1.- La misteriosa mujer

36 10 12
                                    

Sintió los molestos rayos de sol darle en toda la cara; parpadeó intentando localizar el lugar donde se encontraba.

Su cabeza estaba por estallarle, ante el mínimo movimiento de su cuerpo, Dios mío ¿qué ocurrió ayer?

Sintiéndose un poco débil, se levantó a duras penas, su cuerpo dolía y sentía los ojos hinchados, emitió un pequeña queja mientras escuchaba un tarareo a su costado.

Lentamente giró la cabeza, encontrando una bella mujer quien dormitaba, su cabello desordenado contra su almohada, Kanako en cualquier otra ocasión, se hubiese hundido en el rico olor que desprendía la mujer a su lado.

Pero evidentemente era ¡una jodida desconocida! Como todo ser racional, lo primero que hizo fue gritar, la extraña se removió mientras fruncía el ceño.

Kanako observó como la contraria se levantaba y estiraba su cuerpo, una total falta de respeto, la chica parecía mucho más tranquila ante la situación (Y ciertamente, no admitiría que le recordaba de una forma entrañable a un gato)

— Primero que todo, buenos días —saludó brevemente como si nada—. Y segundo, ¿no crees que es muy extraño gritar a primeras horas de la mañana? —cuestionó, enarcando una ceja.

¡Era una total falta de respeto! ¡No era hora de socializar!

— No, no, ¡extraña tú, señorita del circo! —le recriminó infantilmente—. No sé si esto es una especie de broma pero créeme, es la peor de todas además ¿Qué demonios haces en mi cama? ¿qué pasó anoche? ¡¿Tuvimos sexo, acaso?! —a medida que preguntaba, su voz subía gradualmente al punto de chillar.

Ella era virgen, era tan tonto que tuviera su primera vez con alguien con quien no tenía vínculo alguno; señor perdóname, yo te juro que si quería llegar virgen al matrimonio.

Kanako ya estaba pidiendo clemencia por semejante pecado, estaba a punto de arrodillarse cuando la contraria gruño con irritación, ¡¿Qué derecho tenía ella?!

— Primero relájate, ¿sabes que es de mala educación bombardear a alguien de preguntas, a primera hora de la mañana cuando su cerebro a penas está procesando? —arrugó la nariz, Kanako estaba lo suficiente enfada como para pasar por alto el gesto.

A este punto la mente de Kanako ignoró por completo sus quejas y buscó a tientas en su mesita de noche algo cercano con lo que protegerse.

Al sentir sus dedos rozando algo de origen extraño, lo agarró y pinchó el pecho de la chica despeinada.

Está fingió un grito de dolor y se tiró dramáticamente a la cama, suplicando que no la mataran con una ¡¿zanahoria?!

— ¿Ya terminaste? —cuestionó, enarcando una ceja mientras se apoyaba en la cama y la examinaba.

¿Por qué de todas las cosas, tenía una zanahoria en su mano? Ew, chilló avergonzada y lanzó el vegetal, tan lejos como se lo permitía su brazo, Dios Santo, hoy no era su día.

Se estaba hundiendo en su propia miseria, hasta que ve un par de ojos café asomándose en su rostro, pequeñas marcas de labial manchaban la mejilla, labios y frente de la chica.

Kanako curiosa la examinó, dándose cuenta por primera vez que además de ser bonita, tenía marcas de labial en el rostro, ¿no había sido ella, no?

— Disculpa, ¿por qué tienes lápiz labial en la cara? —ladeo la cabeza, observando como curiosamente la menor se ponía colorada, tosiendo incomodamente, volteó el rostro, lejos de la vista de Kanako.

Era una curiosa vista, en su interior preguntándose, que otra clase de expresión podría tener, hundiendose nuevamente en su tormenta de pensamientos la contraria rompió el silencio que se había formado.

— No te gustaría saber esa información...—esquivó, su voz saliendo de forma extraña, como si se estuviera quebrando.

Kanako jadeó como si se estuviera dando cuenta de algo, acaso...

— ¡¿Fui yo?! —al soltarlo, su rostro imitó el color de la menor, quien le dió un rápido vistazo y suspiró levantándose de la cama—. ¡Oye! ¡No me ignores! —refunfuño siguiendola.

Kanako siguió por toda su casa a la extraña, quién de alguna forma parecía conocer, bastante curioso.

Pero Kanako no la iba a dejar, esa mujer tenía muchas preguntas sin respuesta y Kanako no se quedaría de brazos cruzados esperando, no señor, ella le iba a sacar hasta lo último, ¡ella necesitaba respuestas!

Estaba tan inmersa en sus pensamientos, sí, por tercera vez en la hora que a penas y captó las palabras de la chica.

— Abre la boca —ella de forma inconciente hizo caso y recibió una cucharada de ¿sopa?

Kanako saboreó gustosa, arrebatándole la cuchara a la chica, quien ahora estaba preparándose un café, que grosera, por cierto.

— Generalmente, suelen decir que la sopa, puede ayudarte con la resaca —habló, dejando su taza para ir en busca de una pastilla y un vaso de agua, se demoró mucho, ya que sacó un pequeño papel, escribiendo mientras sacaba la lengua de la concentración.

No ahora Kanako, no es hora de que empieces con tus homosexualidades, se reprendió ante los pensamientos que amenazaban su mente.

— Toma —se acercó, pasándole el vaso y la pastilla, junto a una notita que decía:“Sana, sana, colita de rana, sino sana hoy, sanará mañana, espero que la rana funcione y que puedas recuperarte. —A".

Kanako casi se atragantó con la sopa, conteniendo la risa, esta chica era tan jodidamente rara, por supuesto que no en mal sentido, sino más en un sentido adorable, a penas la conocía y ya le caía bien, claro que omitiendo el hecho de que no tuvieron un encuentro tan agradable y que aún le debía respuestas.

"A" o como sea que se llame, estaba tomando su café, dándole leves vistazos a Kanako de vez en cuando, no notó que la chica reía detrás de su café, sus ojos mostrando anhelo de una forma cariñosa, como si la conociera de años.

Y mientras el desayuno, transcurría, Kanako tenía muchas preguntas en mente, tendría que dejarlo para después, ya que tenía que ir al trabajo...

¡Mierda! ¡Tenía que ir al trabajo! Se apresuró, levantando el plato y tratándose la sopa, ignorando los obviamente malos modales, murmura un breve agradecimiento y corrió a trompicones a su habitación.
_______________________________________
Me quiero morir, banda. Espero que disfruten este capítulo, pues si bien, ya tenía resúmen de todo, esto fue lo que salió aaa, espero que pueda ser agradable y no tedioso, en fin, gracias por leer.

—Aure.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Feb 28, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

LipstickDonde viven las historias. Descúbrelo ahora