♡ 𝙨𝙩𝙖𝙮 𝙜𝙤𝙡𝙙 «𝓯𝓻𝓮𝓮𝓼𝓲𝓪 libro 3 » ESPECIALES/EXTRAS

extra 🍪"where I belong" pt2.

Tomó aire, ignorando la situación, para tomar la orden de otra mesa y volver a la cocina.
Quien no pudo pasar desapercibido lo que sucedió fue Hanna quien nota el cambio drástico en el rostro de su amiga, casi hermana a uno más serio.

Bea picaba en rodajas un pedazo de cebolla para uno de los platillos, forzandose en concentrar su atención en algo que valiera la pena, pero la incertidumbre le invade y con la distancia que han generado en esos días hace que los ojos se le pongan llorosos pero no sabe si es por la cebolla o por las tonterías en las que está pensando.

――Bea el pedido de la mesa de Jimin ya está. ――Jin dijo con una sonrisa. ――Llévalo si gustas, yo me haré cargo de esto. ――Le da confianza y ella toma la charola para entregar los pedidos.

Apenas va haciendo ruido la suela de sus zapatos de que se acerca y Dahyoon se acomoda para parecer, otra vez, cercana a Jimin.
――¡Huele delicioso! ¿Aquí es a dónde vienes a comer en el almuerzo? ――Dijo aplaudiendo antes de terminar.

Jimin negó. ――Vamos a un local cerca del edificio. ――Taehyung le hace segunda, porque siempre comen juntos.――¿No haz ido con nosotros? ――Pregunta confundido porque recuerda haberla visto ahí dos veces al menos.

――¿Tu esposa tiene un restaurante y prefieres comer en otro sitio? Oh, eso es muy irónico y cruel, pero sí, en ese local hacen un estofado muy rico. ――Aceptó.

Bea con ayuda de otro mesero colocan los platos en el centro y hacen una reverencia permitiendo que ellos disfruten de la comida.
――No te vayas, quédate. ――Pidió Jimin, sosteniendo su mano. ――Mejor dicho, ¿Puedes quedarte? ――Se avergüenza de su informalidad y a Bea le explota el corazón por lo lindo que se ve.

――Tengo que volver a ayudarle a Jin en la cocina. Disfruta de tu comida, vendré en cuanto pueda. ¿Si? ――Como cachorro él asintió rápidamente y así es como la mente de Bea se tranquiliza y su corazón encontró la serenidad otra vez, las dudas se desvanecen y ella recuerda lo enamorado que él está de ella y que jamás le ha dado motivo alguno para pensar lo contrario. ――Disfruten de su comida. ――Dice para todos, hasta para esa mujer que no deja de fingir que no está mirandoles de reojo.

Si alguien pasará cerca de esa mesa con los ojos cerrados, pensaría que estaba ocurriendo algo indebido, pues los gemidos de placer y sorpresa que los compañeros de Jimin hacían al probar cada platillo que pidieron eran fuertes y le hacían saber a Jimin que es inversión estaba más que asegurada.

――Jamás había tenido tanta envidia de alguien. ¿Me estás diciendo que te casaste con alguien que hace estás maravillas? ¿Y las comes todos los días?

――En otra vida, te ganaré a esa mujer. ――Dice otro.

――Puedes envidiarme, pero en esta vida y en cualquier otra, yo voy a buscar y a enamorar a esa mujer, lo siento.

――Está tan delicioso, que creo que podría pedir otros dos platos.

El celular de Jimin sonó y él se puso de pie para contestar al darse cuenta de que quien le llamaba era el padre de Meiji. ――¿Si? Si Señor, aún estamos aquí.

Salió del restaurante para poder atender la llamada y Bea fue a la mesa, teniendo por fin algo de tiempo para hacerle compañía a su amor y a sus amigos.
――¿Qué tal? ¿Les gustó?

――Ha estado delicioso. ¿Todo lo preparas tu y tu amigo?

――Sí, tenemos a dos personas que nos ayudan pero principalmente somos nosotros quienes cocinamos. ――Ella sonrió.

――¿Y si uno de ustedes se enferma? ――Dahyoon preguntó. ――¿No es muy arriesgado que la cocina sea solo dirigida por dos personas? Con el tamaño de clientela que tienen, deberían contratar a más cocineros.