Mi pequeño mentiroso

Capítulo 2

El mar. 

El personal recibe en la entrada del Hotel al segundo nieto Wang. Aquel joven de elegante porte, gran altura, piel perfecta y clara, cabellos castaño medio, ojos y boca sensual, rostro serio sin expresión alguna, cuerpo masculino fino y perfecto adornado con prendas de las mejores marcas desciende de la camioneta negra. Rápidamente sus asistentes sostienen el maletín y abren la puerta del Hotel.

Wang YiBo entra a su habitación para tomar un baño relajante después de un día pesado. Al salir recibe la llamada de su mejor amigo y colega, Sehun.

-¿Cómo estuvo? - pregunta YiBo

- Excelente hermano, todo salió a la perfección y creo que estoy enamorado -

-Siempre dices lo mismo -

-Jajajaja lo sé pero tal vez esta vez sí es verdad -

-También siempre dices eso -

- Y tú siempre tienes el mismo tono de voz, serio -

-También siempre dices eso -

-Jajajaja Ok, dime ¿Encontraste algo? -

-No -

-Queda una semana, hermano -

-Lo sé -

-¿Tienes un plan? -

-... -

-Ok, tu silencio me dice todo. ¿Quieres dar un paseo? te hará bien salir, el mar está de lujo. ¡Juro que no tengo otros planes! ¡Esta vez solo es a pasear y los dulces! Sé que estás tenso por lo de tu primo por eso no pretendo llevarte con ninguna de mis chicas, que por cierto estarían dispuestas a ayudarte a desestresar y...

Tiiiiiiiiiiiii. La llamada ha sido terminada

-¡Noooo, Hermanoooo!

*

Sehun y YiBo se estacionan en el mirador de la costa. La tarde noche es perfecta. Ambos atractivos jóvenes observan el mar mientras beben

-A veces solo se necesita esto. En los lugares menos esperados encuentras grandes bellezas -

-¿Lo dices por tu reciente conquista?

-Jajajaja sí y no - después de un silencio largo 

-La tía Yiyi sigue agonizando, no resistirá mucho -

-Lo sé -

- Hermano, sé que le prometiste encontrar a Fanxing pero después de quince años sinceramente creo que es imposible -

-Nnm -

-Mmm...aunque ya aceptaron la realidad la encomienda del señor Wang es muy pesada...te delegó un asunto muy delicado -

YiBo no responde, sólo sigue mirando hacia el mar y terminando su bebida

-Sube, vayamos por los dulces de Haikuan y...¿quieres una compañía? -

YiBo arroja su lata vacía a la cara de su colega, Sehun en modo dramático le recrimina por eso mientras ambos suben al automóvil partiendo.

*

Por otro lado, Zhan y YuBin avanzan con un par de bolsas negras por la playa, sus pies descalzos son tocados por las olas del mar, ambos sonrientes y gustosos

-Zhan, las nenas estarán encantadas -

-Lo sé, jajajaja ya quiero verlas-

-¿Cuándo partimos, Zhan?

-Mañana a esta misma hora, me toca conducir esta vez -

-De acuerdo -

Suben por los callejones del lugar, de repente Zhan siente una extraña presencia

-YuBin, toma las bolsas y regresa al hotel -

-¿Son ellos?

-Sí -

-Entendido -

y como si nada los dos amigos separan su camino para despistar a quien los iba siguiendo. Zhan al notar que nadie más sigue a YuBin empieza a correr para perder a los acechantes. Corre entre los callejones hasta la zona de turismo, ahí trata de perder a los tres hombres que lo siguen cuando de repente al girar por la esquina de la cuadra choca con alguien, Zhan cae al suelo

-Auch -

-...¿Xing? - menciona Sehun

Zhan levanta la mirada para toparse al joven con el que chocó, era un joven extremadamente atractivo, sobre todo esos ojos profundos. YiBo divisa al chico bajo él, sí, es el mismo chico que sujetó sus pies ese día en el aeropuerto. La memoria de YiBo es increíble, jamás olvida un rostro y menos a este chico con el peculiar lunar cerca del labio inferior

-Ah... -

Zhan iba a hablar cuando escucha los pasos rápidos acercarse a ellos lo que lo hace pararse a toda prisa y esconderse sin pensarlo detrás del chico de apariencia fría. YiBo se ha quedado inmóvil, no está acostumbrado al contacto físico ni siquiera de su familia o amigos más cercanos y este chico desconocido ya era la segunda vez que lo sujetaba. Los hombres que perseguían a Zhan pasan de largo al mirar a los jóvenes en esa esquina, sobre todo cuando el castaño parece fulminarlos con la mirada. Una vez que se han ido Sehun voltea al lugar donde Zhan se esconde

-Xing, deberías soltar a este hombre, parece una piedra -

Zhan se da cuenta que sus manos presionan la ropa del joven y rápidamente lo suelta

-Ah, disculpa -

y con una sonrisa un tanto nerviosa trata de ignorar la mirada penetrante del joven a su lado pero frunce una ceja mencionando

-¿Podrías dejar de verme así?

-¿Así cómo? -

-Así como me estás mirando -

-Ah jajajaja no te preocupes Xing siempre tiene esa mirada - menciona Sehun

-Ah... -

y sin esperarlo, tras una sensación incómoda, Zhan vuelve a cruzar su mirada con el joven castaño por la posición directa que éste tomó frente a él, pudo notar la considerable estatura que sobrepasaba la suya

-Tú, trabaja para mí -

-¿Eh? -

-... -