Ojitos Tristes (Endeku)

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izuku vestía su traje de novio y mientras se veía en el espejo suspira suave ante la ausencia de sus padres, colocándose el velo como puede respirando y relajado, al poco tiempo se acerca yagi que en sus manos tiene una gargantilla la cual en el centro tiene una incrustación de esmeralda, mirándola con curiosidad viendo como su tío se lo coloca en el cuello

yagi: esta gargantilla fue uno de los pocos regalos que tu abuelo le entrego a tu padre para tu madre, era una joya heredada entre generaciones.... tu padre me la entrego antes de que decayeran y antes de la enfermedad de tu madre... tu madre no quería perderla y eso llevo a que yo la conservara... ahora es tuya... y ahora tu podrás aguardarla...

izuku lagrimea viendo aquella joya la cual acaricia con suavidad con las yemas de sus dedos

izuku: me recuerda a mi mama... hace años que perdí la memoria de su rostro y de su voz... eso duele... ya no la recuerdo.... 

yagi lo toma en brazos acariciando suave su espalda dejando que se desahogue en su hombro,  el momento llego y con ello los pasos hacia el altar mientras el sonido de sus pasos son opacados con el órgano y los niños del coro cantando suavemente, sintiendo como las lágrimas nacen de sus esmeraldas y mueren en sus mejillas al rodar hasta su mentón, yagi preocupado llegó hasta al frente con su pequeño niño y aprieta suavemente su mano hasta entregarlo con enjii quien preocupado toma la mano de su pequeño corazón destapando su carita acariciando su mejillas para retirar los rastros de lágrimas, izuku solo levanta la mirada, encontrando una cara preocupada pero sin quitar el amor que en sus ojos inundaba, sintiendo la calidez de aquella mano sonríe con suavidad, izuku sabe que no está solo, pero su corazón se reprime al saber que no tiene a nadie más que la nueva familia que lo esperaría ahora, sabe que ya  no estará solo en casa al llegar, pero no puede dejar de sentir culpa, saber que amor ya no le faltara, pero su corazón seguirá ese hueco que nadie más podrá llenar.

la voz del padre se hace presente pero no puede distinguir lo que dice, siente como le colocan y quitan ciertas cosas de la ceremonia, pero no las presiente, siente como su pareja le pone el anillo y le entrega uno más grande ¿su pulgar le quedara a ese anillo? no lo cree, siente la mirada del padre y de su pareja, sacando un pequeño suspiro lastimero le coloca y repite lo que dice el padre de la iglesia, la misa finaliza y con sigo el que enji lo cargara con cuidado saliendo del recinto para llegar a aquel auto en donde solo estaban los dos, enji no dijo nada pero izuku se aferra tan fuerte a su traje, lo deja ser mientras siente como su camisa se humedece, acariciando su espalda lo llena de besos suaves los cuales provoca que izuku se tranquilice y suspire más aliviado.