Me cambiaste la vida.

20

-Ya estaban terminado su cena, la luz de la luna y las estrellas golpeaba la ventana. Cuando terminaron, Suzuka llevo a Moa a la parte trasera de la cabaña en dónde había un pequeño jardín y árboles, era una parte privada que tenía cada cabaña. Suzuka se pone detrás de Moa abrazándola mientras observan el cielo nocturno-

Moa: Están hermosas las estrellas.

Su: Así es...

Moa: ¿Sabes? No te burles de mi pero siento como si lleváramos años juntas y estuviéramos en nuestra casa, descansando de la rutina mientras estamos en nuestro jardín -ríe-

Su: Moa... -las palabras no salían de su garganta- eres una persona muy importante en mi vida, cuando digo que te amo es porque de verdad te amo con todo mi corazón...

Moa: Lo sé... yo también te amo perdidamente.

Su: -da vuelta a Moa para mirarla- Eres preciosa y no me cansaré de decirlo.

-Moa se acerca y besa a Suzuka pero está la separa unos segundos después-

Su: Bajo la luz de la luna y las estrellas... -saca una caja de su bolsillo- y este anillo que simbolizará una cuarta parte de todo el amor que siento por ti... Moa, mi amor ¿Quieres ser mi novia?

-Los ojos de Moa se cristalizaron y solo besó a Suzuka con desesperación-

Moa: Si... -continua besándola-

-Suzuka separa a Moa otra vez-

Su: -sonríe- permíteme poner este anillo en tu dedo -le besa la mano-

-La mano de Moa temblaba y estaba tratando con todas sus fuerzas ocultar sus lágrimas-

Su: Ahora eres mía -toma sus mejillas y la mira con ternura- quiero que cada vez que estemos lejos este anillo te recuerde que siempre estaré para tí sin importar la circunstancia en la que nos encontremos... te amo Moa, te amo mucho, nunca dudes de eso.

Moa: Me haces muy feliz... te amo -vuelve a juntar sus labios-

-El beso fue escalando poco a poco, Moa fue la que se encargó de subir el tono de estos-

Su: Mi amor... -jadeando- ¿Estás segura de esto?

Moa: Llevo esperándolo por mucho tiempo... -vuelve a besarla-

Moa: Si tú aún no estás lista, puedo esperar a que lo estés.

Su: Llevo deseando esto hace bastante...

Moa: Entonces... permíteme -sin esperar comienza a toquetear el pequeño bulto que ya se encontraba dentro de los pantalones de Suzuka mientras continuaba besándola-

-Suzuka tampoco se quedó atrás, tímidamente tocaba a Moa de una manera bastante gentil como si estuviera tocando un frágil cristal. Que Moa metiera su mano dentro de los bóxer de Suzuka y la acariciara hizo que rompiera todas las cadenas que tenía, tomó a Moa en brazos y la llevó a la habitación-

Su: A partir de ahora, me hago cargo yo...

-En todo momento Suzuka fue demasiado gentil, era una total yuxtaposición con su mirada que lo único que reflejaba era lujuria... deseaba demasiado el cuerpo de Moa. Tener a Moa en sus brazos hizo que sus pensamientos perversos fueran dejados de lado.

Dejó a Moa en la cama y se posicionó sobre ella, comenzó besando sus labios para después bajar a su cuello y después volver a subir. Su mano se deslizó curiosa por debajo de su camiseta hasta llegar a uno de sus pechos, les dió un suave masaje para después meter su otra mano y subirle la camiseta dejando su abdomen perfecto al descubierto-

Su: Si voy muy rápido o hago algo que no te guste por favor házmelo saber.

Moa: Lo haré -sonrojada-

-Las ansias de tocar la parte baja de Moa le ganó, así que saco su pantalón y ropa interior, primero depósito un suave beso para después comenzar a lamer cada rincón, todo el tiempo que lleva junto a Moa de pareja se ha preguntado cómo era su sabor, era como lo había imaginado... delicioso.

Los sonidos lascivos rebotaban en la habitación se detuvo cuando vio que Moa ya estaba lo suficientemente mojada, anhelaba estar dentro de ella, la erección que tenía en sus pantalones era dolorosa y le molestaba bastante. Moa vio la intención de Suzuka al ver que se sacaba los pantalones así que ella se sacó lo que tenía de ropa-

Su: ¿Estás preparada? -su cuerpo desnudo se posaba por sobre el de Moa-

Moa: Si...

Su: Dolerá al principio pero seré gentil -besa su frente- si quieres que me detenga dímelo.

-Sin más Suzuka alineó su miembro con Moa y comenzó a hacer pequeñas presiones por el alrededor, lubricando toda su polla con los jugosos líquidos de Moa, se detiene justo en la entrada-

Su: Lo meteré -comienza a hacer presión hasta que logra meterla un poco-

-Moa se quejó de dolor al sentir su piel y músculos estirarse, se aferró a la espalda de Su y cerró su ojos. Cada vez que Suzuka la metía ella apretaba su espalda, hasta que por fin Su la mete completa-

Su: -jadea- ¿Vas bien mi amor?

Moa: -gime- Si... duele pero puedo soportarlo.

-Suzuka espera un momento más para que Moa se acostumbre a su tamaño-

Su: Me moveré -comienza a sacarlo despacio para luego meterlo otra vez-

-Poco a poco el dolor que Moa sentía comenzó a convertirse en placer, sus gemidos salían por si solos. El vaivén de las caderas de Su era continuo pero siempre con gentileza, mientras se movía también se hacía cargo del resto del cuerpo de Moa tocando cada esquina que podía, depositando suaves besos sobre su piel y labios hasta que llegó a su punto-

Su: Mi amor, estoy casi... -gime-

Moa: Vente dentro -la interrumpe-

Su: Pero...

Moa: Solo hazlo -jadea-

Su: Dolerá otra vez... -volvió a follarla con gentileza hasta que su nudo se hizo presente-

-Los arrimos de Suzuka disminuyeron de velocidad pero aumentaron en profundidad, Moa sintió como Su vertió su semen dentro de ella mientras que soltaba tiernos gemidos. Se recompuso y saco su polla cuando ya sintió su nudo bajar-

Su: Puedo olerlo -sonríe- aún no estás satisfecha -ríe-

Moa: No -mordiendo su labio- necesito más de ti.

Su: Tienes suerte de que tengo mucha resistencia... -sonríe pícara-

Moa: Tu aún no me conoces de este modo Suzuka -le devuelve la sonrisa pícara- ahora es mi turno de hacerme cargo...

-Moa termino dominando a Su, se dejaron llevar por sus cuerpos y corazones, no les importaban las etiquetas solo disfrutar de su nueva experiencia juntas. A pesar de que Moa es primeriza se desenvolvió bastante bien, sorprendió a Suzuka, supuso que el calor de la escena la hacia actuar de esa manera.

Continuaron hasta que quedaron sin una gota de energía, ambas cayeron derrotadas en un profundo sueño, felices con el nuevo paso que habían dado. Todo era perfecto pero como se sabe cuándo se tiene felicidad es porque una tormenta se avecina-