𝘿𝙚𝙨𝙞𝙡𝙪𝙨𝙞ó𝙣 [Omegaverse #CoMPaS]

ℂ𝕒𝕡𝕚𝕥𝕦𝕝𝕠 𝟘𝟜

No había pasado ni una semana de que el hijo preferido del gran Presidente haya iniciado sus clases de entrenamiento físico, guiadas y supervisadas por Víctor y Timba, cuando el último mencionado se estaba empezando a sentir irritado por su presencia.
Y es que el Albino no disimulaba muy bien, era obvio el interés que tenía por aquel hombre más alto que él [+25cm], prácticamente lo miraba con una curiosa combinación de ternura y excitación.
Timba no entendía, o bueno, no le gustaba verlo, era de esperarse que un Omega cómo Rius se ponga así con él. Es lo que genera normalmente en toda la casta Omega en general.
No importa cómo sean.

Y eso le molestaba, de hecho, incluso fuera de horarios de clase podía sentir la presencia de aquel niño mimado [a sus ojos], ni siquiera necesitaba revisar su perímetro para saber que estaba oculto detrás de un árbol observándolo.
No había que ser tan inteligente para saberlo.

Dio un suspiro cansado intentando calmar sus nervios, nervios que eran de furia.
Víctor no estaba a su lado, tuvo que retirarse antes debido a trabajo y eso Timba lo entendía. Era muy trabajador y alegre respecto a eso.
No cómo él que sólo acepta si la paga es Muy buena o simplemente si tiene ganas de dar entrenamiento.

Estaba en una plaza observando el cielo con un batido de chocolate y café en su mano derecha. En una parte algo alejada del resto.

Rius por su parte inhaló y exhaló tomando suficiente valor para acercarse a hablar con él, quería tener una charla para conocerlo mejor, después de todo en el Gimnasio el peli azul no le habla a menos que sea para corregir su postura o darle recetas nutritivas para mejorar su salud y rendimiento físico.
A parte le hablaba de mala manera, cómo si tuviera algo malo con él, eso lo confundía y a la vez le interesaba.
Para él, aquel sujeto era un Alfa único e interesante y estaba dispuesto a volver a intentar tener una relación con alguien de su misma casta. Sólo gracias a él.

－ ¿Qué es lo que quiere el amado hijo del Presidente de mí ahora? － Le había tomado por sorpresa el haber escuchado la voz de aquel hombre. ¡Claro! Ya estaba detrás de él, podía ver claramente la ancha espalda del contrario quién no quería verlo. － El próximo encuentro con nosotros para tu entrenamiento es el Lunes. Sábados y Domingos son días libres.

Luego de unos largos segundos de silencio, se dio media vuelta para asegurarse de que no estaba mal de la cabeza o que el batido no le había hecho imaginar cosas y que aquel Albino seguía ahí.
Se miraron mutuamente unos minutos más sin decir nada, cosa que irritaba al mayor y ponía ansioso al menor.

－ Soy consciente de ello. De hecho.. Lamento seguirlo de esta manera, pero usted me parece realmente interesante. Me sentiría honrado si me permitiera que tengamos conversaciones casuales cómo lo suelen hacer el resto de la gente. － Para este momento ya tenía varias dudas en su cabeza.. Entre todas, ¿acaso Rius sabía que él sabía que lo seguía? Vaya, sí que era un raro.. Pero pase lo que pase no se dejaría endulzar por un Omega cómo él.

－ Escucha, sólo porque seas el hijo del gran líder de este país no significa que puedas tener a quienes quieras para ti. Por lo que déjame decirte que no, gracias. No estoy interesado en Omegas. － ¿Escuchó bien? ¿Un Alfa que no está interesado en Omegas? Alto.. ¡¿Acaso creía que él era un Omega?! Sí, sin duda, eso sí que lo hizo enfadar un poco, pero no pensaba quejarse, con ese aspecto cualquiera pensaría lo mismo. － Así que si me disculpas, ya debo irme.

－ ¡Espera, Timba! ¡Soy un Alfa! Sé que no parezco uno por mi físico.. De hecho esa es la razón por la que tu compañero y tú me entrenan. Mi familia espera que sea un Alfa digno que se haga respetar.. ¡Cómo tú! － ¡¿ALFA?! ¡¿RIUS ERA UN ALFA?! No, sí, definitivamente se le había caído el batido de la sorpresa, no se esperaba eso. Aunque.. ¿Puede que sean parecidos? － Ahora sabes mi verdadera casta.. ¿Estarías interesado en estar conmigo? Bueno! Claro, no cómo pareja.. A menos que quieras! Pero.. Sólo.. Eh.. S..somos a..amigos??