𝘿𝙚𝙨𝙞𝙡𝙪𝙨𝙞ó𝙣 [Omegaverse #CoMPaS]

ℂ𝕒𝕡𝕚𝕥𝕦𝕝𝕠 𝟘𝟞

－ Tú sólo.. ¡Déjame en la cama! － Rius estaba algo agotado, el peli azul apenas podía caminar sin dificultad debido a la notable erección que se le había hecho en el camino a casa. Las feromonas que soltaba eran varias y potentes, los de su casta ya lo habían percibido pero no se acercaban a él por su complexión física. Además, estaba con el hijo del presidente, preferible no estorbar. － Sabes.. Mejor, mejor ven! ¡Ni se te ocurra irte, Riusplay!

Ya había sido consumido por el celo, sólo se limitó a dejarlo recostado en la cama de su habitación e ir en busca de supresores.
Prácticamente supuso que Timba tendría en su hogar así que sólo debía buscar en el baño o en la mesita de noche de su cuarto.
¿En qué otro lugar los dejaría sino?

－ ¿Omega y tus supresores? ¿Dónde los escondes? － En el baño no había nada, solo botellas de higiene personal y en la mesita había velas, un reloj de mano y dinero, obviamente no tomaría nada de eso. Sería incapaz. － ¿Acaso se te acabaron? No queda más que ir a comprar.

－ ¡NO TE PUEDES IR! ¡¿ENSERIO VAS A DEJARME ASÍ?! ¡¿EN UN ESTADO TAN VULNERABLE?! － ¿Rius pensaba dejarlo solo? Definitivamente no lo permitiría, se supone que quiere llegar a ser algo más, ¿no? Mínimo quería que lo consintiera en ese estado. － ¡ALFA POCO HOMBRE!

－ Eh.. Relájate Timba, no pensaba dejarte. Mandaré a uno de mis hombres en busca de tu pastilla. Yo me quedaré contigo, prometí cuidarte y eso haré. － Se había puesto un poco nervioso por cómo le levantó el tono de voz, prácticamente le gritó y eso realmente le fue inesperado y sorpresivo. Con una pequeña sonrisa se acercó a él para tomar su rostro con ambas manos. － No me iré de tu lado, ¿sí?

Unos pocos pero largos segundos pasaron mientras el más alto lo miraba a los ojos apreciando cada facción de su rostro y buscando en sus ojos alguna pista que lo delatara de la farsa.
Pero no había ninguna, realmente se quedaría, por lo que sólo relajó el ceño y lo acomodó sobre su regazo mientras acercaba su rostro al contrario.

－ ¿Por qué no liberas tu aroma para mí..? － Le parecía fascinante las expresiones y gestos del Omega, lo miraba con súplica y excitación, el color rojo en sus mejillas lo delataba, era algo que quedaría grabado en su mente de por vida, jamás lo olvidaría. Le encantaba.

－ Mmmh.. No sé, ¿por qué debería hacerlo? － El gesto de enojo que dio le ocasionó risa y ternura, especialmente la acción que luego hizo de ocultar su rostro en su pecho.

－ ¿Cómo que por qué, Rius? Quiero.. Quiero sentirte, estoy seguro que me encantará.. Todo.. 𝑻𝒐𝒅𝒐 𝒍𝒐 𝒒𝒖𝒆 𝒎𝒆 𝒉𝒂𝒈𝒂𝒔 𝒎𝒆 𝒆𝒏𝒄𝒂𝒏𝒕𝒂𝒓𝒂..~

－ ¿Qué insinúas, Vk? Tomarás tu supresor antes de cometer cualquier locura. Más bien.. Quizás una ducha de agua fría te sirva cómo calmante. Mi hermano dice que funciona muy bien.

－ ¡Me vale una mierda lo que diga tu hermano! No quiero una ducha ahora, mucho menos el supresor, soy.. soy intolerante..

－ Ajá, no te la crees ni tú, vamos, hay que levantarn-

En un acto de desesperación por ver cómo el albino se levantaba de su regazo, tomó su rostro y le dio un beso en los labios esperando ser correspondido y que así, se dejara llevar.
Lo cuál de cierta forma le resultó efectivo, ahora se encontraban besando con cariño de una manera lenta y pacionante.
Timba quería más, estaba seguro de ello.

De un momento a otro, terminó debajo del Alfa con las manos sobre su hombro en un beso lujurioso y húmedo con lengua.
Podía sentir cómo la rodilla del contrario rozaba apropósito con su miembro, sacandole ligeros gemidos ahogados.