No Me Atrevo a Pedir un Beso

Capítulo 02: En sus ojos

Todos los meses, Liu Mingyan viene a su pico y toman el té. Está agradecido con Qi Qingqi por permitir que Mingyan venga a "su pico bruto", aunque solo sea porque Liu Mingyan es su querida discípula principal.

Mingyan se sienta frente a él, con los ojos entrecerrados. Sorbe con gracia su té. Aún no ha dicho una palabra, lo que significa que hay algo que le preocupa. Pase lo que pase, él siempre la verá como lsu pequeña Ming-mei, su querida hermana de ojos redondos y mejillas regordetas. Eso le preocupa. Ya era mayor, pero eso no significaba que no tuviera sus problemas.

Antes de que pueda preguntarle qué le pasa, ella se remueve en su asiento y se aclara la garganta.

"Shen Qingqiu", dice sin preámbulos. "¿Cómo es?"

Mingyan siempre ha estado más... en contacto con sus emociones que Liu Qingge. No le sorprende que se lo pregunte, probablemente sabía que amaba a ese hombre antes de que él se diera cuenta. Él piensa cuidadosamente sobre la pregunta.

¿Cómo es Shen Qingqiu? Es grácil y elegante. Encantador, elocuente. Amable. Es indulgente. Hermoso. Shen Qingqiu es apasionado y adorable. Su amor por la literatura, no sólo la poesía y los clásicos propios de un erudito, es divertido. Cree que Mingyan se llevaría bien con Shen Qingqiu, debería presentarlos. El hombre al que ama y Ming-mei juntos, hablando de literatura con entusiasmo. Tal vez Ming-mei dejaría que el Señor del Pico Qing Jing, su amante, leyera las historias que ella escribe -ella se negó a que él las leyera, pero tal vez a Shen Qingqiu sí se lo permitirían.

Se está desviando- Mingyan sigue esperando pacientemente su respuesta.

"Es... encantador", contesta con cierta flojera. Los ojos de Mingyan se abren en un asombro mal disimulado, pero vuelve a una expresión impasible mientras continúa.

"Es..." se esfuerza por expresar con palabras la profundidad de sus sentimientos, de su afecto. "Es un buen hombre".

Mingyan deja con cuidado su taza de té.

"Ge-ge..." empieza con delicadeza. Él se tensa, porque ella ya no lo llama Ge-ge, a menos que haya pasado algo muy malo. Está listo para llamar a Cheng Luan y deshacerse de su problema cuando ella vuelve a hablar. "¿Qué sientes por Shen Qingqiu?"

Él parpadea. La respuesta es bastante obvia, ¿no?

"Lo amo", responde con sencillez. Mira la taza de té que tiene en las manos. Después añade: "Pienso cortejarlo".

Cuando por fin levanta la vista, Mingyan está inclinada sobre la mesa con los ojos brillantes. Parece emocionada de una manera que hace que Liu Qingge se sienta un poco cauteloso.

"¿De verdad?" Saca un diario, ya con un pincel en la mano. "Cuéntame sobre eso".

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Hay una reunión de la secta.

Shen Qingqiu se sienta junto a él, citando el hecho de que "Liu-shidi es un conversador sorprendentemente bueno", ignorando por completo el hecho de que como segundo al mando, debería haberse sentado junto al Líder de la Secta. Pero están cortejándose (no es que nadie lo sepa todavía), así que está bien que Shen Qingqiu se siente a su lado. Al final no importa, porque los ojos de Shen Qingqiu están puestos en él y su silla está colocada cerca, pero lo suficientemente lejos como para ser apropiada para un ambiente formal. Ignora resueltamente las miradas que le lanzan los demás señores de la cima, centrándose en Shen Qingqiu.

Como de costumbre, Shang Qinghua divaga sobre los costes de reposición. Liu Qingge piensa en privado que ese hombre es como un topo o algún otro pequeño roedor. Aun así, el Señor del Pico An Ding es amigo de Shen Qingqiu, así que lo aguantará.