❝Hyunjin no entendía la rara personalidad de Jeongin y tampoco lo entendía a él hasta que descubrió que el pequeño chico provenía del año 1949 y que fue prisionero en los campos de concentración de Hitler.❞
» adaptación, todos los créditos a @CB970N...
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BangChan tras entrar al baño, se metió a la ducha y cerró la puerta, era totalmente negra, al ser del primer piso de la casa suponía que era normal.
Miró aquellos azulejos, eran como los que había en su propia habitación actualmente así que no pudo evitar sonreír.
Sin embargo, la sonrisa se borró cuando se hizo una simple pregunta, ¿qué iba a pasar si Jihyo realmente le engañaba? Es decir, quería poder aclarar que confiaba en ella pero si engañaba a Hyunjin en la otra línea, ¿por qué habría razón para no hacerlo en esta?
A los segundos, escuchó la puerta abrirse por lo que se quedó quieto e intentó respirar lo más suave posible. Luego, volvió a oír la puerta.
— ¿Mh? ¿Daniel? ¿Qué haces aquí? —murmuró primero la chica al ver a su compañero de clases.
— Jihyo, ¿tú qué haces aquí? —frunció un poco su ceño confundido—. Me dijeron que un chico quería hablar conmigo, y que vendría aquí.
— A mí me dijeron que Chan quería hablar conmigo y me esperaría aquí. —ambos rieron levemente ante la respuesta del otro—. Sabes como es Jackson, tal vez es otra de sus infantiles bromas.
— Tienes razón, además, él conoce a todo el mundo, debí suponer que era una broma cuando no me dijo el nombre del "supuesto" chico. —se rió leve—. ¿O quizás era tu novio Chan?
— Lo dudo... Ah, me asusté cuando me lo dijo, pensé "va a terminarme, me va a dejar." Que susto. —suspiró aliviada pero volvió a sonreír— Por cierto... Luces muy bien hoy.
— Gracias por mencionarlo, tú te ves hermosa. —otra amplia sonrisa adornó su rostro.
— También lo agradezco. —le dio una pequeña palmada en su hombro—. Como sea, hay que ir a golpear a Jackson, ¿Te parece?
— Estoy de acuerdo.
Sonrieron antes de salir, Chan esperó el sonido de la puerta cerrarse para poder suspirar tranquilamente, se sentía aliviado de todo. Su pecho dejó de sentir una presión y finalmente su cuerpo se relajó.
Se alegraba de que Jihyo no lo dejara como Yeji por otro, aunque tampoco odiaba a Yeji por eso, Minho era su amigo (al menos aún lo considera así) así que no podía odiarlo, nadie podía elegir a quien amar.
Salió del baño e inmediatamente Hyunjin y Jeongin se acercaron a él, pero no hizo falta decir algo, su amplia sonrisa alegre y feliz bastó para que aquellos dos lo entendieran todo.
— Ahora ve con ella y dale mucho amor. —el pelinegro golpeó suavemente su hombro.
— Gracias Hyunjin, a ti también Jeongin. —acarició el cabello del último antes de salir al patio a buscar a su chica.
— Me alegra que todo haya salido bien. Se merece algo mejor que Yeji. —murmuró antes de caminar de igual manera al patio, siendo seguido por el rubio.
