Prólogo

2.4K 178 59
                                    

Ya había pasado un mes desde esa gran pelea que habían tenido nuestras cuatro tortugas favoritas con sus yo de otro universo, desde ese día todo se volvió nuevamente aburrido; los Kraang ya no volvieron más, no hubo otro suceso paranormal de nuevo y tampoco otra amenaza del espacio.

En este momento se encontraban cada uno de los hermanos en lo suyo, Leonardo estaba en el dojo meditando para dejar de estresarse por la falta de acción, Raphael se encontraba jugando con mordelon en la sala de estar, Donatello estaba encerrado en su laboratorio y Miguel Angel se encontraba en la cocina con gatito helado.

— Ahs, por favor que pase algo interesante, cualquier cosa! Con tal de que ya no estemos todo el tiempo aquí — pedía el azulado con un toque de desesperación en su voz, no soportaba el hecho de estar encerrado y no hacer nada. Decidió mejor salir del dojo e irse talves a pasear por ahí en la ciudad, pero apenas salió de donde se encontraba y un fuerte grito se escucho del laboratorio de su hermano.

— Ese fue Donnie? — pregunto la tortuga menor, quien salia de la cocina con su mascota en un bol con hielo.

— Ahora que le explotó? — se pregunto el temperamental para, colocando al pequeño animalito en su hombro, dirigirse con sus otros dos hermanos a donde estaba el esbelto.

Al entrar al laboratorio no encontraron rastros de que se haya explotado algo, más bien encontraron al de bandana morada detrás de una silla y con los ojos bien abiertos.

— Donnie, que pasó? — pregunto el líder, quien se iba acercando a su hermano el cual miraba atentamente hacia alguna dirección de la habitación.

— N-no se, de la nada apareció un portal y se llevó mi bastón — informo un tanto más calmado pero preocupado. Su líder lo miraba un poco sorprendido, serán sus otras versiones?

<▪︎▪︎>

Mientras tanto en otro universo un tanto similar al anterior, se encontraban tres tortugas un tanto confundidas por lo que acababa de traer el portal de su hermano.

— Ay, ay, ay — se quejaba el de caparazón blando quien se acariciaba la cabeza por el repentino golpe — Ten más cuidado con tus portales

— Lo siento D, pero, de donde vino eso? — pregunto mientras que miraba el arma que golpeó la cabeza de su gemelo.

— Es idéntico al bastón de Donnie — dijo Raphael examinando el objeto, pero rápidamente lo soltó al ver que de un extremo salió una tipo navaja.

— Wow genial, quiero tocarlo — dijo el anaranjado mientras que se acercaba al bastón paro rápidamente fue elevado por una pinza del de morado — Oye!

— No lo toques Angelo, no sabemos si eso te puede hacer daño — aclaro, viendo como el menor hacia un puchero y con otra pinza le acaricio la cabeza.

— Buenooo, lo volveré a intentar! — dijo emocionado Leonardo comenzando a mover su espada.

— Leo no! — le ordenó, más era tarde, su hermano ya había abierto otro portal.

<▪︎▪︎>

Los chicos se encontraban en un círculo rodeando al científico mientras que intentaban calmarlo por lo que acababa de pasar. El líder seguía pensando que habrá sido ese extraño portal que se llevó el arma de su hermano.

— Calma Don, Leo te dará otro bastón okey? — intentaba calmarlo el pecoso, mientras que el mini mutante acariciaba al esbelto. Donatello dio un pequeño suspiro para después mirar a su hermanito y darle una pequeña sonrisa.

— Okey, ya estoy mejor — susurro el de morado para mirar a su líder que estaba pensando.

— Donnie, como era el portal que viste? — pregunto el mayor, mientras que el científico se quedaba pensando.

— Era celeste y tenia unos diseños un tanto extraño a su alrededor — contesto sin quitarle la mirada a su hermano.

—Celeste y con diseños extraños? No me parece a un portal de nuestras otras versiones — comento Raphael un tanto dudoso.

— Es como este portal? — pregunto Mikey apuntando hacia el suelo sorprendiendo a los tres mayores. En ningún momento se dieron cuenta que tenían esa cosa en sus pies, y sin darles tiempo los teletransporto a otro lugar.

<▪︎▪︎>

Leo observaba su portal un tanto intrigado de lo que saldría de este al igual que sus hermanos, de la nada se escucharon gritos alarmando a los cuatro y rapidamente el de orejas rojas se corrió de debajo del portal del cual calleron cuatro tortugas iguales a ellos.

— Ay, que fue eso- — se pregunto el de bandana azul quien se callo al mirar al frente suyo.

— Wow, otra vez! — grito Miguel Angel muy emocionado mientras que mantenía los brazos en el aire.

— Mikey, eso no fue divertido — lo regaño el esbelto, quien se levantaba y se quedó igual que su líder al ver al frente.

— Oye Leo, estas bien? — pregunto el temperamental al mayor para luego también mirar al frente y quedarse sin palabras.

— Hola — saludo un tanto nervioso la tortuga más alta sin creer lo que hizo su hermano.

— Ehm, hola? — contesto el saludo Leonardo quien con ayuda de su hermano Raphael se levantó.

El lugar se quedó en completo silencio, ninguno de los cuatro sabía muy bien que fue lo que ocurrió exactamente. Ninguno se quitaba la mirada de encima y la impresión en sus rostros era clara.

— Entonces~ son de por aquí? — pregunto el creador de este pequeño problema como si nada.

********************************************

Pequeño Accidente {Pausada}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora