Diego & Sebastián

Cuando llegaron los exámenes

Sebas y yo estuvimos pasando varios fines de semana juntos, varias tardes entre semana y varios días en los que no hacíamos nada y aún así nos divertíamos, el problema fue cuando empezamos a dejar la escuela en segundo lugar y llegaron las fechas de exámenes. Por estar juntos se nos olvidaba que teníamos exámenes, no estudiábamos y nuestros promedios empezaron a bajar un poco. A Sebas le daba miedo su calificación y le aterraba que se fuera a quedar sólo por no ser tan inteligente o no tener tan buenas calificaciones como los demás. Cada vez que nos veíamos estaba estresado por sus tareas, calificaciones o proyectos y era muy molesto para él estar estresado casi todo el tiempo, así que decidimos dejar de vernos tanto entre semana fuera de horario de clases. Eso fue un poco doloroso para mí porque sabía que no le iba a poder hablar en toda la tarde hasta que él decidiera enviarme un mensaje de buenas noches o algo parecido, pero yo sabía que hacía esto por su bienestar mental y por su paz mental.

Llegó el fin de semana y nos vimos en su casa. Llegué a su casa a las 7 de la noche, lo abracé, le di un pequeño beso de saludo en la boca y entramos a su casa y su cuarto, en dónde estuvimos platicando por un rato acostados en su cama de cómo nos sentíamos al respecto de no vernos entre semana. Yo le dije que me sentía un poco sólo pero que estaba bien porque sabía que él estaba bien y eso me genera un estado de comfort.

"Yo te he extrañado demasiado" - Me dijo

"¿En serio?"

"En serio" - Me dijo - "Te pienso todo el día, todos los días y lo único que quiero es estar entre tus brazos"

Estando acostado, abro mis brazos y despejo mi pecho para que él se pueda acostar en él. Él se acuesta y me abraza con cariño.

"Te quiero" - Me dijo

"Yo también te quiero" - Le respondí

Él se acercó a mi boca con la intención de besarme y, cuando estaba a punto de hacerlo, se me quedó viendo directo a los ojos por unos segundos hasta que me besó apasionadamente acercándome a su cuerpo como si no me hubiera besado en semanas. Estuvimos besándonos por unos minutos y, un rato después, sentí que una de sus manos bajaba por mi pecho, llegaba hasta mi cadera y acariciaba un poco mi panza mientras me subía la playera lento y poco a poco. La otra mano estaba sujetando mi cuello y acariciando mi nuca. Sebas me estaba besando de una manera muy apasionada y yo me estaba dejando llevar por sus movimientos. De repente, siento que deja de besar mis labios, quita la mano que estaba en mi nuca, la pone en mi cachete y hace su camino por mi otro cachete para llegar a mi cuello y hacer que se me escapen unos cuantos gemidos de placer al sentir que me lo empieza a besar. Yo lo estaba disfrutando demasiado y lo abracé fuerte de la cadera contra mi cuerpo para sentir su calor junto con el mío. Me sorprendió bastante todo lo que estaba sucediendo.

"Espera" - Le dije

"¿Qué pasó?" - Me preguntó con su respiración agitada y con voz suave y grave, la cual me excitó más

"¿Crees que podamos hablar un momentito de esto?" - Le dije un poco apenado porque no quería interrumpir ni arruinar el momento

"Sí, claro"

Se me quitó de encima y se puso a mi lado, viéndome a los ojos.

"Ok... Entonces..." - Me quedé pensando por un segundo las palabras que iba a decir. Yo no quería que esto terminara, yo estaba muy excitado y quería sentir de nuevo ese placer que estaba sintiendo antes de que dejara de besarme el cuello, pero también quería que todo saliera bien y estuviéramos protegidos y listos para esto. - "Primero que nada... ¿Están tus papás?"

"No. Se fueron a una boda en Morelos, no van a volver hasta mañana en la noche" - Me respondió

"Ok. Segundo ¿Tienes condones?"