Draco Malfoy era un niño de 11 años bastante pretencioso, y no era para menos con el apellido que tenía, Malfoy, tanto su padre como su abuelo eran conocidos magos en la comunidad mágica de Reino Unido, así como su bisabuelo, tatarabuelo y todos aquellos que vinieron antes de ellos. No sólo eso, si no que su madre también provenía de una larga línea de magos y brujas sangre pura, los Black.
Draco estaba apunto de comenzar sus estudios en el colegio Hogwarts de magia y hechicería, donde tanto él como sus padres estaban seguros que quedaría en la casa Slytherin, así que el verano previo a su ingreso fué a comprar todo lo necesario para comenzar la escuela.
Draco:-¿Qué nos falta comprar?- preguntó el rubio a sus padres ya un poco cansado por todo lo que habían recorrido.
Narcisa:-Sólo falta tu varita, cielo- le respondió su madre mientras acomodaba un mechón del pelo rubio de su hijo.
Narcisa era una mujer extremadamente bella pese a siempre tener cara de asco, tenía un hermoso cabello largo y rubio, además de tes pálida y ojos verdes con un brillo muy similar al de su hijo, Draco admiraba mucho a su madre aunque está no hiciera nada más que verse bonita e ir a tomar café con sus amigas después de comprar ropa y accesorios.
Lucius:-Seguro tendrás una varita hecha de la mejor de las maderas y con un poderoso nucleo, igual que yo eres un Malfoy, y solemos tener varitas poderosas, igual que los Black- comentó el hombre en un tono alzado y orgulloso.
Draco:-¿De verdad?- preguntó con cierta admiración el pequeño.
Narcisa:-Claro, tendrás una gran varita- agregó en tono serio.
Los tres rubios se encaminaron hacia una tienda llamada Olivander's, donde cada año los estudiantes de Hogwarts que ingresarían a su primer año de escuela iban a comprar sus varitas. Al entrar a aquel lugar este parecía vacío, sin embargo de la nada un anciano hombre con el cabello cano a la altura de los hombros salió de detrás del almacén hacia el mostrador.
Olivander:-Buenas tardes, supongo que necesitan una varita para el pequeño, ¿no es así?- dijo aquel hombre dirigiéndose a la familia.
Lucius:-De hecho si- dijo en un tono muy serio y seco
Olivander:-Bien, veamos...- dijo el hombre mientras regresaba al almacén tras él mostrador -Aquí tengo algo, fibra de corazón de dragón y madera de enzino- agregó mientras sacaba una varita con dichas características de su caja.
Draco tomó la varita y después de que el anciano se lo indicara este la agitó, causando un mini tornado que alborotó el cabello de los presentes y tiró todos los papeles que había en el escritorio.
Olivander:-Creo que me dejé guiar por las varitas de tus padres- dijo algo sorprendido mientas acomodaba su cabello -Aunque quiza conservemos el enzino de tu madre-
Narcisa alzó el rostro de manera orgullosa, tal como si acabara de superar a su marido en algo. Posterior a la observación realiza por Olivander, este le dió otra varita al niño, la cual tal como había dicho, conservaba la madera de enzino, sin embargo esta vez el núcleo era de pelo de unicornio.
Olivander:-Esta puede servirte, creo que refleja tu ser-
Draco agitó nuevamente la varita pero esta vez salió una pequeña luz de ella, luz que fué creciendo poco a poco hasta que toda la habitación se iluminó casi por completo.
Olivander:-Vaya señor Malfoy, usted tiene un alma muy pura- dijo el anciano dirigiéndose al pequeño -Puede lograr grandes cosas con su varita si tiene el suficiente talento-
Draco sabía que el vendedor conocía su apellido por el renombre de su familia, sin embargo no entendía como era que supuestamente conocía su alma, además de que jamás en su corta vida había escuchado algo similar, sin embargo este lo tomó hasta cierto punto como un cumplido, ya que indicaba que era especial al igual que su padre y madre, él siempre había querido destacar y se reconocido, por lo cual le encataba oír esas palabras pese a no entenderlas del todo.
Pasaron un par de semanas hasta que llegó el 1ro de septiembre, por fin era el día en que Draco iría a Hogwarts, por lo cual se encontraba muy emocionado; un día antes el chico había preparado y empacado todas sus cosas para no perder tiempo a la mañana siguiente.
Narcisa:-Ya tenemos que irnos, Draco- le anunció la mujer a su hijo en la mañana del día 1ro.
Lucius:-¡DOBBY!- gritó el hombre -¿Dónde está ese maldito elfo?- agregó dirigiéndose a su mujer.
Justo entonces apareció una criatura de baja talla, tenía grandes orejas y piel rugosa, además de que vestía sucios arapos.
Lucius:-¡¿Dónde estabas inútil?!- le gritó furioso a la criatura.
Dobby:-Doby estaba lavando los platos del desayuno como la ama Narcisa le ordenó- respondió con miedo mientras avanzaba lentamente hacia la pareja.
Narcisa:-Te pedí eso hace 20 minutos- replicó la mujer mientras hacía cara de asco.
Lucius:-¡¿Te tardaste 20 putos minutos en lavar 2 tristes platos y una taza?!- gritó nuevamente.
Mientras eso pasaba Draco terminaba de cambiarse y cuando escuchó los gritos de su padre supo que en cualquier instante algo o más bien alguien orejón azotaría en el suelo. Lucius era un hombre alzado y que se sentía superior a todos, por lo cual generalmente mantenía un semblante frío y lleno de presunción, sin embargo cuando se trataba del elfo doméstico de la familia, este de sacaba su lado más violento y agresivo, le gritaba, lo golpeaba, humillaba y sobajaba hasta el artasgo, era casi como un pasatiempo.
Draco:-Ya estoy listo- exclamó el pequeño cuando terminó de bajar las escaleras.
Narcisa:-Perfecto- respondió con calma -Amor, ya deja que Dobby se levante, tenemos que irnos- añadió con la misma calma.
Lucius:-Si, ya voy- respondió mientras le quitaba su varita bastón del abdomen al elfo, el cual se encontraba en el suelo - Ya levántate, ¡y apurate!- le gritó a la criatura mientras este hacía lo indicado.
Al salir de casa, la mansión Malfoy, Dobby se encontraba cargando la maleta (baúl) de Draco, mientras que la familia iba de lo más tranquila sin cargar nada. Al llegar a la estación de trenes KingsCross los padres del rubio hicieron cara de asco en cuanto pusieron un pie dentro, esto debido al enorme tránsito de muggles (gente no mágica).
Narcisa:-Muy bien hijo, ahora tenemos que ir al andén 9 ¾, toma tu baúl- le indicó con cierta dulzura a su hijo, o bueno, toda la dulzura que la mujer podía brindar.
Draco:-¿No se la va a llevar Dobby?- cuestionó el niño, que estaba acostumbrado a que el elfo hiciera todo en casa.
Narcisa:-No cielo, esta vez te toca a ti, él no puede ser visto por muggles, por eso regresó a la mansión en cuanto llegamos a territorio no mágico-
Draco:-Bueno, que me queda- respondió el rubio con algo de fastidio mientras tomaba su baúl.
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Malfoy en Gryffindor
FanficDespués de que a los once años Draco Malfoy fuera colocado en Gryffindor por el sombrero seleccionador, este es abandonado por sus padres y acogido por sus nuevos amigos y familia. . . . . Esta historia está basada en una imagen que encontré en pint...