Capítulo 1

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Cuando le sacaron la venda de sus ojos pudo confirmar sus sospechas.

Estaba en una habitación cuadrada, con la pintura descascarada, harta de estar junto al yeso. No había ventanas. Lo único que los alumbraba eran dos focos de luz que estaban colgados por unos cables a plena vista.

Estaba rodeado por cuatro hombres. Todos mirándolo fijo ante cualquier movimiento que hagan. Aunque no podía hacer mucho con las alas, brazos y piernas atadas. Y ni hablar de su estado letárgico debido a los tranquilizantes. Ellos podían aprovechar su estado para golpearlo hasta el fin. Pero no daban ni un paso para adelante.

Por supuesto que no van a hacer nada sin la orden pensó.

Porque incluso estando atrás en la oscuridad él podía sentir a la quinta persona. Es difícil no notar su presencia pensó picaramente.

Y fue a esa dirección donde apuntaron sus ojos. Sus ojos aviarios lograron ver esos imponentes ojos turquesa que tanta fama tienen. Y que pocos lograron dignarse a ver.

-¿En serio? ¿Este lugar decidiste para nuestra primera cita Endeavor-san?- dijo sin mover su mirada- Esperaba un poco más de tu part..

No pudo ni reaccionar al golpe que le dieron del lado derecho de su cabeza de parte de uno de sus captores.

-!¿Quién te crees que sos para hablar así?!- gritó su golpeador- mutante de..

-Onima- contó la oración Endeavor.

-Lo siento Endeavor-sama.- dijo mirando rápidamente para atrás- No fue mi intención, simplemente traté de callarlo- trató explicarse nervioso.

-Fuera- fue la respuesta que recibió.

Onima caminó hacia la puerta. Sin antes hacer despedirse de Endeavor con una reverencia.

Uno se fue, quedan tres.

-No era necesario eso - comentó - sé cómo defenderme solo.

-Ese golpe no dice lo mismo- respondió Endeavor. Hawks juró ver un milímetro de sonrisa en sus labios.

Ese logro hizo sonreír a Hawks.

-Seguro que si alguien no me hubiese disparado dardos tranquilizantes como para dormir un elefante, y luego atado piernas y brazos, yo podría esquivar los golpes que cualquiera de esta sala me dé.

Podía sentir cómo la irritación de los tres hombres restantes aumentaba. Se notaba que no se habían enfrentado a alguien como Hawks. Pero ninguno podía hacer nada.

Se ve que también logró algo con Endeavor, porque empezó a caminar lentamente hacia la luz. Hacia él. Contadas veces pudo ver su silueta desde lejos. Pero ahora lo tenía caminando hacia su dirección.

A la par de que él se acercaba, sus hombres se alejaban.

Realmente es inmenso como un dios, Hawks no pudo evitar pensar. Tenía que calmar su mente, no podía distraerse.

Pero era difícil poder concentrarse cuando tenía al principal jefe de la mafia de todo Japón acercándose hasta él, un líder de un grupo de mutantes que buscan ganar un poco de dinero.

Endeavor se paró en frente de él. Hawks tuvo que arquear su cuello para poder seguir manteniendo la mirada. Vestía un impoluto traje azul oscuro, con camisa negra que estaba abotonada por gemelos dorados, y unos zapatos tan lustrados que daba pena que tocaran el piso sucio de este lugar. Seguro que todo eso salía más plata de la que Hawks había visto en su vida. No esperaba otra cosa de Endeavor.

-Solamente voy a admitir que no fuiste una presa fácil.

-Aw, me vas a hacer ruborizar.- dijo sonriendo- Esto es mucho para un primer encuentro, en especial viniendo de ti.

Trapped Bird | Endhawks Mafia AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora