"Desnudando un alma."

6 2 0
                                    


🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹
Estoy sola en el baño, sentada sobre la húmeda superficie de la bañera, me pierdo en mis pensamientos, una gota de agua salada se escabulle despacio por mi mejilla, fugitiva y revolucionaria, junto a otras, se cuela por los poros de mi piel para penetrar mi alma, mi alma se revela, está cansada de esconderse y se desnuda, no pide ayuda, esta vez no es como cuando en el sexo no alcanza el clip del sujetador, esta vez, necesita hacerlo sola.
Lentamente se desmaquilla, quita esa máscara que la esconde y cubre las imperfecciones de su rostro, esa que la hace sentir bonita y segura de sí misma porque nadie puede verla, nadie puede mirar por sus ventanas si están cubiertas, capas de rímel y corrector esconden los desvelos por amores no correspondidos, sus labios, que ahora ya no parecen tan sensuales, se muerden solos, se percatan de su sabor, y aunque no saben cómo los extranjeros que frecuentemente besan, esta vez, saben a hogar, a familiaridad.
- Pobre alma - dicen algunos de los órganos internos que la ayudan a ser.
- ¿Qué le habrá pasado esta vez? - preguntan otros
- pues lo de siempre - dice el cerebro - que no me ha hecho caso y se ha hecho daño otra vez
- Pobrecilla - vuelven a compadecer
- Ven alma, vamos a conversar - dice el sabio, como siempre, racional. Ella va, se sienta, escucha, pero aún no logra hablar, como en otras ocasiones, la mira compasivo, pero ella no quiere compasión, calla, y se va.
El alma quiere abandonar el cuerpo, salir un rato, quizás, pasear, pero no puede, no es nada un alma sin un cuerpo, el cuerpo sin ella puede funcionar, pero ella no es tan independiente. Los necesita, necesita un cerebro con constantes contradicciones para no aburrirse, necesita los nervios para que la hagan reír, a la sangre para mantenerla caliente y a las arterias para que esta pueda fluir, también necesita al corazón, ese imbécil nunca le hace caso, por su culpa siempre acaba metida en problemas, mira que le dice deje de acelerarse por cualquiera, pero parece que esa es su razón de existir, sin embargo, ahora mismo solo quiere ponerlos en modo "off" y dormir.
Lo hace, se aleja un poco, está sola, pero no logra conciliar el sueño - ¿Qué me pasó? - pregunta al vacío, el eco responde - almita, es fácil, como tantas otras, te perdiste. A ella no le gusta esa respuesta, sabe exactamente donde está, tonto eco, siempre diciendo cosas sin sentido y llenando su cerebro con absurdas preguntas que no puede resolver, recuerda esa vez que le dijo que era buena, y luego que era egoísta, vaya contradicción, no se puede ser ambas cosas a la vez, fue lo primero que pensó, pero al irse, de camino, no podía quitarse aquello de la cabeza, y lo entendió, si era buena, siempre hacía el bien a los demás, siempre y cuando, el bien no implicara hacerse el mal, decía siempre la verdad, si la verdad no la afectaba, entonces no mentía, pero callaba, daba a otros de todo cuanto tenía, pero jamás lo suficiente como para quedarse sin nada, se sacrificaba por aquellos a quienes amaba, claro, siempre y cuando el sacrificio no le afectara, si, era egoísta, concluyó el alma, aunque ese día lo disfrazó, decidió que egoísmo era una palabra muy fea, ella era práctica, esa era la palabra adecuada, así lo disfrazaban otros - según había escuchado.
Pero no, alma, hoy no - se dijo - al final ese estúpido eco resulta que tiene siempre la razón, hoy empezaste a desnudarte, continúa, se valiente, necesitas conocerte, solo así podrás volver a vestirte, pero recuerda, es vestirte, no disfrazarte o camuflarte. Buscarás tu estilo, así tengas que inventar una nueva moda, vamos responde - se dijo - se sincera - ¿Qué piensas tu del amor? Calló por unos instantes, su pregunta la sorprendió, por lo cual se tomó el tiempo de meditarlo, no quería responderse mal y fallar a la primera.
- el amor, como tal, es hermoso, no le hace daño a nadie, solo bien, sueñas, eres feliz, sientes que estás flotando, no es que veas las nubes y las estrellas, es que te sientes en ellas, y cuando miras todo desde allí arriba el resto del mundo es minúsculo, y eso está bien, no, de hecho, eso está muy bien, el problema realmente no es el amor, el problema es el despecho, el desamor.
El despecho mata, el despecho hiere, el despecho duele, no es como el tipo de dolor que se pueda resolver con analgésicos, no, este no, hay quien lo resuelve con alcohol, ese es el peor método, en principios se te olvida, pero luego, recuerdas más. El despecho destruye desde adentro, sientes como cada molécula de tu cuerpo se empieza a deteriorar, como algunas partes mueren sin que lo puedas parar. Pasas por muchas fases, es un proceso lento donde los recuerdos te inundan y poco a poco te comienzas asfixiar, y esas lágrimas, ¡esas malditas lágrimas!, crean un mar de soledad.
La soledad, a veces, en muy pocas ocasiones, es una buena amiga, lástima que su presencia solo dura hasta que pasa su momento. Luego de ella nos visitan todos esos miedos, los que no somos capaces de controlar y nos empeñamos en disfrazar con falsas capas de seguridad.
La seguridad puede ir de cualquier cosa, ya ni siquiera la logramos identificar, lo mismo va de ropa cara que de un enorme ego. Esa que se ajusta a tu cintura y te resalta las pompis para hacerte hermosa, esa que te hace creer que si no tienes unas buenas tetas y medidas perfectas no serías capaz de gustarle a nadie, esa, que no te cuenta lo caliente que te vez así, desnuda, sin maquillaje, vestida de todas tus imperfecciones.
Y las imperfecciones, vaya mierda, la sociedad se ha inventado tantas, que tal parece que la creación más preciada de Dios haya sido el más absurdo error, estoy a punto de creer que soy solo el borrón de un borrador - pensó el alma - imagino que la obra maestra vendrá después y que yo, simplemente no estaré.
El alma cuestionó cada decisión, palabra, sentimiento que hubiera tomado, dicho, o experimentado alguna vez. Estableció una conversación entre su subconsciente y el eco; y con cada vibración el eco se acercaba más a ella, ella temblaba, juntos masturbaban cada pausa del silencio.
El eco se encargó de despeinar la corona de pesimismo que la acompañaba a diario, soltó los malos pensamientos, dejó al descubierto cada uno de sus lunares, eliminó el peso de los metales que la adornaban, dibujó la expresión de sonrisa sempiterna en su rostro, destapó las ilusiones que por miedo se había encargado de ocultar, le dijo lo bien que le quedaban esos desvelos culpa de aquellos a quien amaba, sopló aliento de vida a sus ganas, besó sus delirios y se deleitó en sus sueños. El eco también se encargó de abrir el telón y sentarse en primera fila para ver su obra de teatro, sabiéndose triunfador, rompió el puente entre la soledad y la pasión, acarició su lujuria hasta que esta se humedeció y en un jugo agridulce vio su placer, arder, mientras el melifluo de un gemido, inició un gran concierto.
El subconsciente no fue poético, fue práctico y racional. Tomó la ignorancia, la desechó y empezó a estudiar cada parábola, cada recta que encontró, le dijo que no era perfecta, es cierto, sin embargo, era ciencia, y eso era mucho mejor. El alma a principios, no entendió esa acotación, pero el subconsciente le reveló el código para desencriptar el mensaje, y ella al fin comprendió su funcionamiento, era como un planeta en el universo, pasaba por fases, tenía volcanes y huracanes que hacían de su vida un desastre, pero también tenía playas, bosques y arrecifes coralinos.
El alma, por supuesto, colaboró en cada parte del proceso, mientras el eco actuaba, ella se dejaba hacer, ordenó a la angustia quedarse en su lugar, escondió los miedos donde no fuera capaz de encontrarlos, tomó la inseguridad y la regaló al olvido.
Cuando el subconsciente hablaba, ella callaba, escuchaba, tomaba nota y estudiaban, no olvidó hacer su tarea, y de hecho, hasta investigó para ir mejor preparada a una nueva conferencia.
Al terminar su trío de sensaciones, pensamientos y razones, el alma se había desnudado completa, se había enamorado del eco y acariciado al subconsciente, se había enamorado de ella, se había hecho feliz.
🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Feb 26, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Espejo de un alma.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora