Kilig - 𝑝𝑐𝑦. 𝑑𝑘𝑠 𝅄

⻝ ┇ ❝seis.

ChanYeol arrugó los labios cuando la alarma del móvil sonó, y se revolvió en la cama, apagando su celular antes de suspirar.

Sus ganas de ir a trabajar eran inexistentes, y se sintió peor cuando, de pronto, KyungSoo lo abrazó por la cintura, acurrucándose a su lado y dándole un pequeño beso en el cuello. ChanYeol lo miró, chocando con sus ojos castaños, sonriéndole al notarlo amodorrado, aunque con una ligera sonrisa.

Era la primera noche que KyungSoo pasaba a su lado como su pareja, durmiendo en su cama, después de mudarse definitivamente. Y la sensación era más que perfecta: era única.

— ¿Tienes que ir a trabajar? — Murmuró KyungSoo, dándole un pequeño beso.

— Sí. — Susurró ChanYeol, revolviéndole el cabello.

— No... — KyungSoo escondió su rostro en su pecho, como un niño pequeño —. Quédate conmigo y sigue durmiendo. Eres muy cómodo.

ChanYeol soltó una pequeña risa ronca, negando con la cabeza, y miró el techo, pensando en lo bien que se sentía KyungSoo en sus brazos. En lo cómodo que era tenerlo así, protegido totalmente, sin nadie que pudiera hacerle daño.

— Mi amor... — Murmuró ChanYeol, frotando su mejilla contra el cabello de KyungSoo.

— Bueno, está bien, me levantaré e iré a prepararte el desayuno...

— Kyunggie — Se miraron a los ojos, y ChanYeol le besó en los labios con lentitud, llenándose con ese simple gesto —, puedes quedarte durmiendo, ¿sabes? No es necesario que te levantes conmigo a esta hora.

— Pero...

— Nada de peros. — Le dio otro beso, sonriendo de lado —. He vivido solo desde los dieciocho años, Kyunggie, sé preparar un desayuno.

Sin un poco de convicción, KyungSoo asintió y lo abrazó, besándole la mejilla de paso.

— Te quiero, alfa gruñón. — Le dijo cariñosamente.

— Yo también, bebé. — ChanYeol se quitó las mantas de encima, revolviéndole el cabello —. Iremos a cenar fuera, ¿te parece? Para celebrar tú llegada a casa.

— Eres demasiado lindo conmigo. — KyungSoo sonrió, dejando que ChanYeol lo arrebujara entre las sábanas —. Siento que no... que no merezco esto de ti.

ChanYeol le pellizcó las mejillas, sin soltarlo un poco, y le besó la punta de la nariz.

— Te mereces esto y más. — KyungSoo sonrió tímidamente —. Ahora duerme, te llamaré durante el día, ¿bien?

— Está bien. — KyungSoo se acurrucó entre las sábanas, sin dejar de mirarlo —. Te quiero, ChanYeol.

ChanYeol le respondió con un beso antes de ir al baño.

Minutos después, salió de la ducha, notando que KyungSoo se quedó dormido, y permaneció unos minutos admirándolo, notando su suave perfil perfecto, su desordenado cabello castaño, sus mejillas abultadas, su labio inferior sobresaliendo en un puchero inconsciente, los pequeños resoplidos que soltaba.