Cap-9~Culminacion

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Akako le recibió en su cuarto, se había

dado una ducha, quería estar limpia

para ese momento, se sentaron en

la cama, y, ni cortos ni perezosos,

comenzaron a besarse, mientras

las manos de Hayate acariciaban su

espalda, bajo hacia su culo y terminó

acariciando su pene, ya erecto, sobre el

slip y se dejaron caer sobre la cama sin

cesar los besos.

Luego, al separar sus bocas, ella

destaco el ambiente y le saco primero la polera y luego con delicadeza el slip de él, disfrutando del espectáculo que le ofrecía su pene erecto por ella, lo acarició con suavidad hasta atraparlo entre sus dedos y mirándoke a los ojos me pregunto "quieres algo rico", yo él respondió que si y vió como su pene se perdió dentro su boca en una sucesión de besos, mamadas y chupadas increibles. Ella no cesaba en su gusto y le devoraba con verdadera pasión.

Luego de un delicioso rato y sintiendo

que el placer se le venia encima, la

advirtió para que parara, pues, quería

disfrutar ya de ella.

Se acomodaron y comenzó a

desnudarla, quitando su pantalón,

luego su blusa, de inmediato comenzó

a besar sus pechos, pues le encantan,

mientras le quitaba el sostén, y ella

le abrazaba apretándole contra ella,

una vez libres sus pechos y en sus

manos, se quito el calzón, dejando

ver; su depilada y virgen vagina,

entonces la puso sobre su pene, duro

y ansioso también, y con una sonrisa

picara le miró y le decía que quería

algo verdaderamente increíble e

inolvidable. Entonces levantándose un

poco y tomando su pene en su mano

lo apunto a su cuerpo y se penetro

suave pero firmemente, perdiéndose

dentro de su vagina y sintiendo el

calor de su cuerpo que le rodeaba, de

inmediato dieron impulso a sus deseos

y brindandole su mejor erección ella

comenzó a cabalgarle, subiendo y

bajando, a veces suavemente para

apreciar todo el largo de su carne

entrando en su cuerpo, parecía,

verdaderamente una experta.

Ella no paraba de moverse y agitar

su cuerpo ensartado por él, que no

aflojaba su erección brindándole lo

mejor, las manos de Ilayate en tantos

no paraban de acariciar sus senos, su

cintura, sus caderas, aferrándole a ella

Paraiso Erótico (Icha icha Paradise)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora