estos últimos meses volvieron a cambiar, el embarazo hizo que mi estado de ánimo mejorara y que nuevamente pudiera sonreír, Yui también fue de mucha ayuda, en ningún momento me ha dejado sola; realmente le debo mucho.

Ya se está acabando mi embarazo, pronto tendré a mi niña en mis brazos... si, es una niña, Moa se llamará. No puedo esperar a tenerla ya conmigo y contarle lo maravillosa persona que fue su madre.

Yui: Mi sobrina se mueve mucho últimamente ¿no crees?

Su: La verdad es que si, está bastante inquieta... igual a su madre -ríe-

Yui: ¡Ay! Ya quiero verla, de seguro será muy bonita.

Su: Yui...

Yui: Dime -se da vuelta para mirarla-

Su: Te agradezco todo el tiempo que haz ocupado en mí -sonríe- lo aprecio de verdad.

Yui: Todo sea por hacerte feliz -sonríe con un leve color rojo en sus mejillas-

Su: ¿Seguirás trabajando?

Yui: Si, ¿Por?

Su: Quiero que te acuestes a mi lado...

Yui: Últimamente estás más empalagosa -ríe- pero no me quejo. Mañana termino mi trabajo -se para de su escritorio y se acuesta al lado de Su-

-Su se acomoda y abraza a Yui posando su cabeza en su pecho mientras cierra los ojos-

Su: ¿No puedo serlo?

Yui: Por supuesto que puedes, de hecho me gusta que seas así.

Su: Te quiero Yui...

-Yui estaba sonrojada, a ella siempre le ha gustado Suzuka, incluso desde antes de que ella comenzara a salir con Moa; la razón de que no se haya confesado es que ella sabía que no era posible ya se imaginaba que Moa estaba detrás de Su y viceversa, siempre fueron muy apegadas. Yui nunca le dijo a Moa sobre lo que sentía por Su, es por esto que la cuida tanto ahora. No quiere forzar a que Su se enamore de ella pero pensar en qué quizás tenga una oportunidad con ella le hace ilusión, sabe que tiene que esperar a que Su sane sus heridas y Yui está dispuesta a esperarla, ya la ha estado amando en secreto muchos años.

Estos pensamientos estaba ahora en la mente de Yui y no se dió cuenta que Su se durmió, intento moverse despacio para apagar la luz y ella también descansar. Ambas estaban dormidas cómodamente hasta que Su comenzó su labor de parto-

Su: Ahh... Yu... Yui...

Yui: -se despierta de golpe- ¿Qué pasa?¿Te duele algo?

Su: Creo... que ya es hora... ahh... duele...

-Yui sin pensarlo más toma las llaves de su auto y el bolso que ya tenían preparado en caso de emergencia, acomoda el asiento del auto y corre a buscar a Su. Por suerte habían decidido dormir momentáneamente en la planta de abajo, en la habitación de invitados, así no tenían que bajar ni subir escaleras-

Maldición, esto duele como un demonio... estoy segura que este es el dolor físico más fuerte que he sentido, siento que me voy a desmayar en cualquier momento pero debo ser fuerte, no puedo desmayarme ahora. Yui tenía todo preparado así que me acomode en el auto, normalmente ella conduce prudente pero solo por esta vez la perdonaré por saltarse varios semáforos. Le dije a Yui que diría que era la madre, para que así la dejaran entrar conmigo. 

Llegamos al hospital y me ingresaron de urgencia a un quirófano para dar a luz. Sentí un pequeño alivio cuando me pusieron analgésicos, es bastante doloroso traer a la vida un ser.

Yui entró al pabellón con una mascarilla y una cofia, sus ojos era lo único que se veía... 

-Su comenzó a pujar mientras sostenía fuerte la mano de Yui, estuvo un buen tiempo así hasta que el silencio del quirófano fue interrumpido por un llanto fuerte. Yui estaba sin palabras mirando en dirección del recién nacido-

Enfermera: Tome, puede ver a su hija -pasando el bebé a Yui-

Yui: Es... preciosa... ¡Suzu, tiene los hoyuelos de Moa! -dice emocionada- Mírala -acostándola sobre el pecho de Su-

Su: Mi niña -llora- eres hermosa, al igual que tú madre... tienes sus lindos labios -sonríe-

Yui: -susurrando- Moa, espero estés viendo a tu hija -caen un par de lágrimas de sus ojos-

Retroceder el tiempoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora