The circense

Capítulo 1- Septiembre, año 2014

Harry's POV

 

Me encontraba desempacando en el hotel Caesars Palace de Las Vegas, acabábamos de llegar junto con los chicos, son unos días de descanso grupal que hemos decidido pasarlo en las Vegas-bueno, no son muchos días, en realidad nos dieron solamente tres, por lo cual decidimos venir a divertirnos un poco- y las Vegas parece lo mejor.

-Harry, ¿se puede pasar?- dijo Niall desde el otro lado de la puerta.

-Pasa Niall-conteste sin mucho interés. Realmente, estoy bastante aburrido, ya me quiero entretener.

-Harry-llego Niall mirándome con pucheros- yo escuche que hoy había un show tipo circo aquí en el Coliseo del Caesars Palace y es bastante bueno por lo que he investigado, y quiero ir. Pero los Louis y Zayn quieren ir al casino.

-Y eso me incumbe... ¿por qué?.

-Joder, tú decides a qué lugar vamos, Liam esta de mi lado, dice que hay que ver cosas nuevas y que casinos hay en todas partes. ¿Verdad que si?, vamos Harry, no te arrepentirás.

El punto de Liam tiene razón, hemos ido miles de veces a cualquier casino y un circo no está nada mal.

-Supongo que no tienen payasos ¿verdad?-dije con miedo

Mi voz sonó como un gatito asustado.

Estúpidos payasos con caras sobre-maquilladas.

 -No, he estado investigando y tienen shows de comedia, pero no maquillan y visten a las personas como payasos-Dijo seguro.

-Niall Horan investigando, me has sorprendido, amigo.

-Harry Styles sin estar en Los Angeles, me sorprendes, amigo.

-Cállate a no ser que quieras que esté de acuerdo con Louis y Zayn.

-¿Eso quiere decir que si vamos?.

-Tú qué crees pedazo de idiota.

-Harry alias Rapunzel, te amo- salto hacia mí dándome miles de abrazos.

-Uno Niall, amigo, te quiero. Pero me gustan los coños, Dos si sigues molestando me arrepentiré, Tres mi pelo me queda hermoso, soy hermoso. Joder me amo-dije soltando una sonora carcajada.

-Como tu digas-Dijo riendo- iré a decirle a los chicos- y salió corriendo de mi habitación, dando un fuerte portazo.

-Eh, no le pegues así a la puerta irlandés tarado.

Prendí el televisor, pero no tengo ganas muchas ganas de ver algo, tengo mucho sueño y una siesta no estaría nada de mal. Estaba dejándome caer en los brazos de Morfeo cuando escucho un fuerte portazo en mi puerta y después un peso muerto encima mío.