Fue él; kookmin

Final.

Al llegar a su hogar Jimin se encargó de una sola cosa, llorar y hacer un show, toda la servidumbre se preocupó por él al ver sus lágrimas de cocodrilo pasearse por su tersa piel, toda la servidumbre se quedó helada cuando vieron la mejilla roja y claramente cacheteada. Y aunque hicieran preguntas, Jimin solo les decía que no paso nada, que se cayó y que golpeó su rostro por tener malos reflejos, mintiendo a diestra y siniestra. Cuando dejó su show espero a su esposo en su habitación, sabía que vendría, tendría muchas preguntas en su cabeza y estaría dispuesto a responderlas todas.

Después de todo, le molestaba que otro se haya llevado el protagónico de su crimen, cuando él había sido la mente maestra desde el momento uno. Además, necesitaba que Jungkook lo sepa para que así nada le impida darle el poder de sus empresas, porque el miedo jugaría muy bien, todo lo había puesto a su favor y una sonrisa se dibujó en su fino rostro cuando escucho la voz de Jungkook.

Se posicionó en el borde de su cama matrimonial, con las piernas juntas y sus manos sobre sus rodillas espero a que su esposo abriera la puerta, cuando lo hizo, le dio una pequeño sonrisa y le pidió con un gesto hecho con su cabeza cerrar la puerta.

"Veo que pensaste bien." Dijo Jimin.

"Pensé en muchas cosas."

"¿Cómo en que?"

"Sobre lo que dijiste sobre Anne...que correría la misma suerte que Yoongi." Camino hacía Jimin, al llegar a él se arrodilló frente a él y tomo su mano. "¿Por que dijiste eso?"

"¿La despediras?" Pregunto Jimin, soltandose de la suave mano de su esposo.

"No puedo hacer eso."

"¿Por qué? eres el jefe, ¿no?"

"Lo soy, pero recién la reincorpore en su puesto, no puedo solo despedirla y ya."

"Puedes y lo harás." Dijo en un tono alto, sosteniendo su mirada con la de Jungkook, demostrando dominancia en su fino mirar.

Mientras Jungkook le miraba recordó la conversación que tuvieron hace horas atrás, recordó las palabras que Jimin le dijo que lograron que sus bellos se erizarán y el aire le faltará a los pulmones, pues era algo que Taehyung ya le había dicho.

Así que repitió lo mismo.

"Si no lo hago, ¿qué pasará?" Pregunto, esperando paciente y ansiosamente.

Temía oír lo mismo.

"O sino, tendré que hacer algo que no quiero." Se levantó de la cama, bordeando a Jungkook.

El mayor aún mantenía la mirada sobre Jimin, fijamente vio como las finas y pequeñas manos de Jimin tomando su propio suéter, sacandoselo así quedando solo con una camisa de mangas cortas, Jungkook veía su rostro más no veía el antebrazo de Jimin que se encontraba con moretones que figuraban una mano.

"¿Y eso que es?"

"Denunciarte." Lo dijo tranquilamente, pacifico porque sabía que tenía a Jungkook en sus manos.

"¿Y por qué?" Pregunto levantándose del piso y caminando hacía Jimin, todo este suspenso hacía que su cabeza de vueltas.

"Por la muerte de tu difunto esposo y por maltrato familiar." Una vez más lo dijo de forma calmada.

El ceño de Jungkook se frunció de forma inmediata, pensó en las mil probabilidades, pensó en las muchas respuestas pero todas eran erróneas en su conciencia, había solo una respuesta y era la que ya sabía. Escucho como alarmas se encendieron en su cabeza, la señal de peligro se impregnó en sus poros.

"Yo no te he hecho y no tengo nada que ver en la muerte de Yoongi, se demostró que nunca tuve nada que ver."

"¿A si?" Sonrío de lado, levantando su brazo izquierdo, poniendo a la vista los moretones que Jungkook le había causado el día que se enojo por la adquisición de sus acciones. "Estos moretones y estas heridas no dicen lo mismo." Señaló su pómulo morado y el vendaje en su mano. "¿No lo crees?"