XIV

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SARAH DAVIES:




— Aquí estoy. — me sorprendo al verlo. — Perdón por la tardanza.

— Martin... — susurro.

— Ahora sí, toda la familia está completa. — dice mi madre.

Mi vista recae en Martin y es en ese instante que nuestras miradas se conectan.

— Sarah, podemos hablar en privado. — Él me mira y asiento levemente.

— Ya vuelvo. — miro a Marcus.

Junto a Martin salimos al jardín para tener un poco de privacidad y hablar sin interrupciones.

— Okey, Sarah, lo siento.

— ¿Qué haces aquí?

— Vine a acompañarte. Perdóname, ¿sí?

— ¿No se supone que tenías un compromiso muy importante?

— Sarah, te estoy pidiendo una disculpa y tú no haces más que echarme en cara la discusión de ayer. — lo miro con un gesto de seriedad.

— Bien, disculpa aceptada. — él me abraza. — Me alegra tenerte aquí.

— Te quiero, Sarah. — dice abrazándome cada vez más, como si me fuera a ir.

— Te amo, Martin. — completé para mirarnos finalmente. — Me encanta como te ves.

— ¿Sí? Sinceramente, no sabía qué ponerme.

— Te ves espectacular con este traje, me encanta. — reímos y nos besamos.

— Lamento interrumpir, pero... — Escuchamos la voz de mi hermana.

— No, no interrumpen. — dice mi novio apenado. — Dani, vaya sorpresa verte por aquí. — se saludan.

— ¿Por qué todos dicen lo mismo? — se queja.

— Será porque casi no vienes a Londres. — digo.

— Puede ser eso. — me da la razón.

— Bueno, antes de que sigan, nuestros padres nos esperan para las fotografías.

— Ah, sí, ya vamos.

— Ahora sí, los dejamos solos. — ambos se van del jardín.

— Ya escuchaste, vamos.

𝐋𝐈𝐄𝐒 𝐀𝐍𝐃 𝐁𝐄𝐓𝐑𝐀𝐘𝐀𝐋𝐒 || MARTIN ØDEGAARD ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora